Te reto a mantener tu mirada con la mía hasta que todo quede dicho.
A tener el valor de susurrar "vámonos de aquí " sin importar lo que piensen, sin importar lo que digan.
Dejando que todo a nuestro alrededor se paralice por unos segundos y que sólo existan dos corazones latiendo al compás de uno.
Te reto a dejar de nadar a corriente de lo normal y ahogarte conmigo.
A dejar de afirmar lo que sólo deseas negar por miedo y falta de valor.
Y atrévete a agarrarme de la mano sin que nadie se entere...atrévete, sólo atrévete.
Porque los sentimientos no se pierden y el valor no se gana. Sólo permanecen hasta que se unen para susurrar "vámonos de aquí".

ESTÁS LEYENDO
Lo que no supe decir
PoesíaQuien sabe todo lo que puede callar la mente en temas de amor.