POWERFUL (bysTaXx)

10. Sin poderlo evitar

Frank coge una piedra y la lanza lejos de sí. Entonces escucha el motor de un coche y luego desaparecer, levanta la mirada y ve a Aarón salir del automóvil y luego a Rafael.

Es obvio que Frank necesita respuestas sobre Yegor y Rafael, esto no se puede quedar así.

—¿Qué haces tan temprano un Lunes? —Aarón está sorprendido y maravillado

—Ser un buen empleado —Frank se levanta del suelo y saluda a su jefe con un apretón de manos.

Rafael mira a Frank y siente la tensión. Frank mira a Aarón abrir el gimnasio y cuando Rafael va a entrar también, Frank pone su brazo en frente de él y le detiene.

—Hablemos de Yegor —Frank es directo, no quiere ser muy paciente en un tema que le está ocasionando problemas ilegales

Rafael mira con miedo a Frank.

(...)

—Le pedí a Yegor que fuese de sicario, que matase a mi jefe, ya que se metió en la cama con mi esposa. Un día cualquiera choqué mi auto y gasté mi dinero en el arreglo, sin enterarme que tenía que pagarle a Yegor, así que poco a poco le estoy pagando haciendo algunos trabajos, más conocidos como robos, y entregas de mezcla para drogadictos —Rafael le explica a Frank para que él entienda la seriedad del problema

—Sí lo hubiese sabido antes... te defendí pensando que eras inocente —Frank se odia por haberlo hecho

—Hombre, lo que hiciste en esa tienda fue extra, pero lo aprecié mucho, es más... he estado considerándolo dar mi vida para que Yegor no te toque ni un pelo —Rafael está hablando en serio.

Frank levanta una ceja. Deshace el cruce de sus brazos para usar su dedo índice y señalar su ojo un poco morado

—¿Ves esto? —Frank habla con dientes apretados —Yegor ya me tiene como su marioneta, tengo que pelear para él para recompensar a sus dos mejores hombres lesionados en esa tienda —Está a punto de estallar

—¿Qué? —Rafael frunce el ceño

—Hasta un espía tengo —Frank señala con su brazo al otro lado de la calle.

Hay un hombre sentado en un banco, con el periódico en sus manos y lentes de sol, baja el periódico y le lanza un beso a Frank solo para molestarle.

—¡Ahora vive en mi casa! —Frank sigue restregándole el error que cometió

—No-No lo sabía —Rafael se pone algo nervioso

—Claro que no lo sabías —Frank está furioso.

—¿Y qué puedo hacer para no sentirme una mierda, Frank? —Rafael entonces pone su mano en el pecho de Frank para llamarle la atención

—Decirle a Aarón que iré por unos cafés —obviamente eso no lo esperaba Rafael.

Frank se gira y comienza su travesía a la primera cafetería que encuentre. Quiere relajarse y nada mejor que cafeína para su cuerpo.

Cuando Santiago ve que Frank se aleja, va inmediatamente detrás de él hasta alcanzarle y pasar un brazo por encima de los hombros anchos de Frank, hasta que este último quita ese brazo.

Evade su espacio personal.

(...)

—¿Qué desea? —Dice el cajero, que por cierto es joven.

—Tres cafés con dos de azúcar —Dice Frank empezando a sacar su billetera para pagar.

—Que sean cuatro —Corrige Santiago suponiendo que Frank lo quiso saltar