Capitulo 30

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N/n Andrew

Todo se hizo imperceptible para mi, estaba sucumbido ante la perplejidad, estoy casi seguro de que he hecho nevar en la habitación de Dan, mi instinto me llama a salir disparado en contra de todos ellos y congelarlos hasta la muerte para salvarlos, o por lo menos conseguir liberar solo a Dan y escapar. Pero la razón puede más que mi corazón y decido quedarme a observar todo mientras una ventisca helada rodea mi tenso cuerpo, no sé a lo que podría enfrentarme, si fueron capaces de derribar a toda esta familia omnipotente, ¿Que les evitaría deshacerse de mi en un segundo?Empiezo a analizar las escenas que se muestran delante de mis ojos. Los camiones están lo suficientemente lejos como para no detectar sus placas desde este punto, pero son grandes y todos son blancos, además de que seguramente irán en hilera por lo que será fácil distinguirlas si les sigo el rastro. Un collar, dos pulseras y dos tobilleras con aspecto robótico son puestas en cada uno de ellos menos en Joseph, lo que me da a entender de que poseían de anticipación conocimiento amplio sobre cada uno de ellos ya que toman a Joseph como un humano el cual no posee riesgo alguno; cosa en la que veo cierta ventaja ya que desconocen lo sobrenatural que habita en él, y deduzco que es algo el cual no podrán reprimir científicamente ya que se trata de asuntos mágicos y no poderes otorgados por el material genético. Seguramente cuando despierte ya sea en el camión o el lugar a donde irán, dará batalla... O no... Observo que lanzan su cuerpo entre los arbustos de la entrada a la mansión, seguramente lo "asesinaron", presencio una cavidad oscura con sus bordes ensangrentados en el centro de su frente, le dispararon como si fuese un animal sin importancia, por lo menos me tranquiliza saber que es cuestión de tiempo para que despierte y coopere conmigo. Noto que las pulseras robóticas que les fueron puestas a los demás se unen magnéticamente sirviendo como esposas, luego los colocan sentados en la batea de una forma ordenada en un asiento rectangular metálico y sobresaliente del muro del camión, sus collares se apegan a la pared dejándolos inconscientes y sentados en una pose erguida, seguramente sus tobillos se encuentran pegados de igual forma debido al magnetismo que poseen esos aparatos los cuales por lógica supongo que reprimen sus poderes... Aunque hay algo con lo que no cuentan y es la magia de Dan... ¿Será de gran ayuda? ¿Servirá de algo?, tal vez de Joseph no supieran casi nada, tal vez por creer que era un humano fue objeto para ser ignorado, pero en un simple análisis a partir de observación se puede concluir que de los otros si poseen conocimiento, así que descarto la idea segura de que Dan pueda ayudarse con su magia y lo dejo como una posibilidad del 50% ya que probablemente el que está detrás de todo esto debe tener alguna medida de prevención. ¿Y si creo picos de hielo a la velocidad del sonido que los empale? No se darán cuenta, pero ahora pienso que Dan los hubiese hecho explotar en mil pedazos y no lo consiguió... ¿Será por estar distraído con esa autentica melodía en la que estaba ocupado? ¿O de verdad consiguieron amordazarlo con algo fuera de su nivel?... ¿Y si tal vez no tengo otra oportunidad como esta? Creo que lo mejor que puedo hacer es pinchar sus llantas sin que se den cuenta de mi presencia, si... Eso haré.

Me preparo desde el balcón, aún nadie me ha observado, mis manos se tornan a un color azul celeste y concentro la mirada en sus llantas, poco a poco empiezan a salir pequeños picos de hielo cerca de los neumáticos cuando algo capta mi atención, un chico de cabello rubio desordenado con una especie de máscara que cubre su boca y nariz se acerca a las puertas de la mansión, lleva ropa similar a la que usan en los hospitales psiquiátricos. De un momento a otro salgo disparado contra una de las paredes de la habitación, la nieve que había creado inconscientemente se empieza a derretir y un calor abrazador cubre mis sentidos, toda la habitación está hecha un desastre. Ese chico hizo explotar la mansión.

Todo está en llamas, el fuego consume rápidamente el oxígeno alrededor, me quedo sin aire, débil, desorientado... Mi visión se torna borrosa, estoy lleno de quemaduras y mi ropa se ha hecho añicos, un zumbido en el oído me marea aún más, presencio vagamente como el techo de la habitación se derrumba. Estando en el piso de Dan es un peligro si todo se viene abajo. Trato de gatear y esquivar el fuego, estoy herido, pero pienso en Dan e instantáneamente me pongo de pie sin importar el gran dolor que me atormenta. Una vez parado, me abrazo fuertemente para desplegar mi aura helada en todo su esplendor y combatir el fuego, poco a poco las llamas se ven abrasadas por mi energía congelante a tal punto de que he conseguido crear una especie de campo helado que me protege. Tengo que salir rápido de aquí, el fuego no me matará pero si todo esta mansión se viene encima dudo que sea capaz de crear un hielo protector tan fuerte ya que aún no he fortalecido mis habilidades lo suficiente, así que es casi seguro de que moriría aplastado. Salgo corriendo de la habitación, pero antes, mi mirada se concentra en un ramo de rosas negras que se consumen lentamente de abajo hacia arriba, noto que mi rosa de hielo se encuentra en medio de aquellas rosas negras, seguramente Dan decidió adornar mi rosa con las suyas para simbolizar la unión de nuestra relación, lo que me recuerda el motivo de mi rescate, mi amor por él. Lamentablemente esas rosas incluyendo la que le regalé se consumen, pues me esforcé creando ese tipo de hielo para que no se derritiera tan sencillamente pero este fuego puede más que mi esfuerzo prontamente perdido. Voy por los pasillos del piso de Dan, esquivando uno que otro escombro que cae del techo, se oyen estruendos por todas partes, llego a las escaleras para bajar hasta el primer piso, pero apenas llego al piso de Lucía se derrumba parte de las escaleras por lo que no tengo más opción que saltar y crear toda la nieve posible antes de aterrizar para amortiguar la caída ya que me es imposible crear una especie de tobogán de hielo al estar gastando mi poder en esta barrera protectora, solo me quedan fuerzas para la nieve. Cojeando por los pasillos del piso de Lucía me acerco a las barandas y observo al fondo, es un caída peligrosa, ya casi es hora de que todo esto se venga abajo a no ser de que se produzca otra explosión, por ejemplo en la gran cocina de la mansión. No puedo perder mi tiempo, sin pensarlo más me arrojo, despejo por un momento la barrera y creo una considerable montaña de nieve cayendo de espaldas. El golpe es fuerte pero aún estoy vivo, me examino rápidamente desde ese lugar y sé que debo de haberme roto algo por lo menos, alguna costilla creería yo. Me levanto ignorando lo mejor que puedo el dolor inmenso que emana de mi cuerpo, la nieve no tarda en deshacerse y noto el montón de cadaveres calcinándose en el suelo. Evito las ganas de vomitar e ignoro la escena, seguramente son los empleados. Salgo corriendo hacia la puerta, la abro de una patada y como lo predije, ocurre una segunda explosión que me expulsa al jardín de la entrada mientras todo se viene abajo. Caigo sin fuerzas en el anden cerca a la carretera que ahora se encuentra vacía, Joseph aún sigue muerto en el arbusto...

Chaos 1. [Gay story, TERMINADO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora