Capítulo 31

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Allison

A cada segundo que paso con Nick mis sentimientos hacia él crecen. Y se que es peligroso que se den este tipo de pequeños y, en apariencia, insignificantes momentos entre nosotros, pero no puedo controlarme cuando se trata de él.

Cuándo llegamos al consorcio nos topamos con el dueño; Stefan. Es un hombre alto, sudoroso, y con exceso de gomina que huele a nicotina y a cuero. Mientras me acerco y hablo con él, Nick se queda cerca. Cuando me muestra el Prius, le echo un vistazo y decido no quedármelo, tiene un aspecto de que se destrozará en cuanto salga del aparcamiento, y según Stefan tiene una norma estricta de no aceptar devoluciones.

Luego de salir de aquel lugar vamos a visitar unos cuantos distribuidores más, y todos son igual de cutres, incluso peor. Después de pasar la mañana con incontables hombres de calva incipiente, decido suspender la búsqueda del coche. Tendré que alejarme mucho más del campus para encontrar uno decente, y hoy ya no me apetece seguir con ello. El día está yendo mucho mejor de lo que esperaba, y por una vez siento que podríamos pasar el semestre sin matarnos el uno al otro.

Mientras volvemos devuelta al campus, nos detenemos en un local de comida rápida. Nick me dice que busque un sitio libre, y él va a por la comida. Un rato después vuelve con mucha comida; Snacks, pizza, sándwiches, y soda. Tiene una pinta exquisita. No consigo comer la mitad del mío, pero Nick acaba felizmente con lo suyo y los restos del mío. Cuando salimos del local caminamos hasta una heladería muy cerca de allí. Nos acercamos a la caja y pagamos lo nuestro, cuando estamos por salir un hombre se nos cruza en el camino.

—¿Nick?—habla el hombre.

El hombre sujeta una bolsa con muchas clases de helado y una bandeja llena de tarrinas de yogur.

  —Ah... hola—dice Nick cortante.

No se quien debe ser ese hombre, pero pone incómodo a Nick. El hombre es alto como él. Sus ojos son del mismo color, aunque el del hombre es más verde que azul. Aparte de que lleva puesto unos pantalones de vestir, y un chaleco de vestir un tono más oscuro que su pantalón. En su cabello se puede distinguir algunas canas repartidas por los lados, y su porte es fríamente profesional. Hasta que sonríe, eso es, y muestra una amabilidad similar a la de Nick cuando deja de empeñarse en comportarse como un imbécil.

Y me atrevo a decir que puede que sea su padre. Tiene mucha semejanza a él.

  —Hola, soy Allison—me presento con educación al mismo tiempo que le tiendo la mano.

Nick me lanza una mirada fulminante, pero lo ignoro. No es que él fuera a presentarme.

  —Hola, Allison, soy Marc, el padre de Nicholas— dice el hombre, y me estrecha la mano. Lo sabía, sabía que era su padre—. No me habías dicho que tenías novia—añade dirigiéndose a él.

Quiero mantener a raya el mal humor de Nicholas y decirle a su padre que no soy su novia, pero él se me adelanta.

—¿Que haces aquí?— pregunta Nick con la voz seca.

  —Estamos aquí por qué Kate ha venido a visitar a su hermana— responde el padre de Nick de manera calmada—. Abbey quería verte, íbamos a pasar a verte.

Cuando su padre menciona a su hermana los ojos de Nick se iluminan.

  —Pasare a verla más tarde— dice finalmente.

  —Deberíais venir los dos a cenar a un restaurante. Conozco uno que es excelente, tiene un...

  —Esta noche no podemos, esta noche tengo un compromiso, y ella no va a querer ir—le suelta Nick de mala manera interrumpiendo a su padre.

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