El otro príncipe

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Hey!!!

Aquí MiyuKatz reportándose antes de las fiestas, cómo lo están pasando?

Bueno, estoy contenta de traerles la doceava parte de esta historia.

Este capítulo está narrado por Shōto

Disfruten!!

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Desperté completamente desorientado y mi confusión aumentaba al ver a Iida-kun y Uraraka rompiendo en llanto, pero yo seguía sin siquiera entender dónde me encontraba. Una vez que se calmaron me lo contaron todo: Sobre el Portal de los Reinos, la pequeña oráculo del tiempo a la que llamaban Eri-chan y lo más importante:

—¿Dónde está Izuku? —les pregunté mientras hacía un esfuerzo por ponerme de pie.

Ellos señalaron hacia la fuente en el centro del santuario donde te vislumbré recostado, mirando hacia arriba. Torpemente salí corriendo hacia ti; ahí fue cuando entre los tres me explicaron lo que habías hecho.

Desde entonces lloré como lo hago ahora, sin dar crédito a que el hombre que amo, Midoriya Izuku ya no es solamente el sucesor del Héroe Legendario, sino que es su propia leyenda y mi salvador ¿Cómo no voy a desear estar para siempre a tu lado?

Despiertas y te cargo en brazos para sacarte del agua, no puedo dejar de abrazarte y besar tu rostro. Cuidadosamente voy secándote la espalda y cabello con una toalla que me alcanzó Eri.

—Gracias, por tanto, mi querido héroe —te digo.

De pronto, te aferras con fuerza a mi cuerpo, como si temieras que me fuera a ausentar de nuevo.

—Fue... Fue demasiado difícil —respondes llorando también—. Pero lo volvería a hacer, tantas veces como hiciera falta.

Apresurado, pero con delicadeza, limpio esas lágrimas.

—Ya estás en casa —susurro a tu oído—. Te amo, Izuku. Te amo...

—Y yo a ti, príncipe mío.

El Portal de los Reinos queda en silencio durante algunos instantes, pareciera que los presentes, e incluso el ajetreo dimensional nos regalara unos segundos para disfrutar y agradecer este reencuentro.

Se bien que realmente, el tiempo que estuve bajo el hechizo obscuro fue poco, pero para ti ese viaje hasta un mundo paralelo representó varios meses.

Por eso correspondo a la desesperación de tu abrazo. Te he protegido y salvado varias veces de ataques enemigos desde el día que te conocí, pero tu hazaña y tu valor están a un nivel completamente diferente.

Poco a poco te pones de pie y te diriges hacia Uraraka, Iida-kun y Eri.

—Gracias también a ustedes, chicos. No hubiera llegado hasta aquí sin su ayuda o la tuya, Eri-chan.

Ellos siguen derramando lágrimas de alivio:

—No hay de qué, Izuku —se adelanta la pequeña—. Como te dije, haría cuanto estuviera en mis manos para ayudarte a ti y a tu maestro.

—Eso me hace pensar... —dices llevándote el puño a la barbilla—. ¿Cómo conociste a mi maestro, Eri-chan? Hay muchas cosas que no alcanzó a contarme personalmente...

La niña echa su largo cabello blanco hacia atrás de sus hombros y se dirige de nuevo a las aguas de la fuente.

—Mira... —dice antes de pronunciar una oración que hace aparecer una escena en el agua, como si fuera una pintura en movimiento.

En cualquier realidad *TodoDeku* AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora