Al borde del precipicio

CAPÍTULO 4

Stiles despertó a las 11 de la mañana ese día, no tuvo pesadillas, en realidad no soñó nada en absoluto, solo una bruma negra, sin embargo, al momento de despertar todo lo ocurrido la noche anterior lo golpeó con fuerza, estaba ardiendo en fiebre y podía sentir un profundo dolor en todo su cuerpo y un fuego que ardía en sus huesos dejándolo mareado y con un horrible dolor de cabeza, soltó un par de lágrimas al recordar que su papá lo había vendido, estaba acostumbrado a los golpes que le daba casi a diario, pero venderlo, eso definitivamente traspasaba cualquier barrera existente en su maltratada relación padre-hijo, sin embargo, no hubo un llanto escandaloso, o sollozos doloridos, o gritos angustiados, solo lágrimas que caían libremente por su rostro como si ya no le quedaran fuerzas para nada más, como si se hubiera rendido a lo que sea que le arroje la vida.

Aún con lágrimas cayendo de sus ojos, se levantó con dificultad, vio la hora en su celular, y notó que había faltado a clases, lo que definitivamente lamentaría más tarde, sin embargo no le importó, solo se levantó perdiendo el equilibrio unas cuantas veces antes de lograr tomar algo de ropa limpia y dirigirse al baño para poder darse una ducha fría.

Después de media hora en la que frotó con ira su cuerpo en un intento desesperado por sentirse limpio nuevamente y quitar el rastro de las manos de Josh que aun sentía deslizarse por su torso, se rindió, aquello que lo manchaba no saldría con una ducha, no saldría con nada y él lo sabía muy bien, así que se secó, se puso ropa y bajó a comer algo, recordando en el camino que ese era el día de la reunión de padres.

Se detuvo en seco, a mitad de camino, la reunión de padres...lo que significaba que Harris haría lo imposible para dejarlo mal frente al Sheriff, lo que terminaría en más golpes...

Bajó la cabeza y se frotó la cara con ambas manos...Genial, murmuró...

Retomó su camino a la cocina, donde agarró una manzana y volvió a su cuarto, ya no tenía hambre, de todos modos era mejor tener el estómago vacío para cuando le dieran la golpiza en la noche, así no tendría nada que vomitar cuando los golpes se volvieran demasiado para aguantar.

En algún momento se quedó dormido en su habitación, hasta que un fuerte grito lo despertó

Stiles! Maldito mocoso ven acá!! Gritó el Sheriff claramente furioso.

Stiles, palideció, él sabía que le esperaban golpes, pero escuchar a su padre gritar así le encogió el estómago y heló sus huesos.

Bajó rápidamente a pesar de que sentía horrible y su fiebre aún no bajaba, intentando no molestar más al hombre en la sala, pero fue en vano, apenas llegó a la puerta de la sala de estar fue recibido con un fuerte puñetazo en su rostro que lo arrojó directamente al suelo.

Pequeña mierda sarcástica! Disfrutas discutiendo con los maestros Stiles...no solo me sacas de quicio a mí, sino que ahora también a tus maestros, porque no puedes cerrar la maldita boca y no creas que no sé qué pasó anoche, te dije que no molestaras a esas personas, pero te tenías que hacer el listo.

Cada frase dicha por el sheriff era acompañada de fuertes patadas en el torso de Stiles, casi no podía respirar y el dolor le estaba nublando la vista.

Tienes suerte de que igual aceptaran el pago!! Maldito mocoso...

Lo siento papá...murmuró Stiles tan bajo que apenas se escuchaba, pero fue suficiente para que sheriff tomara al joven por el cuello apretando con fuerza y cortándole todo el suministro de aire.

Te dije que no me llamaras papá! Yo no soy tu padre, maldigo el día en que naciste!! Gritó apretando con más fuerza.

L-lo Si-Siento se-señor susurro Stiles antes de quedar inconsciente.

El Sheriff al ver que el niño no se movía lo soltó, para luego comprobar si seguía vivo lo cual confirmó cuando empezó a toser violentamente intentando meter aire a sus pulmones, lo tomó con fuerza del gorro de su sudadera y lo arrastró hasta el sótano de la casa, cerrando la puerta con llave una vez que lo arrojó al suelo.

Aprenderás a mantener la boca cerrada, maldito mocoso, yo me encargaré de eso, dijo el sheriff antes de subir a su habitación.

notas: capítulo corto lo siento...creo que este fic me está saliendo más oscuro y dramático de lo planeado...en fin cualquier comentario y crítica constructiva se agradece.

Hasta el próximo martes ;)