05Irusu

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居留

Y acabamos con algo que todos hacemos de vez en cuando.

Me parecía increíble como conversaban sobre Muzan y de lo terrible que era, y yo hasta hace unas cuantas horas estaba con él. Con solo observarlos estaban deseosos de acabar con Kibutsuji... y si era verdad todo lo que decían, hasta yo estuviese ansiosa de terminar con él, sin embargo, una gran parte de mi quería hacer caso omiso, e ocultar el hecho de que estuve con su tan añorado Kibutsuji.


Y así fue... Segunda mala decisión tomada.

Esa noche, tuve una conversación nuevamente con mi padre, de nuevo hablábamos sobre mi inútil seguridad, todo se salió de control.

Me preparaba para dormir, estaba agotada, escuché que tocaban mi puerta y al volver a ver, era mi padre quien me observaba.

- Padre. - comenté.

Mi padre sonríe y se acerca a mí.- Hanan, vengo a conversar contigo.

Temía porque me preguntara por Muzan, porqué le mentiría a él. - Dime, padre.

- ¿Por qué haces caso omiso a mis indicaciones? Sabes a lo que me refiero Hanan, no quiero excusas. - increpó.

Su mirada cambió, se estaba empezando a enojar, había elevado su voz. De nuevo volvíamos hablar sobre ese tema, sobre mi.

- Te daré una excusa padre, quiero ser libre. - me defendí.

Y por primera vez en dieciocho años escuché una risa burlesca que salió de su boca. Me sentí abrumada y burlada, él no entendía mis deseos, era inútil conversarlo.

- Hija mía, eso es imposible cuando eres Hanan Ubuyashiki, mi hija menor. Entiéndelo, estás en constante peligro mientras exista Muzan Kibutsuji.

Tuve un escalofrío cuando mencionó su nombre. Entonces ¿Por qué me protegería? Si es tan malévolo como expresa mi padre.
No podía contarle a él que ya me había reunido con Muzan, no me creería y me encerraría por el resto de mi vida.

Sentía mis ojos arder, las lágrimas estaban anunciando su llegada, como es de costumbre. - Padre, déjame descansar. - lloriqueé.

De forma rápida me acuesto en mi cama, sentía impotencia; aunque quisiera no podía consolar el sueño. Perdí la noción de las horas pasadas y seguía sin poder descansar. Sino al contrario decidí levantarme, y salir a tomar aire en la parte frontal de mu hogar. Al estar afuera estaba más frío de lo normal, según mi reloj eran las doce y media de la noche.

Lo que hice esa noche fue de puro gusto y rebeldía, ya que decidí salir de mi hogar a esa hora; mi objetivo era encontrarme de nuevo a Kibutsuji.

Y fue más fácil de lo que imaginé.

Koi No Yokan  恋の予感   [ Muzan Kibutsuji ] COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora