♡𝐊𝐲𝐥𝐞, 𝐭𝐞 𝐚𝐦𝐨♡ [South Park - Style] (Terminada)

Sentimientos encontrados

                               ×♡×                                

Kyle decidió ignorar durante todo el dia al moreno, se sentía extraño al tenerlo cerca, si bien, el pelinegro no hizo nada del otro mundo, se volvió raro al momento del abrazo que éste le dió al pelirrojo, igualmente, se dió cuenta que habían demasiados sentimientos que tenia guardado el niño de ushanka verde.

–¿Que pasa con ustedes dos?–Pregunta Kenny mientras salían de su colegio.

El judío no quería hablar de lo ya pasado, el moreno, al igual que su amado, se sentía muy avergonzado, éste sentía que el pelirrojo iba a hacerlo quedar mal,  pero al contrario, hubo un pequeño silencio.

–¿Están peleados?

–¡Callate Kenny! ¡No es tu problema si estamos peleados o no!–Gritó Broflovski. 

–Perdón... – Murmuró el joven de la parca naranja cabizbajo mientras encogía sus brazos.

El ojiverde se sintió muy mal por lo que hizo, creía que se estaba comportando como un estúpido.

Llego a su habitación y se tiró en su cama, hundiendo la cabeza en las almohadas, estaba cansado. 

                               ×♡×                                

El pelinegro no quería pensar en nada, llego a su casa y se puso a jugar videojuegos, a la hora, empezó a sentir que tenía que hacer algo, no podía perder tantos años de amistad por un inútil abrazo, o por unas estúpidas palabras.

Tiró su control de Xbox y se puso su chaqueta lo mas rápido posible, unos pasos se empezaron a escuchar afuera de la habitación, eran de su madre.

–Stan, ¿Porque estás tan apurado?–Le preguntó la madre con una ceja levantada y las manos en sus caderas.

–Voy a ir a la casa de Kyle.

Salió de su habitación lo mas rápido que pudieron sus piernas. Apenas llego a la casa del pelirrojo, toco el timbre apurada y ansiosamente.

Hubo algo que lo perturbó, atendió la madre, siendo que siempre atiende Kyle.

–¿Puedo ayudarte?–Pregunta la madre del niño mayor Broflovski.

–¿Esta Kyle?

La mujer asintió y se corrió de la puerta dando a entender que tenía el libre acceso.

El pelinegro empezó a subir las escaleras y sentía que se le olvidaba todo lo planeado.

Golpeó suavemente la puerta de la habitación de su amado, éste lo dejó pasar.

–¿Que quieres?–Preguntó mientras se sentaba en el borde de su cama.

–Quería pedirte perdón por tocarte, el abrazo y haberte dicho "te amo"–Dijo mientras se le acercaba.

El pelirrojo no cruzó mirada con su super mejor amigo, sentía demasiada presión encima, de repente se le empezó a nublar la vista, eran lágrimas.

–No es por eso que estoy enojado–Dijo el judío entre sollozos, su cara se empezó a mojar con unas gotas saladas que bajaban por sus mejillas.

–¿Entonces?

–Es por las cosas que me haces sentir.

Al escuchar esas palabras, el pelinegro miró al ojiverde sorprendido.

–Siento esto desde hace tiempo, no dije nada por que tenía miedo de que se arruinara la amistad–Mencionó cabizbajo.

El pelirrojo empezó a llorar, sus mejillas estaban de color rosado, se tapó la cara con sus manos frías.

Stan quedo en shock, no sabía los sentimientos de su mejor amigo, se acerco rápidamente al judío y lo agarró de su mentón, haciendo que su cabeza se levante, se quitó las manos de la cara, ambos estaban mirándose a los ojos.

–Eres un estúpido Kyle–Luego de eso, acerco sus labios a los de el ya nombrado.

El pelinegro sentía una euforia inexplicable, tiró al pelirrojo encima de la cama y empezó una guerra de besos que era imposible detener.

El joven de pompón rojo le paso la mano por debajo de su chaqueta, fue subiendo hasta llegar a su pecho, el pelirrojo soltó un pequeño gemido. Se empezaron a escuchar los pasos de la madre del judío, acomodaron sus prendas y se sentaron en el borde de la cama. Tocó la puerta, Broflovski accedió a que pasara.

–Solo quería saber si hoy Stan se queda a dormir–Preguntó la madre de aquel pelirrojo.

–No señorita Broflovski, ya me iba, tenia que darle algo que se olvidó en su pupitre–El pelinegro salió por la puerta y se dirigió a su casa.

La madre de Broflovski le cerró la puerta,  el joven se tiró en su cama, y mientras veía su techo, toco sus labios con la yema de los dedos, al recordar como Stan lo besaba apasionadamente, se le pusieron las mejillas coloradas.

                               ×♡×