𝑴𝒆𝒎𝒐𝒓𝒊𝒆𝒔 [𝑲𝒊𝒏𝒈 𝒙 𝑹𝒆𝒂𝒅𝒆𝒓]

XI

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𝓣𝓱𝓮 𝓬𝓪𝓵𝓶 𝓫𝓮𝓯𝓸𝓻𝓮 𝓽𝓱𝓮 𝓼𝓽𝓸𝓻𝓶

𝘗𝘢𝘳𝘵 𝘵𝘸𝘰

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¿Han sentido cuando la adrenalina recorre cada parte de su cuerpo haciéndolos temblar? Así era como se encontraba ________, sus manos temblaban y era difícil de esconder. Aquella emoción la delataba. Ambos participantes se pusieron en posición de batalla en espera q que el otro atacara. Kenzo corrió a donde se encontraba la mujer y lanzo un puñetazo que fue evitado con agilidad  por la albina.

– Creí que vendrías para apoyarnos, nunca imagine que era para combatir. – Sonrió el atractivo sujeto.

– Soy una chica con gustos peculiares. – Volvió a esquivar el golpe.

– Debo de admitir que eso te hace más atractiva. – _______ se acercó para darle una patada pero el se agachó en el momento correcto. El público gritaba de la emoción.  – Una linda señorita como tú debe de tener muchos pretendientes pero me gustaría ser él único.

– Buena suerte intentándolo. – Se rió. – Has esto más entretenido para mí, no me gustaría que este combate sea igual de corto.

– Tranquila te daré buena pelea. – Sonrió. Ambos se lanzaban golpes que el contrario conseguía evitar y _______ debía admitirlo, ese sujeto era muy hábil y rápido. Los espectadores aclamaban la contienda, ninguno conseguía herirse.

– Si que le haces honor a tu nombre – Dijo frenando el golpe que el chico dirigía a su vientre. – "Kenzo, fuerte y saludable." – Nuevamente el pelinegro se había lanzado a propinarle unos cuantos golpes pero ella simplemente evitaba el contacto. 

– Mis padres veían un futuro prometedor en mi. – Kenzo no se rendía pero tampoco quería ser rudo con ella, debía hallar la forma de sacarla de combate.

"– Howzer no es el único caballero que vino por cuenta propia." – Se acercó a donde el chico y le dio un puñetazo en el vientre. – No sería de extrañar que tu sueño sea convertirte en caballero sagrado. – Adivinó. Aquello sorprendió al varón, no pretendía que lo descubrieran tan rápido.

– ¡Kenzo luce cansado! ¿Será que Yuri muy pronto será la vencedora? – El publicó miraba atento, en especial los pecados, sabían que la mujer frente a ellos no estaba peleando con toda su fuerza, lo que significaba que estaba guardando sus energías para una verdadera batalla.

– Me sorprende que lo hayas adivinado. – El azabache se agachó para golpear las piernas de ______ con eso consiguió que la mujer cayera, se quedó unos segundo ahí intentando ignorar el dolor de su espalda. – Y me atrevo a decir que tú también tienes el mismo sueño. – Él se levantó dispuesto a sacarla del cuadrilátero pero  _______, con sus piernas lo sostuvo de su cadera y lo hizo caer. En un rápido movimiento quedó arriba de él.

– ¡Quisiera estar en su lugar! – Gritaron algunos de los hombres, _______  estaba sentada sobre la entrepierna del hombre, lo sostenía de las manos, dejando su pecho muy cerca del rostro del hombre. – ¡Que sujeto más afortunado! – Inmediatamente un sonrojo apareció en el rostro de mirada azul.

– Un consejo – Acercó su rostro al oido de azabache. – Nunca bajes la guardia si realmente quieres ser uno de los mejores, en especial si tú debilidad son las mujeres. – Se alejó y el sonrojo del hombre iba en aumento. – Espero hayas disfrutado del combate y de la vista pero este lo ganó yo. – La albina le guiño el ojo y sin soltarlo de las muñecas lo arrastró por el lugar hasta dejarlo caer frente a sus amigos, quienes no salían de su asombro, no creían que la chica que los había atendido anoche fuera una buena peleadora.