CAPÍTULO XX

220 10 2
                                    

CAPÍTULO XX. TIEMPO DE HABLAR CON LA VERDAD.

El pecado no es un tema agradable. Es como hablar del cáncer, con la diferencia que TODOS tenemos pecado y si éste no se sana, el diagnóstico final será la muerte del alma.

18 DE OCTUBRE DEL 2010, 23:25 HRS.

PERSPECTIVA DE PEPA.
Dicen que aquel que comete pecado, rechaza el amor divino, se opone a la propia dignidad del hombre llamado a ser hijo de Dios y hiere la belleza espiritual de la Iglesia...
Y yo me cago en la puta iglesia.
Y me cago en Dios y reniego de ser su hija.
Bonita vida la que me obligó a vivir, me pregunto en dónde estaba él cuando murió mi madre...
Ó cuando mi padre se suicidó.
Mejor aún, ¿Dónde carajos estaba él cuando ese cerdo me violaba?

Al fin llego a casa y aparco el coche junto al de mi pelirroja.
Me encanta esa sensación que se produce en mi interior al saber que ella está esperando por mí para cenar, que en cuanto cruce la puerta ahí estará con esa sonrisa que me derrite, ¡Que me pone idiota!
Oprimo el botón que abre la puerta del ascensor y mientras espero a que esto suceda no puedo evitar pensar en el triunfo de la noche.

Todo ha salido de maravilla.

Mi pelirroja lo hizo. Ha cumplido. El tipo está muerto y el precio a pagar: Dos únicos besos. Aunque me duelan por todo el cuerpo...Han sido solamente dos.

Y ella...Ella parece estar bien, satisfecha, sabe que lo ha logrado, que hizo un excelente trabajo...

Y de esta forma el asunto queda zanjado.
Pero hay algo dentro de mí que no me deja disfrutar del momento, y es que yo creo firmemente en la inexistencia de la "Justicia Divina", no he tenido el gusto de conocer al remordimiento, para mí solamente ha sido un día más de trabajo, pero para ella...

¡Tengo un miedo atroz de estar destrozando su vida!

Entro y la miró ahí, sentada en el sofá aún con el vestido puesto.

El color rojo le sienta maravilloso, hace juego perfecto con su cabello, resalta lo penetrante de sus ojos y entonces...Aún avergonzada por lo que he permitido que suceda, por arrastrarla conmigo por un camino sinuoso y lleno de piedras me animé a terminar con el silencio.

-Te has aprendido bien el guión...-Le dije con ironía.

-Lo sé- Respondió asintiendo -Pero esto no es nada comparado con lo que yo haría por ti - Se levanta y camina hacia mí con los pies descalzos.

-¿Ha sido difícil?- Pregunté algo preocupada.

-Mejor será que no me preguntes eso-

-Lo ha sido- Asumí

-¿Está muerto?- Preguntó con cierto temor

Asentí. -Asunto zanjado-

-Lo volvería hacer una y mil veces si tú me lo pides-

-No lo digas...Nunca te pediría algo así de nuevo- Negué con la cabeza -Esta vez lo permití porqué era tu propia vida la que estaba en riesgo. Tuve que decantarme por el mal menor-

-No pretendas guardarme en una urna de cristal Pepa, porqué...-

Pero no la dejé que continuara. -Pelirroja...Eres lo que más amo, lo que más me importa, no puedo dejar que entres en mi mundo de porquería y que te revuelques en la mierda como yo lo hago-

Entonces Silvia sonrió -Tu mundo no es ninguna porquería - Se acercó para acariciarme con dulzura las mejillas -Tu mundo soy yo y tampoco te revuelcas entre la mierda, tú nada más puedes revolcarte en nuestra cama cubierta por sábanas suaves de algodón egipcio- Entonces me dejó un pico -Conmigo- Terminó con tono sensual.

ARDER CONTIGO EN EL INFIERNO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora