Capitulo No. 03- Una Mirada al Pasado

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Ninguno de los jóvenes se recuperaba de la impresión causada por la nana.

Catriona caminaba muy satisfecha consigo misma, en cierto modo estaba muy contenta… la verdad fuera dicha, Aileen le agradaba, y aún más al ver el ahínco con el que trabajo por personas que ni siquiera conocía, sabía que Craig había hecho una muy buena elección, ella no estaba de acuerdo en el compromiso que querían concertar con Gilly McPherson, ya fuera por alianzas o por lo que fuera, ella deseaba que Craig fuera libre de escoger, no quería verlo atado a un matrimonio forzado y ver como su vida era consumida por la amargura… pero por los huesos de sus antepasados!! Craig lo había hecho!! Y aunque no la conocía por completo, su corazón e instinto le decía que la elección que había hecho era la mejor!! Si tan solo Graham y Craig supieran la verdad!!

Pero eso eran cosas del pasado, tiempos tan lejanos que ahora solo Vivian en el corazón de una anciana.

Pero habían cosas más importantes en las que pensar, mientras caminaba en silencio por los mudos pasillos del castillo, meditaba evocando otros tiempos, el lugar ahora lúgubre por la sombra de la muerte que se cernía sobre él, tuvo mejores épocas, los pasillos ahora vacíos, antes habían estado llenos de vida, de sonrisas, de fiestas… fue en una de esas fiestas a la que sus padres la obligaron a ir, donde lo miró por primera vez!! Fue en ese mismo castillo en donde conoció al amor de su vida, al hombre a quien amó con todas sus fuerzas, y quien la amó a ella con igual o más intensidad… pero aunque se amaron de esa forma, el destino de ellos era no estar juntos… habían muchas cosas que los separaron, situaciones que eran más fuertes e importantes que el amor de dos jóvenes.

Se detuvo frente a un espejo y mirándose, toco su rostro y susurró:

Se detuvo frente a un espejo y mirándose, toco su rostro y susurró:

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-Si, también la vieja Catriona tuvo mejores tiempos!!

Recordó también el día en que se despidió de su gran amor, tanto él como ella iban a casarse con otras personas, él porque era su obligación, y ella… pues porque debía hacerlo, ya estaba en edad casadera y sus padres ya habían arreglado su boda con un hombre del clan, muy mayor para ella, incluso mayor que su padre, pero de muy buena posición económica.

Vino a su mente la desesperación que dominó a los enamorados al despedirse, el dolor de dos corazones rotos, la frustración de un amor que estaba condenado a nunca realizarse, pues el era un señor y ella era… simplemente una muchacha cualquiera, el destino de ese sentimiento era morir ahogado por las situaciones, a perecer por los deberes de cada uno…

Y quizás fue por ese sentimiento de desazón, de pérdida, de desesperación… que se entregaron el uno al otro, hicieron el amor como dos locos para los cuales ya no había mañana, no poniéndose a pensar en las consecuencias, aun mas para ella que ya no llegaría pura a su lecho de casada, pero nada importó en ese momento, más que ellos… y aunque la vida los condenara a vivir con otras personas, Catriona le pertenecía a él y el a ella… y esa pertenencia fue irreversible… eterna.

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Un cansado suspiro salió de la anciana… cuánto pesaba el pasado, y aún más lo hacían los secretos… no poder gritar a los cuatro vientos que…

Ya para qué?? Ella se había convertido en alguien especialista en guardar muchos secretos, muchas cosas de las que se dio cuenta, que vio o que escuchó, por el motivo que fuera, ella acumulo mucha información de vidas ajenas, pero que fiel a su estilo, decidió callar.

Su matrimonio no duró mucho, y siendo viuda tenía más libertad de moverse a donde quisiera… aunque era muy joven, ya no le rendía cuentas a sus padres… su cuerpo era libre, más su alma y corazón… nunca lo fueron.

Vio crecer a Graham a lo lejos… convertirse en un hombre, casarse con la exultante Alison, venida de un clan pequeño, que buscaba la protección del clan Campbell, pero vio como nació el amor entre ellos cuando se casaron, logrando conformar un hermoso matrimonio… como debía serlo.

Por órdenes del padre de Graham, enviaron a por ella cuando Craig nació, Alison enfermó a tal punto que creyeron que la perderían, tomando al pequeño Craig en sus brazos, por voluntad de los dioses Alison se recuperó, y tuvieron a bien mantenerla a ella como la nana del niño, y así, ella se unió a la familia del Laird… Que irónica puede ser la vida!!

-Ahhh vida!! Eres una perra!!

Siguió su recorrido por las estancias del castillo, quizás por cosas de la edad, ya el sueño no era un amigo, para ella, dormir un par de horas al día era más que suficiente, así que como ánima recorría todas las noches el castillo Campbell, ya a los soldados que hacían guardia no les extrañaba ver luz del candelabro iluminar los pasillos, sabían que era la vieja Catriona.

Una sonrisa se dibujaba en su arrugada boca, pues empezaron a tejerse muchas historias alrededor de ella por sus costumbres nocturnas, incluso la usaban para asustar a los niños, diciéndoles que de portarse mal serían llevados ante el fantasma del...

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Una sonrisa se dibujaba en su arrugada boca, pues empezaron a tejerse muchas historias alrededor de ella por sus costumbres nocturnas, incluso la usaban para asustar a los niños, diciéndoles que de portarse mal serían llevados ante el fantasma del candelabro, que rondaba todas las noches el castillo, buscando niños!!!

Una sonrisa se dibujaba en su arrugada boca, pues empezaron a tejerse muchas historias alrededor de ella por sus costumbres nocturnas, incluso la usaban para asustar a los niños, diciéndoles que de portarse mal serían llevados ante el fantasma del...

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Quizás si había algo de cierto en los fantasmas… quizás ella los buscaba todas las noches, o quizás es que ellos eran su única compañía, vagaba sola por todos los pasillos, conocía cada recoveco, cada túnel, cada grieta… conocía tanto!! Solo respetaba las habitaciones de los señores.

Amor en las Tierras CampbellDonde viven las historias. Descúbrelo ahora