La Reina De Los Milagros. (Kuroko No Basket Y Tu)

38.

H A I Z A K I

¿Dónde estará? Ya casi le doy la vuelta a todo el lugar y no veo a Tatsuya, si no escuche mal, esta fuera ¡pero no lo veo! Escuchó voces por ese lado... ya que, iré a ver.

Con tan poca luz no podía ver bien, pero reconocí esa voz, solo escuche una palabra... Ryota. Sin pensarlo corrí a donde estaban, ahora la imagen era clara, ahí estaban todos, Kise, Kagami, Alex, Himuro y alguién más, Haizaki.

No entiendo que esta pasando, pero eso no importa, había lastimado a Himuro, a mi hermano.

—Kise, ¿conoces a este tipo? —Kagami lo señalo, aún no me veían así que, que mejor manera de hacer una entrada.

—Se llama Haizaki Shogo —ahora todos parecían mirarme —fue un anterior titular de Teiko, no espere verte después de todo lo que hiciste en el equipo, Haizaki.

—¿Y tu quién mierda eres? —caminó hacia mi, claramente molesto — No importa, eres linda, ¿por qué no me pasas tu número?

—¡Deja a ___(Ta)cchi! —Kise se puso delante mía.

—¡Oh! ¿Es tu novia? Eso lo hace más emocionante.

—¡Eso da igual! ¿Qué te trae aquí?

—Nada en particular, tampoco es por venganza hablando claramente, estoy matando el tiempo. —comenzó a jugar con un balón —El básquet me da igual, por que se ve que después de que yo me fuera, comenzó a armarse el jaleo de la Generación Milagrosa así que vive a arrebatarles él puesto de uno de los cinco. Ya que era uno de los titulares ninguno podrá quejarse si lo derroto, y si tú eres mi próximo rival eso es mejor, Ryota, por que a tí te coronaron quinto jugador, pero no lograste derrotarme ni una vez.

Kise no miró a Haizaki, si no que vió a Kagami.

—Kagamicchi, quiero que me confirmes una cosa, ¿quién esa chica tan guapa? —miró a Alex, yo sonreí e intente no reirme.

—¡Eso no viene al caso! ¡Es nuestra maestra, de Tatsuya y mía!

—¿En serio? —Kise parecía sorprendido.

—¡En serio!

—De verdad lo siento, pero ¿pueden dejarlo aquí? Entiendo la situación, pero en el siguiente partido quiero enfrentarme a ese tipo sí o sí. Asumo toda la responsabilidad, me ocuparé de él, hace tiempo te dije, Kagamicchi, que no sentía vinculado al nombre de la Generación Milagrosa, pero tampoco pienso venderle el puesto a un tipo como tu, Shogo-kun.

Con una sonrisa Haizaki respondió —No te lo estoy comprando, ya lo dije, Ryota. Lo quiero y me lo darás, idiota —y con esas palabras bajó las escaleras para irse.

Quería ir con Tatsuya, pero habló antes.

—¿Por qué veniste, Taiga?

—Lo siento, te lo diré la próxima vez, sin falta —cuando acabó la frase miró a Kise —¡Kise, ni se te ocurra perder!

—Claro que no.

Me acerqué a Tatsuya, le toque la mejilla.

—Te llevaré a casa —digo, el solo negó.

—Quiero ver el partido.

—Eres muy testarudo —sonrio.

—¿___(Tn), qué haces aquí? Pensé que estabas en Estados Unidos? —aún tengo que dar la explicación a Kagami —y otra pregunta ¿cómo conoces a Kise?

—Te contaré luego —tomé a Tatsuya de la mano y escapé de ahí.

—No quiero ir a casa —dijo mientras caminaba, comencé a reír.