• No puedo •

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Capítulo 18:

La razón por la cual no quiero (quería) dormir en la misma habitación que DaeHyun es porque siempre se me antoja follar al mínimo contacto, me es difícil controlar mis deseos y ganas que él siempre rechaza.
Aunque algunas veces hace que se vaya todo ese deseo.

- Me da miedo.

Por ese tipo de cosas. Ag, le teme a la oscuridad. Suele ser muy cobarde y frágil.

Tengo mucho frío, ahora no puedo dormir por culpa de DaeHyun y el maldito clima nocturno de este pueblo.

Me levanto y salgo de la habitación.
Creo que DaeHyun duerme en la que está junto a la del profesor.
Abro sin hacer ruido, paso a corroborar que sea él, cuando lo veo dormido regreso a cerrar la puerta.

Lo muevo varias veces porque está en medio de toda la cama.

— ¿Mm? — toma asiento y frota su ojo — ¿YoungJae?

— Fuiste a despertarme ahora yo vengo a molestar.

— ¿Dormirás aquí?

— Sí — levanto las cobijas para entrar —. Hazme espacio.

Lo hace dejándome el lugar de la orilla.
Mantiene cierta distancia.
— Pensé que estabas molesto conmigo precisamente por ir a despertarte y querer dormir contigo cuando no me lo pediste.

— Lo estaba pero como ya me despertaste noté que hace frío, pero si quieres me voy.

— Quédate. — Me cubre bien.

Ya acostados subo mi pierna a su cuerpo.

— N-no, no haremos nada pervertido.

Bajo mi pierna.
— Me gusta dormir así, ya sea con una almohada, peluche o la misma cobija.

— Ah, bien, entonces hazlo.

Vuelvo a subir mi pierna y me acerco más a él para conseguir calor, sin que se lo pida me abraza quedando a la altura de su pecho.

— Descansa — siento un beso en mi cabeza.

Quiero concentrarme y no pensar en nada sexual porque de verdad tengo frío y sueño.

Cierro los ojos y por fin me pierdo en esta cómoda posición.
Estoy tan gustoso, hace mucho que no duermo con tranquilidad en todo mi cuerpo.
Ya no hace frío porque sus brazos me abrigan bien.

•°•°•°•°•°•°

— YoungJae.

Escucho susurros en mi oído.
Sus labios besan mi mejilla y hace caricias en mi pelo. Ni mi madre me despierta de esta forma, quizá por eso todos los días despierto de malas y no como ahora que incluso le sonrío a labios y ojos cerrados.

— ¿Qué pasa?

— Son las 6:45, el profesor se despierta a las 7, debes ir a tu habitación.

— No quiero — me acomodo más en su pecho, lo abrazo.

— Anda, o nos van a regañar.

Que nos regañe.

— JaeJae.

No me queda de otra porque el señor bien portado se preocupa por todo. Me levanto y salgo de aquí arrastrando los pies.

Entro a mi habitación y me acuesto en la cama en posición fetal.
Hace mucho frío y es incómoda esta horrible cama, a DaeHyun le dieron un mejor colchón porque allá dormí bien.

Enamorado de un chico raro - DaeJae Donde viven las historias. Descúbrelo ahora