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- ¿Sangre?

En ese momento Jungkook recordó una clase de su profesora sexy. Casi nunca prestaba atención por estar más pendiente de su cuerpo, pero aún así tenía recuerdos a medias sobre el tema del cuerpo humano y la sangre.

El semen también era sangre, joder.

Un foquito pareció encenderse en su cabeza, terminando de sacar los últimos restos de semen en la boca del vampiro - quien sonreía feliz terminando de tragar- en ese entonces Jungkook lanzó un gemido cuando Yoongi tomó su pene por impulso tratando de sacar más. Le hacía sentir en la gloria, y puso sus ojos en blanco, por el placer de al fin probar una mamada.

-¡Mierda! Ya veo que Hoseok no mentía. No me importaría que la estúpida de su novia lo hubiese hecho, pero joder, esto se siente tan bien...

- ¿Quieres que siga am...-- Yoongi  no fue capaz de terminar su oración porque Jungkook lo tomó del cabello, metiendo más de su pene en la garganta del pálido, logrando que se atragantara.

El castaño movía la cabeza del vampiro hacia atras y adelante, deleitándose con el placer de sentir la calidez de la boca de Yoongi, el cual gemía por lo bajo, con sus mejillas rojizas, sus ojos llorosos, y sonreía sintiéndose orgulloso de poder satisfacer las necesidades de su amo.

- No pares, Yoongi. -- Jungkook sintió sus piernas temblar, y una corriente eléctrica mucho más fuerte recorrió su espina dorsal, logrando sacarle una arcada.

El castaño solo quería enmarcar la imagen de Yoongi con su pene adentro, sintiendo que era lo más lindo que podía ver en ese momento. No aguantando más se volvió a correr en la boca del vampiro, quien gemía aún más, atragantándose con todo el semen y el miembro del más alto, sintiendo aquel líquido que le daba vida y llenaba su estómago. Era tan calientito, de no ser porque Yoongi perdió su memoria podría asimilarlo a una taza de leche caliente sabrosa.

Jungkook se dejó caer a la cama, lanzando un suspiro de satisfacción, al momento que limpiaba su frente sudorosa, al igual que las sábanas de su cama limpiaban el de su espalda.

Yoongi se dejó caer al piso, pero enseguida dio un salto, lanzadose al cuerpo del castaño, logrando sacarle el aire y éste empezó a toser.

- Gracias, Jungkook, gracias. Me estaba muriendo de hambre, y tu sangre es muy sabrosa, parece que me siento mejor. ¿Me seguirás alimentando? Prometo no cortarte el cuello, ni usar mis poderes. -- dijo el más bajo, sonriendo muy feliz.

Qué propuesta más encantadora, quedarme con vida sin duda es algo que podría negar- fue lo que sarcásticamente Jungkook pensó.

Yoongi se podía decir que había desarrollado cierto aprecio hacia Jungkook, ya que tenía tanta hambre que lo vio como su salvador, y sentía que de alguna manera el castaño le agradó, sus caras al momento que lo alimentaba le parecían muy hermosas y sus gestos de felicidad pensaban que eran recíprocos.

- Yoongi...tengo una idea.

-¿Podrías compartirla conmigo?

- ¡Ya te comparto de mi pene ¿En serio no te conformas?!

Yoongi se sintió mal por las palabras del otro y empezó a llorar. Jungkook sintió lástima de verlo tan frágil llorando aparte que él sólo lo hacía por bromear, nunca pensó que el pálido no fuese a captar su indirecta.

Se acercó a él abrazándolo.

- Tranquilo, no llores, solo es una broma.

-¿Broma? ¿Qué es eso? -- dijo Yoongi, limpiando sus mocos con la manga de su sueter.

- ¿En serio no sabes qué es una broma?

- El señor Park dijo que mis recuerdos habían sido borrados, supongo que eso explica el porqué.

Jungkook parecía no creerlo, pero habían pasado tantas cosas raras en su día que no le fue imposible tratar de asimilarlo. Después de todo se había topado con un vampiro, iba a morir, había perdido su virginidad, por fin, había probado una mamada, por fin.

No pensó que un hombre lo iba a desvirgar, pero algo es algo y estuvo fabuloso.

- Una broma es algo que es una mentira, pero es para que te rías.

- Ah, ¡Entonces me tengo que reír? Pero a mí me hace reír algo mmm... no sé.

- Vamos, tienes que recordar algo que te haga reír. No puedes ir ahí por el mundo con cara de culo, como Yeji. Aunque ella sonríe cuando está con Hoseok.

-¿Yeji? ¿Hoseok?

- Ellos son mis amigos.

- ¡Oh! Esos sí sé qué son, el señor Park me dejó leer un rato el almanaque y según dice una regla de todos los vampiros es que no tenía que tener amigos, y si los tenía al menos si eran humanos no debían saber que yo soy un vampiro.

- Vaya, ¿Tienen muchas reglas? -- Yoongi asintió-- De igual manera no creo que sea problema para lo que tengo en mente.

- ¿Jungkook?

- ¿Uh?

- ¿Podría cambiarme?

Jungkook lo volvió a ver notando como el palido estaba desnudo, de rodillas en la cama, con sus pezones rosaditos a la vista, al igual que su suave y reluciente piel. Para él, Yoongi era una belleza un tanto...extraña, pero no de una mala manera, si no más bien algo difícil de encontrar, un vampiro que la chupaba rico y se dejaba follar ¿Qué más podía pedir?

Aparte de que el más bajo le llamaba "amo" Como una manera de sumisión, y era la primera vez que Jungkook se sentía querido o preciado. Aparte de Hoseok y su hermano, él parecía ser una especie de persona invisible, él era un perdedor que solo pasaba observando a  las chicas en los vestidores  y a su profesora; sin duda una compañía como su propio chico no le vendría mal.

-Yoongi, vive conmigo, por favor.


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Bébeme • [Kookgi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora