Quien dijo que los muertos no podían pensar

capítulo 3 un dia normal

Que bonito día hace ahí afuera, los pájaros cantan, los niños juegan y Lora esta durmiendo plácidamente hasta que sono la alarma del móvil. Lora se despertó aún cansada del día de mierda de ayer, se sentó en el borde de la cama y se quedo mirando la pared fijamente pensando en el día que tuvo ayer,
- me intente suicidar sin mucho éxito, la verdad prefería olvidar eso por el momento... También casi me secuestran - o eso es lo que pensaba Lora. Después de quince minutos mirando la pared y comiéndose la cabeza se vistió y bajo las escaleras, ya estaba apunto de pasar el umbral de la puerta cuando la detuvieron.
-¿Lora a donde vas? Pregunto la tía Elena
- ¿no desayunas? Volvió a preguntar el tío José
- voy por ahí, no tengo hambre adiós
- ¿dónde es por ahí? Inquirió la tía Elena Ya frustrada de la situación Lora contesto para que la dejaran empaz
- vale esta bien, Por ahí ves el camino de baldosas amarillas? Si las sigues podrás llegar al castillo de pinocho. Bueno adiós prometo traeros un zapatito de cristal.
- Lora vuelve aquí! - gritaba la tía Elena pero Lora ya se había marchado.Esta vez Lora en vez de dar una vuelta sin sentido (como lleva haciendo durante estos 2 capítulos), fue a la floristería donde compro dos rosas rojas, como hacía cada mes, fue al cementerio y poco a poco se acercó a dos tumbas, las tumbas de sus padres, de su felicidad, de su vida... Respiro hondo y dejo una rosa en cada tumba y empezó a llorar pensado en esos cálidos momentos cuando no estaba sola.

Una niña de 6 años jugaba en los columpios felizmente, mientras su padre la empujaba y su madre sonreía, ella estaba muy feliz, pero por una extraña razón giro la cabeza al lado y pudo ver un niño un poco más mayor que ella en el columpio de al lado, este la miraba fijamente Lora quiso averiguar quién era
-¿ quién eres? Pregunto la niña de 6  años
- yo soy...

El ruido de unas hojas secas alertaron a Lora quien se había dormido al pie de un árbol mientras miraba las tumbas de sus padres.Lora asustada pensó que podía ser el fantasma asesino caníbal con un hacha que rapta niños a si que se levantó con ganas de salir corriendo, pero antes de que lo hiciera pensó ver una sombra cerca de las tumbas de sus padres quiso acercarse para ver quién era cuando se acercó a una distancia segura el individuo se dio la vuelta pero en ese preciso momento una brisa se levantó haciendo que lora cerrara los ojos por un momento y cuando los volvió a abrir no había nadie.
Que raro pensó Lora ella estaba segura de que había visto a alguien, sus sospechas de que alguien la estaba siguiendo estaban creciendo.
Ya más tarde regresando a casa lora vio un conejo de color negro con un chaleco y un reloj.
- llego pronto! Llego pronto - gritó el conejo alarmado
- mm mm no quisiera molestar pero su reloj está atrasado en realidad llega tarde le explico lora
- oh muchas gracias persona desconocida que podría ser una asesina en serie- dijo el conejo amigable - por cierto sin venir a cuento me llamo sua
- de nada sua
- adiós
- adiós - dijo lora mientras se alejaba.
Oh eso se imagino lora mientras regresaba de camino a casa.