"La magia de un bar"

=Capítulo 27=

 "Bello".

Narra Carolina:

Llegamos a un restaurante en donde hay muchas plantas y con algunas fuentes, estaba todo hermoso, ya que la fachada del lugar se veía rústico, un poco antiguo con algo moderno, se veía muy hermoso.

—¿Te gusta? —me preguntó tomándome de la cintura y susurrando muy cerca de mí oído. Aquella cercanía me puso un tanto nerviosa así que solamente asentí.

—Ven —dijo guiándome hacia el interior del lugar.

No había nadie más, no hay personas comiendo ni trabajadores y camareros a la vista, solamente somos él y yo.

—Agus, ¿Esto es un restaurante? —estaba confundida.

—Hum, sí, ¿Por?

—Ya sé que sonó tonta mi pregunta, pero ¿por qué rayos no hay personas comiendo ni empleados en este lugar?

—Es porque aún no se ha inaugurado.

—¿A qué te refieres? —pregunte dudosa.

—Sabes bien que he estado trabajando todos estos meses, no tenía ni idea de cómo sería la decoración pero me acorde de ti.

Me sonrió nostálgico y comenzó acariciar mi mejilla.

—Recuerdo la vez que salí contigo a un parque, te veías tan bella, tan natural y tan hermosa admirando la naturaleza —acarició mi cabello y colocó un mechón detrás de mi oreja—. Mientras me contabas que te hacía feliz porque recordabas cuando salías con tu madre, así que hice esto por ti.

Tomó mi mano y caminamos hasta llegar enfrente de un estanque, uno muy hermoso, está hecho de piedra con peces japoneses y de varios tipos, con algunas plantas en el fondo y otras por fuera adornándola aún más, no podía creerlo, se ve tan hermoso.

Las lágrimas no tardaron en salir, era justamente como se lo había descrito, tal cual como se lo había contado aquel día, como lo había soñado, tan perfecto.

—¿Te gustó? —me preguntó abrazándome de la cintura, atrayendo mi espalda a su pecho.

Negué repetidamente con la cabeza mientras tapaba mi boca con mis manos.

—Sí, me encanta, está todo muy bello, no sé qué decirte, muchas gracias yo... —Me interrumpió volteándome hacia él y abrazándome.

—Me alegra que te guste, pero aún falta algo más.

—¿Qué cosa? —pregunté sorprendida, todo está tan perfecto, ¿Que podría faltar?

—Ve el fondo del estanque.

—Ya lo he hecho —dije confusa.

—No, mira detalladamente.

Hice lo que me pidió, no entendía nada, no veía algo más que él quisiese que vea, observé detalladamente como si quisiera guardarlo en mi mente, un pez japonés nadó hacia una de las orillas y pude entender lo que Agus decía, lo que quería decirme, estaba tan feliz y sorprendida que pude sentir que el corazón me dejó de latir por una décima de segundo.

Una lágrima resbalaba por mi mejilla y no hice nada más que verlo a los ojos. 

—¿Es enserio? —pregunté sollozando.

—¿Por qué dudarías? —cuestionó con los ojos cristalizados—. Escúchame bien.

Sentía que el aire se me iba.

—Espera, déjame abrazarte por si es un sueño —ahora yo lo atraje hacia mi y de verdad recé porque esto no fuera producto de mi imaginación. 

Me separé de él y ahora lo que había leído hace un minuto lo oía por medio de su boca.

—Caro ... Te amo —susurró no muy bajo para que pudiera oírlo.

Acunó mi rostro en una de sus manos y con la otra me tomaba de la cintura, podía sentir mis lágrimas bajar por mis mejillas.

El momento era perfecto incluso mucho más que eso, me miraba anhelando que le dijese algo, pero no podía de lo tan feliz que estaba, ahora yo fui quien acunó su rostro con ambas manos y lo miré con una sonrisa de oreja a oreja.

—Agus, también te amo —vi que sus pupilas brillaron y no esperé más para besarlo.

Me acercó a él y pasé mis manos a su cuello entrelazándolas detrás de este mientras acariciaba su cabello.

Pude sentir su sonrisa a la mitad del beso y no hablo específicamente de lo físico, si no que llegó hasta lo más profundo de mi, pude sentir su alegría y pensé que él podía transmitirme cualquier tipo de emoción, no entendía cómo lo hacía, pero me fascinaba.

Después de aquel momento tan significativo para ambos, comimos en el restaurante lo que tantas veces Agus había preparado para mí, él siempre me cocinaba algo, reímos y nos contamos lo que habíamos hecho en estos días en los que no podíamos habernos visto, lo cual era loco porque nos habíamos visto ayer.

Me llevó a aquella cabaña en la que habíamos comenzado a salir, bebimos un poco de vino y bailamos recordando aquel día meses atrás.

Terminamos en esa habitación en donde nos entregamos por primera vez, besaba y recorría mi cuerpo con tanta lentitud como si guardara este momento en su mente para recordarlo después, aquello me hizo estremecer, sus pupilas estaban oscurecidas por el deseo, pero sus ojos transmitían más que eso, casi que me convulsionaba por completo y me hacía sentir tan amada que quería hacer lo mismo por él, lo besé profundamente saboreando cada rincón de su boca, acaricié su abdomen y un poco más que eso, podía oír sus gemidos cerca de mi oído mientras anatómicamente su cuerpo se unía al mío.

 El placer aumentaba pero a ninguno le molestó, me miraba fijamente y podía ver cada una de sus reacciones mientras nos demostrábamos cuanto nos amamos, esta vez era diferente, sabíamos que nos queríamos, que nos atraíamos mutuamente, pero ahora ambos sabíamos que nos amamos, ahora sabía que él era para mí,que estaba hecho para mí y que yo fui hecha para él ... nadie más que sólo para él.

Nos dijimos un par de cosas, como recordar cuánto deseábamos decirnos aquello, hablar sobre todo que no tiene interés, pero que con él tiene importancia, charlar sobre las estrellas y cuanto amaba besar su boca.

Besó mi frente y mis labios para decirme que descanse y abrazarme fuertemente atrayéndome hacia él para dormir de aquella forma.

Todo era bello, muy hermoso, de verdad tan bello, que recordé aquella frase que alguna vez había oído, "Lo bello atrae problemas, sólo esperaba que estos se tardarán un poco más."

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GRACIAS POR LEER!
Espero que este cap les haya gustado, igual le edite unas partes, a mi me ha encantadooo❤️❤️.

Perdonen que he andado un poco desaparecida, tengo algunas lesiones que no me han dejado en paz hahaha, nada grave.

Consejo de vida:

 Presten atención con las cosas a su alrededor.

¡Mi extraño órgano te lo agradece! ☕⚡💙 .

...Wen.