- Señorita ______ Russell, usted me está colmando la paciencia - Mi mama se paro al frente mío, con las manos en la cintura -¡Párate mierda! ¡¿Qué crees que tengo todo el día?! – ese grito me asusto, la luz entro a mis ojos y no lo soportaba, tenía mucho sueño.
- ¡Ya voy! Por favor mamaaa, tengo que acostumbrarme a estos horarios– me pare y me empecé a quitar la ropa para bañarme con los ojos aun cerrados.
- Siempre es lo mismo, si no es una es la otra, ayer no sacaste la basura, y llegaste demasiado tarde, pobre de que me entere de que estás haciendo cosas que hagan que me decepcione, a veces hay que estar de tras de uno, pendiente de lo que hace, por qué crees que perdemos la confianza, es bastante mayorcita como para irte a levantar – bla bla bla… me empezó a sacar en cara todo, que cree que me voy a lugares, ya quisiera irme de esta casa, cuando está enojada no hay nadie quien la caye, ¡esto es irritante! A mi hermana la para gritando, aunque también se lo merece - Ha! Ítalo acaba de pasar por ti, estaba algo apurado, así que le dije que iras sola – el enojo se le paso.
- ¿Tan tarde me he despertado? – gire mi cabeza para ver el reloj en mi mesita – es demasiado - Mi mama se puso hablar pero no la alcance a escuchar, Salí corriendo al baño, me cambie y todo eso, tome mi desayuno, me lave los dientes, y salí volando de la casa.
Legue y todos me miraron como diciendo “¿Y donde esta Ítalo?”, no hice caso y sin mirar a nadie, corrí a mi salón… Tarde.
- Señorita, usted acaba de llegar tarde, lamentablemente no podrá realizar esta clase, tendrá que esperar a la siguiente - estúpido señor, me cerró la puerta en mis narices, tendré que caminar, y esperar el pinche timbre… Pensaba en cómo será la supuesta reunión privada de Harry, cuando lo vea, juro que lo abrazare con todas mis fuerzas, Alice y Ítalo me tiene que acompañar.
- ¡_____! ¿También te quedaste? - pregunto Ítalo de tras de mi.
- Hola! Lo siento, pero me quede dormida – le di una media sonrisa, el rio.
- No te preocupes, yo … - dio una pausa – también. – reí.
- Soy tu mejor amiga¿ verdad? - lo mire fijamente.
- si
- Entonces ¿no hay algo que me quieras contar? – trate de brindarle confianza.
- mmmm …. No lo creo – miro a algún lugar.
- Bueno, caminemos – tal vez el no me lo cuente, pero Alice sí. – HA! ¡ADIVIDA!
- que – me miro no tan sorprendido.
- A que no sabes a quien conocí - una amplia sonrisa se formo en mi rostro.
- A quien – me miro desconcertado al decir alguien.
- a HARRY STYLES! Y me invito a su fiesta, es realmente guapo– grite., la emoción me invadía- ¿Estás bien? - su mirada me preocupo
- A que bien que lo hayas conocido, y si, si estoy bien – salió una voz fría.
- Italooo – alargue - ¿Qué pasa?.
- mmm…. Tengo algo que contarte – su mirada me atravesó, y transmitía un arrepentimiento.
- Sabes que soy tu mejor amiga, dime – esto me está preocupando.
- Es que no se cómo empezar – dio una pausa, un respiro profundo y continuo - todo comenzó cuando pelee con mi madre, Salí de mi casa a tomar aire, y te conocí, me pareces una chica muy atractiva, hermosa, pero luego me dejas solo con Alice, una chica curiosa, simpática, muy graciosa, fuimos al cine, pero no había una película que nos llame la atención – continuo – Entonces la invite a comer algo para que no nos aburriéramos, y bueno creo que me pase de copas, le dije que era la chica más linda del mundo, luego la acompañe a su casa, sus papas no estaban y… paso, de la nada paso – su mirada se dirigió al suelo.
