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Día De Muertos
Karenvenegas87
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-Cariño tengo que ir a México, mi familia le hizo un altar a uno de mis familiares- dije terminando de guardar algunas cosas en una maleta.
-¿México? ¿Altar? ¿Muertos?- me miró confundido.
-Si, una linda tradición Mexicana en donde les hacemos altares a familiares que murieron, vamos al cementerio y hay demasiadas cosas lindas- sonreí.
-Suena lindo... ¿Puedo ir?- parecía emocionado.
La ventaja de que mis padres amen a Jae es que aceptaron que viniera con nosotros, tomamos el vuelo a México y estaba realmente emocionada.
Después del viaje llegamos a la casa de un familiar, era bastante grande y anteriormente solíamos reunirnos en esa casa antes.-Hola ___ bonita- mi abuela me abrazó.
-Hola- sonreí.
-¿Quien es este joven tan lindo?- preguntó mi tía.
-Es mi novio Jaeden y como lo conocí en Los Ángeles no habla mucho español- lo abracé.
-Muy lindo, ¿lo trajiste para ir al panteón?- preguntó una de mis primas.
-Así es- sonreí.
Pasamos la tarde en casa de mi abuela, tuvimos que esperar a que se hiciera de noche para poder ir al panteón y así lo hicimos.
-Lindo- Jae veía el lugar encantado.
-Espera a que caminemos por las tumbas- tomé su mano.
-¿Qué?-
Sin soltar su mano hice que caminara por las tumbas, estaba realmente encantada y Jaeden parecía asustado.
-Deberíamos tomarnos una foto... Para el recuerdo- propuse.
-Es buena idea, pero crees que detrás de nosotros salga algún fantasma- miró hacía todos lados.
-Podríamos ver que pasa- sonreí.
Nos tomamos varias fotos y después de unos minutos seguimos caminando, Jaeden soltó mi mano y después de eso ya no lo veía y eso comenzó a asustarme.
-Amor- Jaeden corrío a abrazarme.
-¿Dónde estabas? Me asustaste- puse una mano en mi pecho.
-Siendo sincero me perdí, pero una mujer me ayudo a encontrarte- sonrió.
-Pero aquí no hay nadie- me asusté.
-Será mejor irnos- Jaeden también estaba asustado.
-Este ha sido de los mejores días de mi vida, México es muy lindo- Jae sonrió mirando el techo.
-Lo es, ya extrañaba volver- sonreí también.
-Espero que me invites de nuevo- tomó mi mano.
Iba a responderle a Jaeden, pero escuchamos unos ruidos en la calle.
-Seguro es la llorona- apreté la mano de Jae.
-¿La qué?- me miró confundido y asustado.
-Una larga leyenda, solo debes de estar tranquilo.
Al parecer logramos estar demasiado tranquilos porque nos quedamos dormidos y no supimos nada hasta la mañana siguiente.
-Sin duda México tiene demasiadas cosas de terror- dijo Jae.
-Tienes toda la razón, pero espero que eso no sea malo para ti- tomé su mano.
-Claro que no, puedo decir que no me gusta tanto el terror, pero por ti puedo soportarlo- sonrió.
-Eres un cursi, tonto y el amor de mi vida- reí.