¿Confías en mi?

Ryan Price es el menor de tres hermanos.Su padre,fallecido recientemente,se dedicó a una compañía de seguros de vida,herencia para la posteridad de su descendencia.

El reparto se hizo a puerta cerrada.Al hijo mayor le correspondió el cuarenta porciento de las acciones,al mediano el treinta y cinco y al menor el veinte y cinco.Además,como añadidura,este último recibió una orden directa de sus hermanos:supervisar una auditoría interna sobre el estado de las finanzas,a cargo del señor Aidan Bell.

—Era de esperarse,como no me sorprende,ellos siempre sacan la mejor parte—pensando en voz alta Ryan se acomodó en un asiento en la oficina del señor Bell.

Este fingió no oirle.Sobre el escritorio dejó el libro que estaba leyendo cuando Ryan irrumpió en su oficina.Escuchándole farfullar concluyó diciéndole:

—Ya verá como la herencia no ha sido del todo mala.Yo le ayudaré,solo necesito que usted confíe en mi.

Ryan asintió sin mucha esperanza.Por todo lo que restaba de semana trabajaron en el orden financiero.Sus hermanos le encargaron la dirección de la empresa,asegurando que estaban demasiado aturdidos por la muerte de su padre.

Sentados,Aidan y él en la oficina de la directiva,tras cinco largas jornadas de revisiones,facturas,etc,estaban extenuados.Con los informes finales sobre la mesa, sonó el teléfono:un adinerado cliente deseaba afiliarse.

—Esta es una oportunidad de oro—expresó el señor Bell viéndole a los ojos.

Dieron las siete de la tarde y se marcharon de allí;el joven señor muy satisfecho,como era de esperarse.Solo restaban un par de días para el gran acontecimiento.

El mayor de los Price recibió una llamada,cerca de la fecha prevista para la negociación.Al día siguiente se encontraba sentado en un restaurante esperando un compromiso.Por las puertas entró un hombre que se sentó a la mesa junto a él.Lo siguiente que se supo fue que el mayor de los hermanos salió de vacaciones.

Simultáneamente en la compañía se celebraba la reunión con el importantísimo cliente.Sentaron las bases de lo que pareció un buen acuerdo y concertaron reunirse nuevamente la semana entrante para ultimar los detalles.

La víspera del día señalado el mediano de los hermanos tomó otra llamada y como el mayor, también salió de vacaciones.

Ryan Price por fin tuvo el crédito y la atención que merecía.El encuentro se realizó y acordaron la suma de trescientos mil dólares como precio a pagar por el cliente para su afiliación,también debía abonar cuotas mensuales por espacio de un año.Al terminar el papeleo,Ryan salió muy alegre llevando consigo un paquete,a ver a quien se habia convertido en un buen amigo:El señor Bell.

El pago se realizó en efectivo,la intención no era invertirlo en la empresa.Aidan lo esperaba con una glock debajo de la mesa y al entrar su jefe,le apuntó.

—¡Deja el dinero sobre la mesa!¡Despacio!¡No se te ocurra gritar!

Ryan perplejo,cumplió la orden.Sobre el escritorio denuevo llamó la atención un libro,titulado “El gato con botas”.El señor Bell se levantó,tomó el dinero y dijo unas palabras:

—Si te sirve de algo,no es tu culpa,esto hubiera pasado de cualquier manera.¿Ves ese libro?Un clásico infantil,dentro hay algo para ti.Adiós—Atravesó la puerta y desapareció.

Ryan abrió el libro y encontró una hoja doblada que contenía un mensaje:

Tal vez sea vanidoso y quiera dejar por escrito mis proezas.Charles Perrault no pudo ser más acertado en su cuento y yo arrojaré claridad en tu mente,desesperada,si asumo que estás leyendo esto.

Todos tenemos un gato con botas en nuestro interior,un ser que es capaz de mentir tantas veces como sea necesario si eso le provee lo que busca.

¡Yo te mentí!¡Si!¡Pero no me culpes!Culpa a Charles Perrault por escribir tal cosa.Tus hermanos también fueron engañados,los insté a desaparecer o sino les haría pagar caro la negativa.Con frases célebres del tipo;
<<Si no hacen lo que ordeno,los haré picadillo como carne de pastel>>.

Confieso que tu hermano mayor fue bastante testarudo,se creía el ogro, pero gracias a mi ingenio le arrebaté su castillo.¡Les maté,justo después de que informaran de sus vacaciones!

Debes estar horrorizado pensando...
—No te culpo—que soy un loco.Antes de que continues despotricándome en tu mente,continua leyendo.No soy un loco ni un psicópata.¡Tu eres el Marqués de Carabás!Ahora viene lo insólito.¡Yo no soy Aidan Bell!.Mi nombre real es Aidan Price,hermano de tu padre y como tú,relegado a la sombra y el anonimato.No espero que me creas pero,el cuento no puede acabar así.

Edificio Este,Avenida principal.Háblale al portero y preguntale por el Rey y la Princesa,allí encontrarás lo que anhelas.Lo juro y mi honor no me dejaría mentir,soy un noble señor.

                           Firmado El gato con botas.

Portada: by @Ivinia ☺☺