Habían pasado algunos días desde el beso entre ambas chicas, Juliana había quedado fascinada por los suaves rosados y perfectos labios de Valentina, aquella noche después de ese beso, soñó con esos labios una vez más y se moría por volver a besarlos, deseaba volverla a hacer gemir de esa manera que le encantó, fue música para sus oídos, una que comenzaba a gustarle demasiado, Valentina tenía algo especial que le hacía sentir sensaciones en el estómago, pero no sabía que era ni porque se sentía así.
Valentina después de aquel beso se sintió flotar, la pelinegra le había dejado loca de deseo por seguirla besando, sin duda es unos de los mejores besos que ha tenido, es que sus labios perfectos, Juliana eran tan jodidamente buena besando, solo el recordar la lengua de ella en su boca moviéndose impetuosa la hacía suspirar, con un beso la logró excitar a niveles que ni ella conocía y con esa sonrisa tan hermosa que poseía que le comenzaba a encantar, la tuvieron recordando ese beso por más tiempo de lo normal, en un loop de oso que se repetía una y otra vez en su mente.
Mansión Carvajal
Valentina Carvajal se encontraba realizando los preparativos para su cena familiar, para darle la noticia a su familia y amigos más cercanos sobre su reciente noviazgo con la diseñadora, quería que todos se enterarán de la relación, su familia lo estaba tomando bien pero pensaban que era una aventura más de ella, lo que no sabían era que estaban equivocados en sus teorías.
Mansión Valdés
Juliana Valdés se encontraba muy ocupada porque este sería un viernes muy largo para ella, entre la cena familiar con los Carvajal y la entrega y sección de foto de los nuevos uniformes para el colegio estrella la tenían nerviosa aunque sus nervios eran provocados más por lo primero. Le tuvo que contar a Lupe de su reciente relación con Valentina, su mamá pensó que eso era lo que le ocultaba, al revelarle que se trataba de la chica que le compró la playera y para su sorpresa Lupe se puso muy contenta con la noticia.
Colegio estrella sección de fotos
Juliana se encontraba caminando por los pasillos junto con sus diez trabajadores que venían más atrás con todo lo necesario para llevar a cabo la sección de fotos, aparte de Paloma su asistente personal la cual venía más cerca de ella.
"¿está todo listo?". Le preguntaba a su asistente para cerciorarse que todo estuviera saliendo como quería.
"Sí todo perfecto". Le respondía.
"Muy bien diles que ellos se dirijan al jardín del Colegio y tú vienes conmigo". Le decía a su asistente, refiriéndose a las demás personas que la acompañaban.
"Bien July ahora vuelvo". Le respondió llamándola de esa manera, ya que además de su asistente Palú (como ella la llamaba de cariño) era su mejor amiga la única que tenía en realidad. Paloma era una chica joven de contextura delgada y de piel canela, de grandes ojos marrones y tenía una mediana cabellera de color oscuro.
"Bien no tardes". Le dijo Juliana a penas vio a la chica dirigirse a los demás, a lo lejos veía a la directora acercarse a ella.
"Juliana es un gusto tenerte de nuevo aquí, ya puede ver los uniformes están de maravilla, ahora mismo los alumnos se están vistiendo para la sección". Expresó la directora contenta.
"Es mi trabajo y lo hago con mucha dedicación".Le dijo caminado junto con la directora hacía los exteriores del colegio y en medio camino uniéndose Paloma a ellas.
Sección de fotos dos horas después......
Juliana terminaba de realizar la sección de fotos de los alumnos, le resultó un trabajo un tanto complicado tanto que la pelinegra se sentía agotada porque los niños a si sean los más educados al final siguen siendo niños y no faltaba el que se movía como si de una lombriz se tratará o al que le gustaba hacer caras graciosas o las niñas que lloraban porque otro niño la empujó o por último los que salían corriendo jugando las traes con los trabajadores que la estaban ayudando, sólo que a ellos no les divertía aquel juego de los niños.
"Bien, estarán listas para el lunes". Comunicaba a la directora quien intentaba que sus traviesos alumnos se quedarán en un solo lugar mientras unas maestras le ayudaban llevándose a los pequeños en grupos. "Gracias Juliana, disculpa a los niños solo están muy emocionados". Se nota pensó irónicamente la pelinegra, se alejó un poco de la directora y fue hacía su amiga.
"¿Mi teléfono Palú, ha sonado?". Preguntaba a la morocha quien estaba sentada en el césped bajo una sombrilla. "Creo que si, como unas dos veces mientras estabas en la sección". Le comunicaba la morocha mientras buscaba el teléfono en el bolso que tenía por los pies y cuando lo encontró se lo extendió a Juliana. "Aquí está, ten July"
"Gracias Palú". Se alejó un poco de la chica y cuando se dio cuenta de que tenía tres llamadas perdidas de Valentina una sonrisa instantánea se apoderó de sus labios junto con una sensación extraña en el estómago, también tenía un mensaje de su mamá que le preguntaba la hora de la cena en casa de los Carvajal, le contestó que a las 9 y se apresuró a decirle que estaba ocupada para poder marcarle a la castaña.
"Tuuuuu… tuuuuu". Sonaba el teléfono, Juliana al tercer tono iba a colgar cuando escuchó la hermosa voz de la castaña al otro lado de la línea.
"Hola Juls discúlpame por llamarte sé que estabas ocupada, quería pedirte un favor". Decía hablando muy rápido y se la escuchaba un poco agitada lo cual pudo notar rápidamente la pelinegra.
"Hey tranquila, más despacio morrita". Le respondió para que la castaña hablará más pausadamente.
(Lo dije o lo pensé, se decía Juliana internamente al darse cuenta de cómo le había dicho a Val «morrita»)
Valentina de otro lado del teléfono estaba muy agotada con todos los preparativos de la cena, que había olvidado por completo que tenía que ir a ver a Mía, le iba a decir a uno de los chóferes pero todos estaban ocupados y entonces recordó que la pelinegra estaba en el Colegio y pensó que era buena idea pedirle que trajera a la niña con ella, ya había dado la autorización a la directora todavía sin saber si Juls aceptaría, la llamo dos veces pero no contestó suponía que seguiría trabajando en la sección de fotos. Cuando vio su teléfono sonar lo tomó rápidamente. Lo primero que hizo fue decirle que la disculpe por haberla llamado mientras estaba ocupada, sin darse cuenta lo rápido que salieron sus palabras. Cuando Juliana le dijo que más despacio «morrita» la castaña sintió como un remolino en su estómago y de pronto se sintió nerviosa a causa de esa palabra que dicha de otra persona le hubiera molestado mucho, pero de ella no.
"Te quería pedir un favor". Soltó de repente y Juliana quería saber de que se trataba.
"Si claro dime Val". Le preguntó. "Podrías traer a Mía contigo Juls, es que estoy ocupada y nadie más puede ir y pensé que…". Decía la castaña explicando el porqué de su favor. "Está bien Val yo la llevó". Contestó Juliana sin pensarlo no le importaba tener que llevar a Mía y quería de alguna forma transmitirle a Valentina que no tenía que excusarse tanto. "Yo encantada Val". Volvió a decir para que supiera que no le molestaba el favor que le pedía.
"Las veo pronto entonces, te agradezco guapa". Le respondió causando en Juliana una sonrisa del tamaño del Mundo por la forma en que dijo la última palabra.
"Palú podrías adelantarte junto con los demás". Le decía a su amiga y asistente para que no la esperará. "Está bien July nos vemos después suerte". Se fue diciendo, ya que la chica también se había enterado de su relación con la castaña. Juliana se fue y preguntó a directora donde quedaba el dormitorio de la niña, luego de la explicación se dirigió hacia allá aunque cabe decir que la pelinegra se perdió dos veces hasta que por fin dio con la puerta que decía en letras muy bonitas y estilizadas en color morado «Mía Carvajal»
Colegio estrella habitación de «Mía»
"Toc…toc". Tocó a la puerta escuchando pequeños pasos acercarse para abrirle.
"Genial eres tú Juls". Le decía la pequeña con gran entusiasmo lanzándose a los brazos de la pelinegra y dándole un fuerte abrazo que ella correspondió.
"Si hermosa, te tengo una noticia". Le dijo mientras entraba y cerraba la puerta, la habitación era muy amplia para una niña tan pequeña como Mía pensó la pelinegra.
"¿Cuál Juls, dime la noticia?". Cuestionó la niña dando saltitos mostrando su curiosidad por la respuesta.
"Por hoy te vas a venir conmigo, yo te llevaré a casa". Le informaba a Mía quien la miraba con una gran sonrisa y dando más saltos que antes claramente emocionada.
"Genial Juls, me encanta que ahora tú seas la novia de Mamá". Le decía y Juliana la miro asombrada pensó que Valentina aún no le había mencionado nada a la niña sobre su relación.
"Que bueno hermosa, yo feliz de poder pasar tiempo con una niña tan dulce como tú" enfatizó mirado a la pequeña quien aún llevaba el uniforme. "¿Dónde está tu ropa Mía? No pensaras ir así, es más hoy seré tu asesora de imagen ¿Qué dices puedo escoger tu ropa bebé?". Le decía señalando el uniforme. "Así no, si Juls escoge por mí". Respondió soltado una risita y dándole un sonoro beso en la mejilla seguido de un abrazo, la pelinegra pensó que era parte de la personalidad de Mía ser tan cariñosa, no podía negar que le gustaban los abrazos de esa pequeña.
"Listo ahora déjame hacerte unas dos coletas en la parte de adelante a ambos lados y dejamos el cabello suelto atrás". Le explicaba el peinado que estaba haciéndole, una vez que terminó de ayudarla a vestir, le puso un vestido de color celeste que tenía volantes y puntillas con encaje, que combinó con unas baletas en color gris. "Sí péiname Juls me gustan estos". Le dijo mientras Juliana tomaba los lazos azules en forma de mariposa que la niña le pasaba. Después de haber terminado, ambas salieron del colegio y Juliana subió en la parte de atrás de su BMW M4 deportivo en color blanco, a la niña poniéndole el cinturón de seguridad asegurándose que Mía estuviera segura durante el viaje.
La pelinegra al llegar a la casa Carvajal se dio cuenta de que había algunos reporteros en la entrada le abrieron las puertas dos hombres de seguridad, al avanzar se escuchaba el sonido de las cámaras sobre el auto las cuales desaparecieron cuando cerraron las puertas. Mía se había quedado dormida a mitad del camino después de parar por su insistencia en McDonald's, ya que la pequeña tenía hambre y Juliana amaba las hamburguesas por lo que tampoco se resistió y terminó comprándose una para ella también, luego de eso la niña le había platicado de muchas cosas desde lo mucho que le gustaban los animales, lo mucho que quería un perrito, sus dibujos animados favoritos y hasta habían entonado una que otra canción juntas durante el viaje.
"Despierta bebé… Mía". Decía moviendo a la pequeña sin éxito, ya que estaba profundamente dormida, sin pensarlo Juliana le sacó el cinturón de seguridad y con mucho cuidado la tomó en sus brazos apoyando la cabeza de la niña en su hombro. "Juls" pronunció la niña la cual no dijo nada más, ya que estaba más dormida que despierta. "Duerme bebé ya llegamos con Mamá". Le susurró Juliana con cariño a la niña sintiendo ternura de la pequeña, de repente la asaltó un pensamiento de que si ella y Valentina tuvieran una relación real serían una hermosa familia sin duda, no llevaba ni un día y ya empezaba a querer mucho a aquella niña que llevaba en los brazos y por la castaña sentía algo que no se atrevía a decir en voz alta todavía, solo sabía que era algo muy fuerte y mágico, pero no sabía que era exactamente lo que sentía, aunque ya lo comenzaba a sospechar.
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Aquí otro capítulo de la historia, espero les guste.
Hola😊
Saludos a todxs😘
