Capítulo 11.

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¿En serio estaba presenciando este ridículo espectáculo? ¿Yo, que hace menos de 24 horas era quien besaba sus labios, claro, con muchísimo menos de... babosidad? Increíble. Simplemente no podía creer lo que mis ojos, y los de toda la cafetería, estaban devorando como una presa fácil. Me debatía mentalmente por seguir viéndolos o seguir jugando con mi carne misteriosa, que era algo menos repugnante.

-¡_____!- Gritó Zayn.

-¿Qué?- Respondí saltando de la silla y desviando finalmente la mirada.

-No les pongas atención, Harry es un tonto.

-Lo sé- Dije con seriedad.

-¿Lo sabes?- Preguntó con curiosidad.

-Zayn... No soy ni la primera ni la última chica que besará... Evidentemente- Sacudí la cabeza. -Eso no cambia las cosas. Tal y como dicta la regla seis.

-¿La regla seis?

-Sí... Las tontas reglas que Harry puso en nuestra especie de amistad parasitismo: "Nada ha cambiado entre nosotros".

No sé ni como recordé aquella última regla, pero supongo que debí tenerla presente en el mismo momento que Harry me besaba. Y es que es estúpido: ¿En verdad llegué a creer por un segundo que él me había besado, más allá de afirmar mi cruel comentario, porque tenía un vago interés en mi? ¡Reacciona, _____! Harry Styles no es esa clase de chico. Es sólo busca divertirse y ya. Jamás había tenido una sola relación seria en toda su vida, y no la tendría mientras estuviese en la escuela. Probablemente ni sentaría cabeza alguna vez. Ni se enamoraría y sería un triste ermitaño toda su pobre vida y...

¿Y por qué demonios me importa tanto lo que haga Harry o no con su vida amorosa? Quiero decir, no formo, ni formaré parte de ella por más que yo quiera... ¡Y no es como sí yo quisiera! Quiero decir... ¡Por Dios! ¿Quién podría salir con ese patán? ¿quién podría tan siquiera considerarlo? Además de esa desagradable porrista, nadie está interesada de esa manera en él.

Viernes.

-¡Dame sólo un minuto!- Grité desde la profundidad de mi habitación.

-¡Te he esperado un minutos los últimos 20 minutos de mi vida! ¿¡Cuantos más minutos tendrán que pasar antes de que empiece a morir?!- Respondió, de igual manera Zayn desde la planta baja de mi casa.

-Tienes suerte que se esté arreglando- Dijo mi madre, haciéndose a un lado del moreno. -Pensaba irse con un suéter negro y unos jeans rotos.

-¿A una fiesta? ¿_____?- Protestó con sarcasmo, pues tanto él como mamá sabían que no era exactamente una chica de tanto cuidado estético como debería. Aun que tampoco era una desaliñada que usaba ropa ancha y cola de caballo todo el tiempo. Más bien era algo como: alisar mi cabello hasta que quedara muy lindo y luego cubrirlo como si nada con una extraña gorrita.

-¡______, juro que si no bajas en este instante me iré sin ti!- Repitió por última vez.

-¡Ya estoy lista tonto!- Dije, mientras me acercaba a la baranda de las escaleras y, acto seguido, bajé estás. No lentamente como a la chica promedio que la llevan a su baile de graduación, sino a toda velocidad, sin darle tiempo a Zayn de observarme con sorpresa desde lo alto, aunque finalmente, si quedó impresionado con mi vestimenta para fiestas [Ropa en multimedia]

-¡Hey! ¡Te vez bien!

-Gracias, ahora... Ya que tenías prisa- Le señalé la puerta con las manos, decentemente.

Ambos nos despedimos de mis padres y volamos a las fiesta en el auto de Zayn.

-¿Estás segura que quieres ir?- Preguntó amablemente mi amigo justo antes de bajarnos del auto.

-Emm...- Tomé aire. -Sí, será solo una tranquila fiesta.

Pero no era solo una tranquila fiesta. Casi toda la escuela estaba en la, ya destrozada, casa de Kendra festejando de lo lindo. Ya había iniciado y al parecer hace un buen tiempo. Pero Zayn, mi "tardanza" en "arreglarme" y su lógica de chico popular nos hizo llegar con casi dos hora de retraso. Atravesamos el jardín lleno de papel sanitario, latas y botellas de cerveza, una pareja tragándose a besos en medio y margaritas estropeadas.

Al ingresar por la puerta, el desastre era cincuenta mil veces más terrible que el anterior. La casa estaba a reventar, todo el mundo bailaba, bebía, vomitaba o hacía cualquier tontería. La recarga hormonal se sentía apenas ponías un píe allí adentro. Habría un tipo tan ebrio que ya estaba dormido en el suelo con un montón de dibujos en su cara, quise enseñárselo a Zayn pero ¡ya no estaba! Al parecer uno de sus muchos amigos le había propuesto un buen negocio de noche, y con esto me refiero a que "había una chica ansiosa por conocer a Zayn y a toda su anatomía en la habitación de los padres de Kendra". Y entonces era yo, sola por completo, para como una tonta en la puerta de toda la fiesta, gracias al cielo, sin ninguna mirada sobre mi.

-Miren quién está aquí...- Escuché, reconsiderando mi afirmación anterior. Desafortunadamente no era invisible. -Sí es _____, saliendo de su casa por primera vez.

Todos los presentes allí estallaron en risas con los comentarios malaventurados de Harry, junto con su porrista agarrada de su cuello como una garrapata.

Nuevamente tenía que ver esto, y tanto y tanto Harry con otra chica empezaba a desagradarme, y yo no tenía idea de porqué...

Continuará...

Entre el bullying y el amor [Harry Styles y tu] (Adaptada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora