Capítulo 14 parte 2

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El sonido de la puerta me saco de mis pensamientos, de inmediato cambié mi cara y me puse en postura de defensa.

"Pase" dije como si estuviera enojada, estaba separada de Lucas tratando de fingir.

Por la puerta entro el chico humano que nos había traído antes, entro con una charola y cerro de inmediato la puerta detrás de él.

"Conrad me dijo que lo necesitarían" dije dándonos una mirada cómplice, primero lo analice y cuando estuve segura de que estaba diciendo la verdad el sonreí.

"Gracias, me estaba muriendo de hambre" el asintió y me devolvió la sonrisa.

"Me voy a quedar aquí, espero que no los moleste, pero nadie se debe de dar cuenta" asentimos y casi corrimos a la comida, sobre todo yo.

"Todo lo que necesiten pueden hablar conmigo, trabajo también para Abe" asentí llevándome un bocado de comida a la boca.

Cuando terminamos de comer el salió de nuevo con la bandeja y yo agradecí mentalmente a Conrad pues me iba a facilitar todo.

No podíamos hablar muchos entre nosotros porque no sabíamos en donde estaban los demás o si podían escucharnos así que nos volvimos a sentar a ver una película.

"Descasa un poco, ahora es tu turno" dijo Lucas acurrucándome en sus brazos.

Quería protestar, pero sabía que lo necesitaba para poder tener fuerzas para cualquier cosa que pasara, además de que mis ojos estaban empezando a sentirse pesados.


Cuando ya estaba dormida me di cuenta de que estaba en la corte, en el cuarto de Lissa y empecé a tener esa sensación de que estaba en un sueño espiritual, me senté en la cama de Lissa esperando ver a Adrián quien era la persona con la que solía hacer esto.

Empezó a aparecer Adrián y Lissa cosa que sorprendió, Lissa corrió a abrazarme.

"Hola chicos" dije tratando de respirar atreves de los brazos de Lissa.

"Te he extrañado" dijo Lissa y después se separo para verme, me examino y yo mire lo que traía puesto.

Tenía un vestido corto que había encontrado, no me gustaba demasiado pero no había encontrado nada más ya que mi ropa ya no estaba cuando volvimos.

"Me gusta más esta moda pequeña dhamphir" dijo Adrián sentándose en una silla que había en el cuarto.

Yo rodee los ojos "Es lo único que había" Lissa no dejaba de sonreír.

"Ah, por cierto, hay unas personas que te quieren ver" comento Lissa y después de eso vi como mis hijos se materializaban.

En cuanto me vieron vinieron corriendo a mí y yo los tome con los brazos abiertos.

"¡Mamá!" era lo que gritaban abrazándome con fuerza, yo imité esto y empecé a sonreír.

"No saben cuanto los he extrañado" dije aún sin soltarlos.

"Nosotros también" hablo Mason.

Andre estaba sollozando "Estábamos preocupados por ti".

Le di una sonrisa tranquila "Lo sé, pero necesitaba hacer esto además recuerden que nadie puede conmigo" los tres asintieron y me abrazaron más fuerte.

"¿Y cómo está yendo todo mamá?" pregunto Kolya soltando un poco su abrazo para poder mirarme.

"Bastante bien, ya he podido conseguir nueva información, debo admitir que muy listos no son los strigoi" ellos rieron. "No quisiera decir esto, pero necesito hablar con Lissa, quiero que sepan que los quiero mucho y que pienso regresar pronto".

Ellos me dieron una mirada triste, pero entendieron, me dieron un ultimo abrazo y con eso se desvanecieron en el aire.

"Liss al parecer es una moroi y también me tiene bastante odio" ella asintió guardando la información "Lo que tratan de hacer es terminar contigo".

"Gracias Rose por hacer esto" dijo dándome una mirada agradecida.

"Es mi trabajo, también descubrí que están viniendo varios strigoi y es por eso que están habiendo más avistamientos".

"Vaya pequeña dhamphir, solo has necesitado un día para saber esto" dijo con una sonrisa en la cara.

"Como dije no son muy listos, de hecho, me recuerdan a ciertas personas que conozco" el me fulmino con la mirada y después se rió. "Deben de dormir así que los veré después".

Ellos asintieron y me di cuenta de que empezaron a desaparecer frente a mi para después desvanecerse todo el sueño y caer en un negro, me volví a dormir y esta vez tuve sueños normales.

Estaba empezando a acostumbrarmea las nauseas así que ya no me afectaban, aunque seguían ahí.

Después me desperté con Lucas mirándome de una forma tan dulce que dolía, yo traté de poner una cara divertida.

"¿Miras algo que te guste?" en cuanto prenuncie esas palabras me arrepentí pues recordé que era algo que le decía a Dimitri.

"Demasiado" y con eso me beso.

Después de que paro me reincorpore y trate de actuar de forma seria "Duerme un poco mientras siga siendo de día" el asintió y se fue a dormir.

Esto empezaba a ser algo aburrida ya que lo único que podía hacer era ver algo en la televisión y no había demasiadas cosas buenas que ver.

Pasaron unas cuatro horas y ya empezaba a ser hora de volver a comer o al menos para mí apetito. Y el cielo empezaba a darme la razón.

Después de otra hora escuché el sonido de la puerta, desperté rápido a Lucas antes de hablar.

"Pase" entro de nuevo el humano con otra bandeja de comida, yo casi corrí a quitárselo, el me dio una mirada divertida.

Empezamos a comer y él se quedó parado escuchando.

"¿Y cuanto tiempo llevas aquí?" pregunto Lucas, yo tenía la boca llena de comida para poder hablar así que no dije nada.

"Ya llevo 1 años y medio trabajando para Olya" vi que había algo de tristeza en sus ojos.

"¿Te gustaría terminar con esto?" pregunte con la boca aún llena lo que les arranco una sonrisa.

"Terminar me gustaría, pero se que es importante que este ayudando" le di una sonrisa, sabía lo que se sentía poner antes el deber que lo que tu querías.

"Cuando nos vayamos habremos terminando con los de aquí así que te vienes con nosotros y no te lo estoy preguntando" dije de forma firme, el me dio una sonrisa y asintió.

Después de que terminamos tomo las cosas y salió con cuidado de que nadie lo viera, unos minutos después volví a escuchar la puerta, pensé que se le habría olvida algo, pero por si acaso tome mi papel.

Por la puerta se asomo Kenai por la puerta con una cara serie, y m espante y pedí para que no hubieran descubierto al humano.

"Olya los quieren ver" con eso empezó a salir y nosotros detrás de él, nos llevó hasta un estudio que estaba demasiado oscuro.

Cuando entramos Olya nos estaba esperando sentada en un sillón, nos dio una sonrisa que fue de todo menos amable.

"Quería hablar de ustedes sobre nuestra causa" dijo acercándose a nosotros, con un gesto nos dijo que nos sentáramos y así lo hicimos.

"Me parece que pueden servir" yo asentí tratando de contener el sentimiento que tenía. "Aunque sin duda tendrán de ganarse la cantidad de información".

Yo asentí y hable "Hare lo que me pida, quiero acabar con esa reina" me dolió demasiado decirlo, pero trate de decirlo con rabia para que fuera creíble. Sabía que tendría que fingir odio hacia una de las personas a la que me quería y eso me dolía.

Mañanasubiré el nuevo capítulo. Gracias por leer.

De nuevoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora