▪︎Quarentine Time, multifandom▪︎

ﾟ✧ ࿐|ﾟ✧Markson [Got7]. ࿐|

Le resultaba totalmente imposible, por más que hiciera el esfuerzo día tras días; no podía sacarse la adorable imagen del pelirrojo de su cabeza; con esos ojos de un intenso negro que hacían que su mundo brillara de tan solo mirarlos, su delicada nariz que la hacía querer brindarle mimos todo el tiempo, sus hermosas manos que deseaba sostener todo el tiempo y esa manía suya que tenía de morderse el labio inferior cuando sw encontraba nervioso. 

Todo de Mark le parecía sumamente excitante, lo atraía con una fuerza sumamente poderosa de la que no podía escapar en absoluto. 

—Estoy perdido.—aceptó por lo bajo al contemplar al susodicho de lejos.—Es más que evidente que te gusta, ¿Por qué no lo aceptas de una buena vez?

—Es lo mismo que me pregunto yo.—Una voz a su lado le palmeó la espalda, se trataba de uno de sus mejores amigos.—No sé por qué a ustedes les encanta complicarse la existencia cuando la verdad está justo frente a ustedes.

El Hongkonés suspiró, al mismo tiempo que deshacía el nudo de la corbata, debían lucir perfectos pues estaban a punto de salir a escena pero ni un programa de show ni una entrevista le importaban más que su propio bienestar. Estaba sintiendo una sofocante sensación que lo atrapaba cada vez más, hasta casi querer acabar con él. 

—No es fácil. —admitió resiguiendo con el pulgar sus propios labios.—Sabes que su familia no se lo permitiría ni estaría de acuerdo con esto. Para ellos soy la mala influencia. —bajó la mirada debido a que Mark había interceptado su mirada justo cuando lo estaba admirando.—No quiero causarle problemas.

—Y por eso prefieres seguir utilizándome como tu tapadera.—dijo con cierto toque de reclamo implícito en la frase.— No tengo nada en contra de ello, me gusta pasar tiempo contigo y me agrada tanto que me tengas confianza pero, la verdad no se me hace una buena idea el que quieras alejarte de esa manera de él ni estoy de acuerdo en que lo evites con el pretexto de que tienen muchas cosas que hacer o que ahora de la nada prefieras mi compañía que la suya.—arrugó la nariz con desapruebo.—Un amor como el que se tienen ustedes no es nada por lo que se tengan por qué avergonzar.

Wang sabía que su compañero de grupo y hermano del alma tenía razón, no podía seguir comportándose de manera tan infantil al evitar el más mínimo contacto con aquel chico que amaba con todo el corazón. Pero, por ese entonces no tenía idea de qué debería de hacer para recuperar a quien era su alma gemela.

—¿Qué tengo que hacer para arreglar toda la mierda que he dicho y lo patán que he sido con él?—preguntó abatido con el corazón en la mano.—En verdad lo amo, no quiero perderlo ni hacerle creer más que no me importa, necesito que sepa que este tiempo en donde no hemos convivido como antes, ha sido una tortura.

—De eso no te preocupes. —Jinyoung sonrió cómplice, dejando a Jackson con la duda presente en sus rasgos. Finalmente mostrándole el celular que estuvo en una llamada con el altavoz puesto dentro de su saco desde el principio de su conversión. —Me he adelantado por ustedes.

Jackson al comprender la situación no pudo evitar que sus mejillas se tiñeran de un intenso rubor. El otro chico contuvo una risa estruendosa, el plan había salido excelente.

—Sabía que ustedes dos no darían su brazo a torcer con tal de proteger y respetar sus puntos de vista. Pero la verdad es que tanto a Jaebom como a mí ya nos estaba cansando de escuchar cuanto se necesitan uno al otro, por eso ahora mismo él se está encargando de que Mark escuche toda nuestra conversación. Dile hola.

Ni una palabra salía de la boca del fornido muchacho, era como si de pronto hasta su lengua natal se le hubiera olvidado. Aunque esto pronto cambió cuando escuchó una sola frase del otro lado de la línea. 

—Sabía que nuestro amor no podía terminar de esa manera.—Alzó la cabeza para ver a un sonriente Mark hablar por el teléfono. —Quizá no sea perfecto ni tengamos una relación convencional pero no hay duda alguna de que quiero estar contigo siempre. Te amo puppy, estoy ansioso por la charla que nos debemos. 

Sus terminaciones nerviosas se activaron al escuchar el tono de voz con el que le estaba hablando, más cuando captaba perfecto el mensaje entre líneas que "la charla" significaba para ellos dos. Sonrió agradecido con sus amigos y después centró nuevamente la vista en su querido pollito.

No cabía duda que ellos nacieron para estar juntos sin importar lo que el mundo les dijera, se amaban y eso pesaba más que una carrera musical que les exigía mantener las apariencias. Ya había fallado a su esencia una vez, no estaba dispuesto a cometer el error dos veces, ni mucho menos dejarlo ir.

Él amaba a ese chico, y ese chico lo amaba a él. No existía nada en el mundo en ese entonces, de ahora en adelante no soltaría su mano jamás.