Eterno cachorro (KookMin) (Omegaverse)

Capítulo 53~Tan indicados

Maratón recta final (3-5)

Martes al medio día, el celo de JungKook había terminado en el tiempo estimado correcto de un Alfa (24 horas) sin embargo el de Jimin estaba más saciado, pero terriblemente despierto. Tras rondas exhaustivas de sexo, con margenes de un par de horas como máximo, el pelirrosa parecía por fin haber caído rendido en un sueño profundo junto al Alfa.

Jeon al despertar y sentir su celo apagado tomó una rápida ducha a la par que bajaba a la cocina mirando altanero a sus empleados avergonzados por todo lo escuchado el día y noche anterior. El teléfono de su casa sonó con una llamada de su primo YoonGi el cual le dio ciertas indicaciones sobre los cuidados de un Omega en su celo.

Era obvio que él no tenía ni idea de esas cosas, era de agradecer la ayuda de su primo. Lo primero que haría sería dejarlo descansar todo lo que pudiera antes de que despertara buscándolo a él necesitado de nuevo, después lo alimentaría (porque si él estaba tan hambriento y sediento tras un día no podía imaginar el pequeño cuerpo de su novio si no cuidaba de él en esos dos días que aún le quedaban de celo) y por último trataría de darle un baño.

La idea repentina de follar a Jimin en la ducha o la bañera le fascinó. Al volver a su cuarto y abrir levemente las cortinas dejando entrar una luz tenue Jimin lo miraba con los ojos azules brillosos a punto de llorar.

-Mochi, mi vida, ¿por qué lloras? -Rápido llega junto a él dejando la bandeja con fruta picada dulce y un zumo sobre la mesita de noche. Se sienta de lado frente a él, Jimin rápido lo abraza.

-Pensaba que Alfa me había dejado. -Era el Omega, no su pelirrosa, JungKook supuso que todos pierden un poco su control humano sobre su lobo durante el celo y más en la primera vez con el destinado. O algo así le comentó Tae cuando le habló de como fue su primera vez con Hoseok y YoonGi.

-Alfa nunca dejará a su Omega. -La seguridad con caricias de cariño en su voz. Lo retiene y aprieta entre sus brazos mientras besa su cabello durante unos minutos, lo separa lento sujetando sus estrechos hombros y el Omega se queja por la falta de calor.

"Segundo día: Mucho amor, cariño y mimos. Seguirá con ganas de sexo, pero más suave; más amor."

La voz grave de su primo en su cabeza con eco, acaricia la mejilla de su destinado dándole esos cariños. Su respuesta en una gran sonrisa ciertamente infantil que achica sus ojos en dos medias lunas.

-Te he traído comida. -Le sonríe sujetando el bol de frutas. -Pero primero toma esto. -Le ofrece el zumo y la pastilla que YoonGi le ha dicho. La inseguridad y temor por como le ha dicho que debía ser sutil al dársela, su idiota cabeza olvidándolo justo en ese momento.

-¿Alfa no quiere tener cachorros conmigo? -Los ojos azules del Omega de nuevo lagrimeando, un puchero pronunciado y un sollozo fuerte. -¿Por eso Alfa no me ha marcado?

-No mi amor. -Habla rápido sosteniendo como puede entre sus dedos libres de la pastilla una de las manos pequeñas de Jimin. -Alfa quiere cachorros con su Omega y quiere marcarlo. -Habla lento, pensando bien sus palabras para no herir al Omega sensible a flor de piel por el celo. -Pero JungKook sabe que Jimin quiere primero terminar sus estudios, quiere ayudar a otros Omegas como tú. -El llanto se detiene cuando presta completa atención al azabache. -Y tú lo sabes, Jimin puede ayudar a destinados como nosotros. Tenemos mucha vida para compartir y hacer esos momentos que mi Omega desea únicos y especiales.

Asiente, con temblor al coger la pastilla entre sus dedos y tragarla con un poco de zumo fresco. Los ojos azules se aguan de nuevo, pero la cálida sonrisa de JungKook lo relaja mientras comienza a alimentarlo entre besos suaves y tiernos en sus mejillas. El Omega está orgulloso del humano que posee su Alfa, se alegra por su propio humano. Dentro de él, Jimin está sonrojado y feliz de sentir el amor a través y por su Omega.

Los destinados son siempre tan indicados.