~Big Time Shots~

23. James Diamond

-¡James! ¿Otra vez aqui? ¿Ahora que necesitas?

-¡Necesito que me ayude a sacar a alguien de mi cabeza!

-Oye, oye, tranquilo. Dijiste, ¿alguien?

-¡Si! _____ Cowen.

-¿La que te dejó morado el ojo hace una semana?

-¡Si, ella!

-¿Quieres sacarla de tu cabeza? ¿Por qué?

-¿Por qué? Pues porque me despierto y lo primero que mi cabeza piensa, es en ella. Luego, me levanto, voy al baño y en el espejo, ya no veo al apuesto James Diamond, ¡La veo a ella!

-James, soy doctor, pero no terapeuta.

-¡Pero necesito que me ayude!

El Doctor Hollywood, de mala gana, aceptó ayudar a James, ¿Cómo? Él también queria averiguarlo.

***

Tres semanas estuvieron tomando "terapia", y, al parecer no habia mejoras.

-Bien, cuéntame, ¿Qué ha pasado?

-Lo mismo de siempre. Abro los ojos, me despierto y la veo, hoy la vi incluso mientras me servía mi cereal y, antes de venir para acá, vi que estaba yendo en la misma dirección que yo, sólo que más adelante. ¿Sabe lo feo que es tener que cambiar mi camino sólo por no verla? ¡Necesito que me ayude a sacarla de mi mente, YA!

-Ok, ok. Ya veremos que hacer.

Después de haberle dado un discurso, con el que cualquiera pensaria que todo mejoraría, James regresó al Palm Woods con una sonrisa radiante, como si no pasara nada.

-¡Hola James!

Él soltó un pequeño grito y, toda actitud positiva que tenia hasta hace unos minutos, desapareció.

-Jaja, perdón. No creí que después de mi golpe fallido me tuvieras miedo.

-¿Qué? No, no, yo... como crees que...

James comenzó a tartamudear y después de dar un grito más, salió nuevamente en dirección al consultorio del Dr. Hollywood.

-¡La vi! ¡Y habló conmigo! ¡Tiene que...!

Antes de que el chico pudiera terminar de hablar, el Dr. Hollywood le dio una gran bofetada.

-¡Auch! ¿Qué le pasa? ¡Eso dejará una marca!

-Estas enamorado James, y contra eso, no puedo hacer nada.

-¿Cómo que no puede? ¡Pero si es doctor!

-Si, doctor. Pero no psiquiatría, ni mucho menos psicólogo. ¿Por qué no sólo aceptas que estas loco por ella?

-Me esta recomendando ir a buscarla y decirle que si no va a ser mia, ¿tendré que ir con un psiquiatra?

-Asi como tal, no. Sólo ve a decirle que te gusta e invitala a salir.

-¿Y si intenta golpearme como la otra vez?

-Ah, ya entendí. Lo que tienes miedo, es que te golpee.

James asintió con notable temor en su rostro.

-Jaja, James. Eso fue un accidente. ¿Recuerdas que estabas ayudándole a ensayar para un casting?

Él negó.

-Bueno, al parecer el golpe hizo que se te olvidara. Pero, sólo ve y haz lo que te dije, te prometo que no te golpeara.

El chico cantante asintió y regresó a buscar a la chica, la buscó en la piscina, en el parque y, por último, en su apartamento.

Tocó un par de veces y ella salió.

-Te doy miedo, ¿verdad?

-Según el doctor, yo no recuerdo que haya sido un accidente, asi que eso provocó mi miedo. Pero, al parecer ya todo está resuelto.

-Ay, al parecer...

-¿Te gustaría salir conmigo?- Preguntó James interrumpiendola.

-¿Salir? ¿Tu y yo?

-No me vayas a pegar otra vez- dijo el cerrando los ojos, al parecer aún tiene miedo.

-Jaja, no. Yo... Am... Claro, salgamos.

-Uf, perfecto. El doctor dijo que no lo harias y, me alegro de que sea cierto, asi que... tambien queria decirte que me gustas.

Ella lo miró sorprendida, y después de dedicarle una amplia sonrisa se acercó a besarlo.

-Wow, nunca ne advirtió que esto podia pasar.

-¿Y te gustó?

Él en respuesta, la besó.