Amor y Deseo (Parte 2)

Ayúdame a superar esto, mi amor

--Narra Beatriz.

"Tú.....deberías de estar muerto......yo te vi morir....". Mis palabras salen a empujones de mi garganta, la cual esta en un nudo. Willy me frota la espalda para darme ánimos, pero aun así estoy destrozada. No doy crédito a que mi padre siga vivo.

"Cierto, pero solo en parte hija mía. Solo viste morir a un muñeco programado por nuestros mejores ingenieros para dar esa impresión. Con el objeto de que todos crean que mi muerte es real.". Niego con la cabeza, dejando salir mis lagrimas. No puedo contener este dolor. Mi padre vivo y sin haber estado a mi lado en mis peores momentos, como antes. Como siempre lo hemos estado, tan conectados, tan unidos, tan cómplices.  El echo de que no me haya dicho nada muestra su clara desconfianza y lealtad hacia su hija. Hacia mi. 

Yo que siempre he estado a su lado, en todo momento. Ahora no se que hacer. No puedo perdonarles esto. Se han reído de mi. Me han estado ocultando la verdad, engañándome siempre. Todo este tiempo. "Se lo que estas pensando, tesoro. Y no es verdad. Nunca nos hubieramos reido de ti. Solo te ocultamos esto, pues eres como un libro abierto. Si lo hubieras sabido desde un principio, se hubiera descubierto el pastel y no hubieramos progresado tanto en nuestro plan de destruir a los Beauregarde." Dice mi madre apollandose en el hombro de mi padre.

"Es cierto, mi pequeña. Mi corazon se partia en mil pedazos al separarme de ti, siempre he velado por ti. Cariño mio." Las palabras de mi padre, aunque suenan sinceras, no me las creo. Dolor fue lo que yo senti al ver como moria delante de mi, sin poder hacer nada. Dolor es lo que siento ahora al saber que todo fue un engaño planeado para la venganza. 

Me giro y me abrazo a Willy, el cual me responde haciendo nuestro abrazo mas fuerte. Suelto a llorar. Sinceramente no puedo mas. Esto ya me sobrepasa. Mi padre, el cual creia muerto, esta vivo, aqui. Y ni siquiera suplican perdon ni disculpas. Solo siguen con sus trece en su plan de venganza. ¿Acaso solo les importa eso, la venganza?. ¿No les importo yo, que soy su hija?.

--Narra Willy.

Mi corazón se quiebra con esta situación. Nunca llegue a pensar que el matrimonio Cartwright pudieran llegar a tanto. Engañar a su propia hija. A esa hija que la protegieron con uñas y dientes contra todo y contra todos. "Señor y Señora Cartwright. Como marido de su hija y dueño de esta fabrica, les ordeno que abandonen la fabrica y no vuelvan nunca mas. Esto ya es demasiado. No voy a tolerar que se burle ni se engañe a mi esposa. Mi vida esta sufriendo mucho por culpa de ustedes y no voy a permitir que su sufrimiento se prolongue mas. Así que vallanse. Ahora." 

He dicho todo lo que mi mente y mi corazón guardaban desde hace unos minutos. Mi Beatriz levanta su cabeza y sus ojos se topan conmigo. "Mi amor. Ayúdame a superar esto, por favor. No puedo mas." Vuelve a abrazarme y a llorar de nuevo. La atraigo mas a mi y la aprieto mas fuerte a mi. Quiero que sienta todo mi amor y mi apoyo. No voy a abandonarla ahora. No desde que a lo visto sus padres son los peores que he visto a la hora de mentir y de engañar.

"Sinceramente me niego a dejar así a mi hija. He venido a hablar con ella y no me pienso ir sin ofrecerle mi explicación." El padre intenta acercarse a nosotros pero, por acto de protección, cojo de los brazos a mi amada y la coloco detrás de mi. Manteniendo las distancias entre ellos. "No voy a permitir que te acerques mas a ella. No voy a tolerar que siga sufriendo por vuestra culpa. Ustedes eligieron la venganza frente a su hija. Pues yo elijo a ella antes que a vosotros."

Nuestras miradas crean tensión y malestar entre todos. Pero Beatriz se pone delante, con los ojos hinchados de tanto llorar, pálida y débil, me coge del brazo. "Quiero que os vayáis. No me importan vuestras explicaciones. Ni nada que tenga que ver con vosotros. Ya nada me importa. Vosotros lo habéis destruido todo. Incluso a mi. No quiero veros mas. Fuera de aquí.". Se abraza apoyada en mi pecho.

"Hija mía, no me pidas que me valla de tu lado, mi sol. Todo tiene su explicación y se que si me escuchas lo entenderás. Te quiero mucho mi ángel, por favor, escúchame, mi pequeña.". "¡¡Basta, papa!!!. Basta. Ya no quiero verte mas. Estas muerto...... para mi....... moriste aquella vez....nunca confiasteis en mi para contarme las cosas........adiós papa.". Se aleja hacia la puerta pero se detiene en seco. "Y una cosa mas. Renuncio a la presidencia de la compañía Cartwright. Pues estas vivo y puedes encargarte de tu adorable imperio construido con mentiras, engaños, y chantajes. No quiero formar parte de tu lista de hipocresías." Se va, cabizbaja, dolida.

En mi siento como me hierve la sangre, verla así a causa de sus padres me encolera. "Iros. Vallanse y no vuelvan nunca. Es mi ultimo aviso." Siento que en mi mirada se ha instalado la ira y la desesperación. Finalmente ellos retroceden, dispuestos a salir por la puerta. May y Wilber se van tras Beatriz.

Su padre se detiene y me mira con una impresión entre asombrada y enfadada. "Se que hice bien en encargarte a mi hija, desde un principio. Ahora quiero que cumplas tu ultima parte del plan. Protege a mi hija, aunque me odie. Asumí los riesgos desde el principio. Cuida de ella, nunca la dejes. Es lo mas hermoso que tengo en la vida, y quiero que veles por ella.". Asiento. "Cuidare de ella. Lamento que todo halla terminado así, pero cuídate de ella. Pero acaben con ellos, antes de que causen mas daño y dolor a mi amada, a mi dulce amada." Ellos asienten y terminan por irse. Me dirijo a la habitación de mi amada esposa para comprobar su estado.