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Al día siguiente



Narra Mateo



Entré en el instituto y me dirigí a mi aula. Entré y mi vista se dirigió por inercia a Sofía, estaba apoyada en la mesa. Me dirigí a mi sitio mientras la miraba, me senté y me la quedé mirando desde atrás.

Seguro que todo esto era por su padre, estaba cien por cien seguro, algo la hacía, y lo que más miedo me daba es si la pegaba, si la hacía algo me moría, a pesar de que ella me odia yo la quiero.

Ella de pequeña cuando estaba su madre era una niña feliz, graciosa, que a pesar de la poca familia que tenía seguía adelante, y eso era lo que más destacaba de ella, lo que me gustaba, que era fuerte aunque ella no se diera cuenta, era una luchadora y eso la hacía más especial.

Pegué un brinco del susto cuando me dieron un golpe en el hombro, interrumpiendo por completo mis pensamientos.


- ¿Compañero que pasó?- me dio unas palmaditas en el hombro Camilo, para después sentarse a mi lado

- Nada loco- le miré y sonreí sin mostrar mis dientes

- ¿Estabas mirando a Sofía?- alzó una ceja y apoyó su codo en la mesa para apoyar su cabeza en su mano

- Estoy preocupado- dije sincero

- No sos el único- negó con la cabeza y me señaló con la cabeza a Paz que también la estaba mirando

- Pero no se que la pasa, ella no era así, ella era diferente a como es ahora, ahora..- hice una pausa y la miré- Cambió por completo, tanto físico como carácter- miré a Camilo

- ¿Cómo que cambió?- inquirió y frunció el ceño mirando a Sofía

- De pequeña era una niña dulce e inocente, siempre sonreía y te aconsejaba- sonreí nostálgico- Y eso que solo eran su padre, su madre y ella. No tenían a nadie más- le miré- Pero ahora ella ya no sonríe, no te ilumina con esa sonrisa que me iluminaba a mí también, está siempre enojada con el mundo y pensando en sus cosas- expliqué- Algo la hizo que cambiara su personalidad completamente, y empezó a cambiar después de unos años de la muerte de su madre, empezó a actuar raro y yo en esos tiempos me iba a mudar y no podía estar con ella

- A lo mejor actúa de esa manera porque necesita a su madre- se hundió de hombros

- Puede ser, no te lo niego- alcé las manos- Pero algo me dice que es por su padre- miré a Sofía que seguía en la misma postura desde que entré

- ¿Y por qué crees eso?- miró también a Sofía. Iba a decirle que su padre maltrataba a su madre y tenía miedo que se lo hicieran a ella pero me callé, no podía decirle eso, eso solo lo sabían mi familia y ya, era algo privado que no se podía contar como si nada

- No lo sé- me hundí de hombros- Pero es la única persona con la que convive

- Luego preguntamos a Paz que ella ha estado todo el rato con Sofía y su padre, algo notó pero no lo dio importancia, estoy seguro- dijo, suspiré pesadamente y asentí. A lo mejor tiene razón, quién sabe


Tocó el timbre entrando la profesora y empezó a dar clases.


(...)


Tocó el timbre y salimos Camilo, Paz y yo hacia los bancos de siempre. Me senté y miré a Camilo para que le preguntara a Paz, hizo una cara de que no me entendía y bufé, señalé con la cabeza a la morocha que tenía a mi lado y asintió mientras abría la boca, giré los ojos y le miré.


- Paz- habló Camilo rascándose la nuca nervioso. Me reí en bajo por la forma de actuar de mi amigo, me causaba mucha gracia- ¿Vos notaste si Sofía actuaba raro cuando estaba presente su padre?- miré a Paz que frunció el ceño

Cicatrices (Trueno) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora