"El dolor que no habla gime en el corazón hasta que lo rompe".
-William Shakespeare.Advertencia: Este capítulo no se centrará tanto en la trama, sino en los sentimientos, que serán relatos desde la perspectiva de ambos protagonistas. Les pido que, antes de comentar algo, terminen de leer el capítulo.
Capítulo 21: Dolor (parte 1)
Nadie creyó que fuera capaz de decir esas palabras. Nadie creyó que él sería capaz de aplastar un corazón.
Mucho menos ella.
Y si le hubieran dicho antes que él diría eso, pensaría que estaban bromeando. "Una completa estupidez", habría pensado.
Él se sentía traicionado, como si todo fuera una mentira. Como si nada de lo que hubiera pasado fuera real. Un sueño que se volvió en una dolorosa pesadilla.
¿Cómo iba a sonreír ahora?
Ya no había vuelta atrás. Ya no quedaba nada más por hacer. Ella no soportaba eso. Él también. No querían eso, entonces, ¿por qué?
"No podemos casarnos. Yo... no puedo. Te odio".
Eso le dijo su prometido. Y las lágrimas no querían escapar de los ojos de la azabache.
La palabra destrozada se quedaba corta. No comprendía.
Miró al vacío esperando que todo haya sido un sueño. O una pesadilla.
Esperó.
Esperó más.
Esperó otro poco.
Nada.
Era la realidad.
Ella quería una explicación. Ella quería saber si estaba mintiendo. Si de verdad esas palabras las había dicho con sinceridad.
No las había dicho con sinceridad, concluyó la joven al regresar a esa imagen del castaño mientras hablaba.
No, se repitió.
Él no dijo eso, dijo para sus adentros.
Quería creer que, cuando despertara por la mañana, vería a su lado acostada en su cama esos cabellos castaños junto con esos ojos esmeralda.
Sollozó.
Estaba llorando.
Y en su mano derecha sostenía una bufanda color rojo.
Su sollozo se convirtió en un llanto.
Le dolía más el corazón que el hecho de que todos ahora supieran que la mujer más fuerte de la humanidad estaba sollozando.
Esas palabras.
Esas palabras tenían un peso horrible en ella. Un peso que su frágil alma no pudo soportar.
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Letters || SNK
FanfictionEl egoísmo en su forma más pura. Amaría vivir en un mundo hermoso, en donde la libertad conquistara el mundo y la crueldad pereciera. Cuando me encuentro sola, comienzo a leer a de nuevo esa carta de años atrás, pensando que todo sería mejor si hubi...