CAPITULO 15

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El Señor Bipolar:

Había pasado un mes. Mi vida si había cambiemos. Comencemos . Jeff, mi hermano, había vuelta. Jane aún no le encantaba estar con el como tal, aveces si le decía hermano, pero muy pocas... pero el caso es que había un poco de progreso.

—Leyla, en serio tengo que llegar hoy temprano al trabajo — le decía a mi amiga.

Leyla, tenía la loca idea de prepárale una mega fiesta a Edward. El cumplía años en una semana y ella quería hacer algo grande.

—Pero ¿por que? Yo te puedo llevar además Lian y Liamb jamas te regañarían. Eres su favorita.

—¡No soy su favorita! Además si no les entrego esto antes de las ocho y media será el fin mío y el de ellos.

—Que exagerada— murmura amargada.

—Ley... a Ed no le gusta las fiestas, tú y yo aquí con una torta estaría genial.

—Eso pasa todo los años— se quejó

—El ama eso.

Leyla odiaba la monotonía y cada vez que se hacía algo más de ocasiones era aburrido.

—Leyla, te adoro. Adoro a Edward, pero tengo que llegar a mi trabajo.

—¡Ugh! — gritó ella exasperada —Vete, por hoy duermes aquí pes arreglar esto.

<<¿Como tengo amigos tan locos?>>

Para mi suerte (lo cual es raro) llegó lo suficientemente temprano para entregar mi trabajo

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Para mi suerte (lo cual es raro) llegó lo suficientemente temprano para entregar mi trabajo ... y que no me maten.

—Genial Kathy como siempre— decía Lian —¿Que te parece Liamb?

—Está bien— dice frío.

—Gra-Gracias.

Por alguna razón, cada vez Liamb ponía es cara o se ponía actuar tan fríamente conmigo mi lengua se trataba, y algo en mi se estrujaba.

—Eres muy buena en esto. No te pongas nerviosa— me dijo Lian

«Muy tarde»

Antes que mi lengua se trabara más de lo que estaba, decidí morderme el labio. Era algo que me tenía mal. Liamb hace dos semanas se comportaba de una manera bipolar. Aveces estaba el Liamb que no me caía mal, y aveces ataba Señor Hyde.

Así que por está razón mi lengua también se estaba enredando también de manera irregular. Era frustrante que esto pasara por estas situaciones. Que no pudiese controlarlo.

—Kathy ¿Que pasó?—dijo Lian bastante preocupado —Pensé que ya no tenias pena con nosotros.

«yo también»

El Chiste De Mi VidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora