Una Historia Diferente [Winx Clud]

Prólogo

Era principio de año en la prestigiosa escuela para hadas "Alfea", una escuela donde podrías convertirte en un hada poderosa y ayudar cuando te necesiten o si eras princesa te convertirías en la guardiana de tu planeta, definitivamente una escuela donde todas chicas deseaban asistir. Entre toda la población femenina que se encontraba amontonada en el patio de la escuela se encontraba una pelirroja sumamente pérdida, iba a ser su primer día en asistir a Alfea o simple su primer día pisando la dimensión mágica. Bloom de Domino, un hada que se crío en la tierra sin conocer por mucho tiempo de donde de verdad provenía y sin estar consciente de que poseía el poder del fuego del dragón, definitivamente todo era muy nuevo para ella desconocía muchas cosas que pronto iba a ir aprendiendo gracias a la tutoría de Faragonda, la directora de Alfea.

— ¡Todas en formación ahora! —grito una mujer de aproximadamente 45 años, pelo negro, alta y con una actitud que a cualquiera le daría miedo.

Todas al escuchar su voz se formaron en 10 filas rápidamente, Bloom muy confundida solo siguió a las demás colocándose detrás de una chica de pelo azul.

— Escuchen con mucha atención —ordenó ella— Mi nombre es Griselda, voy a ser su instructora, auxiliar, guardia o como ustedes prefieran, estaré vigilando a cada una de ustedes y espero que se comporten disciplinadamente porque así como vinieron se pueden ir. Como en toda escuela también tienen reglas que por su bien les recomiendo seguir.

Dio una mirada analizando a cada chica parada inmóvil en su lugar, todas sabían cómo era Griselda y no deseaban desafiarla, era la mano dura de la escuela.

~ POV BLOOM ~

Definitivamente no prefiero tener problemas con ella.

— Primera regla, las de primer año no pueden usar sus poderes libremente tienen que estar vigiladas por un docente. Segunda regla y va para todas —señaló a todas con el dedo- no pueden meter alcohol, ni drogas, ni cigarros, ni mucho menos chicos ¿Entendieron?

Todas a sintieron.

Okey eso es fácil, una no tomo, no me drogo, ni fumo y menos tengo novio. Hasta ahorita no he visto a ningún chico ¿Habrá hombres en este mundo? ¿O solo hay hadas?

— La ultima pero no menos importante, la barrera de protección que tiene la escuela se cierra a las 8 en punto, el que se quede afuera no sólo tendrá graves problemas conmigo y la directora si no también tendrá que pasar la peor noche de su vida liviano con las criaturas que salen en la noche.

Bueno, eso sí me da miedo.

Atrás apareció una mujer mayor, era la directora de Alfea, Faragonda, la que me trajo a este lugar. Una mujer que aparentaba los 60 años pero como las hadas vivían más tiempo y aun conservándose debería de tener más de 100.

Se preguntaran como se eso, pues todo gracias a mis libros de hadas que leía todos los días en la tierra, digo leía porque ahora lo estoy viviendo en carne propia y creen me nada de lo que decía en los libros se acerca a lo que es este mundo.

— No es necesario ser tan estricta, espero que la señorita Griselda no les haya asustado —hablo dirigiéndose a nosotras— Les damos la bienvenida a la prestigiosa escuela Alfea, la única escuela para hadas en toda la dimensión mágica —comenzó a mirar a cada una, su mirada era diferente a como nos miraba la señorita Griselda, era dulce, nostálgica y maternal— me da mucho gusto ver caras nuevas este año, es bueno tener más chicas interesadas en fortalecer sus poderes, el objetivo que tenemos es lograr que ustedes mis niñas sepan controlar su poder y se conviertan en unas hadas poderosas, fuertes y valientes, pero eso como todo lleva su tiempo. Veo que la señorita Griselda ya les dio un repaso de nuestras reglas que tenemos aquí, tal vez no se encontrarán con una criatura salvaje pero si con un castigo de un mes.