Soltó un sonoro suspiro mientras cerraba su libro de texto para dedicarse a observar como todos sus compañeros salían del aula con sus amigos. Se mantuvo con aquella expresión seria y solo colocó su mentón sobre su mano, pudiendo apreciar, como el salón iba quedándose vacío rápidamente hasta que fue el único que quedó dentro. Era la hora del descanso y él solo podía quedarse allí sentado.
No le gustaba ése sentimiento de ser el chico nuevo, no le agradaba la idea de que tener que ingresar a una escuela completamente nueva a mitad del semestre aunque, la preparatoria a la que su padre había decidido cambiarlo, era la mejor, eso no le impedía odiar estar ahí. Seokjin sabía que tenía que cambiar a una escuela más prestigiosa por su bien debido a que, era el hijo de personas importantes de grandes compañías en el país pero aún así, no le gustaba que su padre tomara decisiones por si mismo sin considerarlo, hablarlo con él o pensar en como se sentiría al respecto.
Gruñó, llevando su mirada hacía la entrada del aula donde se asustó un poco al ver a un chico de cabellos castaños claros, delgado y no tan alto como él, le miraba desde la puerta atentamente. El chico, al sentir la mirada del contrario, rio un poco antes de atreverse a caminar hacía él con entusiasmo, llegando hacía la fila donde Jin se encontraba sentado para tomar la silla del asiento de adelante y girarla en dirección frete al contrario, tomando asiento en ése lugar para poner ambas manos sobre la mesa de trabajo de Seokjin. El chico ladeo un poco su cabeza, haciéndolo lucir lindo, con una pequeña y radiante sonrisa formándose en sus labios humectados.
— ¿Kim Seokjin? — preguntó el desconocido con un tono de voz tan dulce que Seokjin no pudo evitar sentirse un poco enternecido.
— ¿Cómo sabes mi nombre? — respondió bajito a lo que el contrario rio.
— Park Jimin, hijo del director de la preparatoria. Desde ayer no dejan de hablar de ti por los pasillos así que... me enteré que eres hijo de personas importantes ¿es verdad? — preguntó Jimin, mirándole con curiosidad.
— ¿Tiene alguna relevancia el que sea hijo de personas importantes?
Una pequeña risa salió de los labios del contrario.
— ¡Para mí no! — chilló el chico con emoción, golpeando la mesa de trabajo de Seokjin. — Pero tenía curiosidad de conocerte por todo lo que dicen, usualmente los estudiantes de aquí no suelen prestarle atención a los nuevos y se enfocan en sus estudios... es solo que tu, lograste captar la atención de los alumnos en general. Creí que sólo era por tu posición pero, ahora que te veo, creo que no solo fue por eso.
— ¿Es algo malo?— preguntó, con un tono de voz firme.
Nuevamente, aquella risa dulce se escuchó y Seokjin le miró con atención al no entender porque el chico reía cada vez que hacía una pregunta.
— Nope. ¿Acaso no has escuchado lo que dicen de ti? — inquirió, mirando sus propias manos para fingir desinterés.
— Papá me enseñó a no tomarle importancia a los comentarios de las personas que no son nada para mí. Así que... prefiero escuchar atentamente solo lo que dicen los mayores o personas que han sido relevantes de alguna manera — respondió con tanta sinceridad y seriedad que Jimin no pudo evitar mirarle boquiabierto.
— Ya veo. Eres hijo de personas importantes con demasiado dinero, es normal que tengas estas enseñanzas y tu vocabulario sea tan formal. Supongo que, por eso nos encantas...— dijo el menor, con una sonrisa adornando sus labios.
El pelinegro frunció el ceño al escuchar esas palabras. Sabía que la posición de sus padres influía mucho en su educación y manera de ser, pero jamás había escuchado a una persona decir que eso les agradaba.
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prince: Jinkook.
Fanfictiondonde todos trataban a kim seokjin como un verdadero príncipe y jeon jungkook odiaba completamente eso.