La Nueva Batalla

Significado de Perseus Jackson: Estás muerto

Percy

Les daré un consejo que espero sigan, porque la verdad es, que me arrepiento de no hacerlo.

Cuando tengas una herida, venenosa o no, vayan con un doctor, en serio, no intenten curarse sólos, porque sale peor. En serio.

Yo no sé cómo es que logré despertarme en el auto de May, pero me alegra. Porque, honestamente, ¿Qué hubiera pasado si no?

Probablemente me llevarían a emergencias, y la situación sería algo extraña.

—¿Qué le pasó?

—Emmh... Pues tiene una herida... Verde.

Y aún peor cuando me revisara algún doctor. No sabría qué Hades era lo que tenía, y no tendrían ninguna cura.

Gracias a los dioses desperté a tiempo para idear un plan. No podía decir "Ah, gracias, ya desperté. ¿Nos pueden llevar de vuelta para llamar a Will?" Bien. Tal vez no sería tan extraño, pero en ese momento me parecía una mala idea.

Así que me puse a pensar en un plan desesperadamente. Y no fue difícil ejecutarlo. Una vez que me llevaron a una habitación para curarme, me metí al baño de esta, con la excusa de que desmayarse traía ganas de... Bueno, ustedes saben, ir al baño.

Y nuevamente, gracias a los dioses, los doctores estaban ocupados, y al estar despierto y tranquilo, no era una emergencia.

En el baño hice lo posible para crear un arcoiris, y llamé a Will.
Will estaba dándome la espalda, y hablaba con alguien, Nico, quién se dio cuenta de mí.

—¿Percy?

—Nico, Will, gracias a los dioses están juntos... Creo que hoy les he agradecido bastante contemplando que...

—¡Percy! ¿Qué quieres? —Nico me interrumpió gracias a los... Agh, debo de dejar de hacer eso.

—Claro, necesito que vengan lo más rápido posible, estoy en el hospital por una herida de Quimera, pero no creo que aquí tengan cura.

—¿Una herida de Quimera? ¿No estaba muerta?

—Sí, pero ya no. Rápido. Estoy con mi mamá y dos mortales, sean discretos.

Les di el nombre del hospital, y el número de habitación, esperando que Will le diera permiso a Nico de hacer un viaje sombra y lograran llegar antes que un doctor del hospital.

Salí del baño y me senté en la camilla a esperar. Mi mamá hablaba por teléfono, supongo que con Paul, explicándole por que no habíamos llegado. May estaba buscando a Peter y a Harry, que no llegaron con nosotros.

Entonces entró Nico mientras May no lo veía y mi mamá fruncía el ceño observándonos. En cuanto estuvo dentro, Nico jaló una silla a un rincón no muy visible, y se sentó... Desparramó, mejor dicho.

Will se hizo visible en la puerta, vistiendo una bata blanca por encima de la camiseta naranja del campamento. Su cabello estaba peinado dándole un aire más formal, aunque varios mechones comenzaban a escaparse.

—Buenas noches. —saludó con un asentimiento de cabeza. Entró a la habitación y cerró la puerta detrás de él.

—Gracias a... Gracias por llegar tan rápido. Me salvaron.

—Aún no decido eso. Nico, la mochila... ¿Nico?

El pelinegro ya estaba dormido en la silla, con la cabeza recargada en su propio hombro. Will lo miró y sonrió.