Narra Lauren
Cristina: ¡Chicos a comer!.
Estábamos hambrientos ya que llegamos ayer por la noche y no teníamos nada para cenar. Mi hermano bajó el primero, yo iba detrás, me encantaba esta casa, era como una mansión comparado con la anterior, pero aun así en el fondo la echaba de menos.
Durante el desayuno.
Lauren: Mamá esta casa es estupenda, me encanta mi habitación, los baños, el jardín.. Creo que me he enamorado. -dije entre risas-.
Daniel: Oye ¿Qué te parece si Lauren y yo vamos a dar una vuelta?. Papá y tú ya conocéis esta zona bastante bien, pero nosotros no.
Cristina: Me parece estupendo hijos, pero no lleguéis tarde.
Subí a mi habitación, cogí la ropa que me iba a poner y me fui directa al baño. Después de una ducha de aproxidamente 20 minutos, empecé a vestirme. Llevaba puestos unos pantalones cortos, una camiseta de Nirvana y mis Vans negras. Me alise el pelo, me pinté la raya y me puse un poco de rímel, ya estaba lista.
Bajé las escaleras, mi hermano ya estaba abajo, abrió la puerta y salimos fuera.
Dos horas después...
El paseo fue tranquilo, íbamos analizando todo lo que se cruzaba en nuestro camino, también había bastantes personas de nuestra edad así que supuse que no sería difícil hacer amigos. Ya estábamos de vuelta, cuando vi a mi vecino sentado en una hamaca en su jardín, me quedé mirándolo como una tonta, pero mi hermano hizo que volviese a la realidad chasqueando sus dedos.
Daniel: ¡Mamá ya hemos vuelto!.
Cristina: ¡Genial!, ¿Qué tal os ha ido?, ¿Habeis hecho nuevos amigos?.
Daniel: Nos ha ido muy bien mamá, este barrio es precioso, pero no hemos hecho amigos, nos hemos centrado más en analizar como eran todos los detalles que adornaban las calles.
Cristina: Me parece genial, chicos luego va a venir el hijo de la vecina a traerme algunas cosas, se llama Zayn y tiene 19 años, seguro que os hacéis muy buenos amigos.
Lauren: Claro.
Subí a mi cuarto, espero que no sea el chico que ví ... Ese era el único pensamiento que andaba ahora mismo por mi cabeza, justo en ese momento llamaron al timbre.
