Vanished

II

Desperté: asustado y con una gran presión en mi pecho, mis mejillas estaban frías ¿Estaba llorando? No lo sé, tampoco sé porqué lo único que puedo ver es una completa oscuridad ¿Dónde estoy? Me intento mover, pero es inútil mis muñecas están siendo presionadas por algo suave... Además, estoy lo suficientemente consciente para saber que estoy tendido en algo cómodo... Mis pies, sin embargo, cuando las agito emiten un sonido metálico correspondiente a cadenas... ¿Dónde estoy? ¿Quién soy? ¿Qué hago atado? Intento gritar pero mi boca se ve negada a moverse por un dolor en las comisuras de los labios... Aun así, intento liberar lo que sea... Así sea un simple "¡Hmm!"... No hay nada que más que un horrible silencio acompañada de la penumbra... ¿Por qué no puedo recordar nada? Tengo miedo... ¿Estaré muerto?... No lo creo.
– ¿Estás consciente? – Resonó una voz en el vacío. Solo pude agitarme y emitir un desesperado "¡Hmm!" ¿Quién está allí, me ayudarás, quién eres, quién soy?
– No se esfuerce. Le cosieron la boca. – Notificó mientras su tono se hizo burlón. ¿A qué se refería con eso? Aunque cada vez el dolor se intensificaba, yo seguía gritando... Tengo miedo, por favor ayudeme.
– Qué ruidoso... – Su tono cambió drásticamente a uno más serio. – Te diría "esto será rápido" pero sería una mentira ¿Me entiendes, Russel?
¿Russel? "¡Russ, ven rápido y juguemos!" ¡Yo soy Russel! "Russ... Mamá y papá nos quieren ¿no?" ¡Esos desgraciados, nos dieron a los buitres! "Russel... No me siento... bien..." Yo te cuidaré, hermana. "Cada día me siento más débil..." Yo te conseguiré las medicinas, tu aguanta Ana. Lo recuerdo, tengo una hermana.
– Empezamos. – Exclamó la voz en el vacío.
Un sonido hidráulico inundó el espacio, mi respiración se agitó "¡No, por favor, Ana, ¡Tengo que salvar a mi hermana! ¡Es lo único que tengo! ¡Va a morir si la dejo sola mucho tiempo, está enferma, llevenme con ella por favor!" agito mi cuerpo con fuerza e intento gritar pero no puedo, el dolor en mis labios no para. De repente, un puntiagudo dolor en todo mi cuerpo me inmovilizó de sorpresa; brazos, piernas, brazos, cuello, cabeza... No pasó mucho cuando sentía como mi sangre ardía "¡AAAAAAAAAAAAAH!" finalmente separé un poco los labios.
-A-AYUDA, QUEMA, QUEMAAAA. – Me muero, me muero, me muero.
Mis extremidades empezaron a temblar erráticamente, luego fue mi pecho el que colapsó... No puedo respirar, me sofoco.
-A-a-ayuda... A-ana... Debo... Salva... – ¿Qué me está pasando, dónde estoy, por qué nadie hace nada? Me... muero... "Dolor" "Soledad" "Ira" "Tristeza" Como imágenes en mi cabeza pasaban entre el caos, sentía como lágrimas se escapaban acompañados de un "¿Dó- dónde está Ana?"

Estaba sentado frente a mi escritorio, sobre ella hay una libreta, un bolígrafo y una taza con chocolate caliente... La lluvia seguía cayendo con fuerza... "Markus lleva desaparecido una semana, sin embargo, lo vi hace cuatro días... ¿Por qué? ¿Está solo?" está escrito en la libreta... Pensé que escribir lo que tenía en mente me haría tener un control de todo pero ahora que materializo esto, tengo la mente en blanco... Mierda... ¿Cómo estaba actuando Markus aquella vez?
Cerré los ojos para concentrarme, pero el tono de llamada de mi teléfono interrumpió todo... Al observar de quien se trataba, dudé mucho en si contestar.
- ¿Alex? – Sonó una voz femenina.
Trágame tierra.
- ¿Ya supiste lo de Markus? – Añadió, está triste... se nota en su voz.
- Sí... – Respondí. No tardó en preguntarme.
- ¿Cómo estás?
- ¿De verdad es necesario que te responda?
- Tienes razón, lo siento... No soy buena en estas situaciones... ¿Hoy te vas, no?
- ... No.
- ¿No?
- Pienso... – Ahora que voy a decirlo en voz alta, suena estúpido. – ... Buscar a Markus hasta hallarlo.
Hubo un momento de silencio donde solo era el sonido de la lluvia lo que inundaba el cuarto.
- ¿Necesitarás ayuda? – Preguntó.
¿No puedes burlarte u odiarme aunque sea?
- Aquí estoy para ti, Alex... Lo sabes muy–
- Nate, yo... – No podía con esto ahora. – Yo te llamo más tarde...
Colgué.
Volví mi mirada a la libreta y escribí "¿Cómo estaba actuando Markus aquél día?" ... Le di el último sorbo al chocolate caliente. Me levante con taza en mano y fui a la cocina para poder dejar la taza en el lavaplatos... Al salir de allí, en la sala estaba mi abuelo frente al televisor, durmiendo y con el periódico en mano... Me acerqué a él ya que en el periódico salía la foto de Markus "¡Se busca!" Odio esas palabras... "El detective Jack Hamilton se encargará de la desaparición del joven de 19 años; Markus Holland" Me pregunto si tendrá ya algo... Con esa duda en mente me acerqué a la ventana, la lluvia seguía cayendo pero de manera más débil... Es cuestión de tiempo que se detenga. Volví a mi habitación y me desplome en la cama... ¿Fue el chocolate caliente? Pensar tanto me hace sentir cansado... También y después de todo me levanté muy temprano, cerraré los ojos un momento.