3 minutos |💸| Choi Soobin

Chapter 8.

...

—Vaya, tu pierna parece estár mucho mejor ¿no?

Comentó EunYeong apareciendose detrás del chico.

—¿Qué pasa contigo?, ¿no podías mandarme un mensaje para saber si estabas bien o no?, fueron tres días que te ausentaste. ¿Cómo pudiste colapsarte por exceso de trabajo? Deja de trabajar en la gasolinería ¿entendido?

La interrogó rápidamente SooBin.
Claro, se veía preocupado, estuvo 3 días sin saber nada de ella y después aparecía como si nada en los pasillos de la escuela.

—No lo sé, lo pensaré, pero no prometo nada.

Respondió EunYeong sonriente.

...

—Vamos, eres muy lento en esto, se va a hacer de noche pronto, SooBin

Le reclamaba EunYeong al chico que solo estaba sentado viendo como todos los demás se mataban bajo el ardiente sol mientras recolectaban las cosechas.

—¿Esperas que haga lo mismo que todos los demás?, aparte, ¿para qué vinimos aquí?, ¿acaso recoger estúpidas zanahorias del piso me va a ayudar a graduarme?

—Necesitamos ganar dinero de alguna forma, somos estudiantes de último año, las cosas de la universidad no se pagarán solas.

Explicó Eun de una forma calmada.
No necesitaba estresarce en este momento, eso solo la agotaría más.

—Sigan soñando, no recogeré verduras del estúpido piso.

Se negó SooBin sin remordimiento alguno y solo se quedó sentado.

...

—Muchas gracias.

Agradeció un chico mientras tomaba el sobre de billetes que le entregaba un señor.
Así pasaron todos uno por uno para recoger su recompensa por el duro trabajo que habían tenido aquel día, hasta que llegó el turno de Choi SooBin.

—Muchas gracias.

Tomó entre sus manos el sobre que obviamente no merecía.

—Hey hey, ¿a donde crees que vas con ese dinero?

Apareció EunYeong de la nada arrebatando el sobre de las manos del chico.

—¿Qué crees que haces?, eso es mío, a ti te dieron el tuyo.

Dijo SooBin algo molesto.

—Estás equivocado, ese dinero es producto del trabajo de todos menos tuyo, por lo tanto no lo mereces, mocoso malcriado

Sonrío ampliamente la chica mientras miraba el dinero dentro del sobre.

—¿Que?-, soy CHOI SOOBIN. En mi cuenta, tengo más de...

Intentó decir SooBin pero fue interrumpido por Eun

—¿Y eso qué?, no es tu dinero ¿no es así?, todavía tienes un largo camino. Deberías escucharte a ti mísmo, no tienes siquiera un centavo encima. Eres patético, ¿crees que me interesa quien eres?, por favor, ¡sé realista!

Le dijo la chica por última vez antes de darse la vuelta hacia sus demás compañeros

—Tomen chicos, repartan el dinero entre ustedes.

Decía EunYeong mientras les hacía entrega del sobre con dinero.

...

—Aquí nos bajaremos, gracias por traernos hasta aquí, ByungChan.

Agradeció EunYeong mientras se bajaba de la camioneta junto a SooBin.

—No es nada, nos vemos el Lunes en la escuela, adiós

Se despidió el chico para luego irse.

—Repite una vez más las razones del porqué vine contigo

Pidió SooBin

—Mmm...Porque hoy no te iré a cocinar la cena a tu casa, si estás solo lo único que causas son problemas y....Porque eres idiota y haces lo que yo diga, pensé que tenías todo ya claro.

Respondió EunYeong con una pequeña sonrisa

—Eres súper graciosa, niñita

Dijo el chico con un tono sarcástico.

—Como sea, ¿qué hacemos en el orfanato?, ¿acaso no dijiste que iríamos a cenar a tu casa junto a tu familia?

Cuestionó SooBin.

—Eso haremos.

Respondió EunYeong.
Pronto se pudo ver como el director de la preparatoria salía del orfanato, al parecer esperando a alguien.

—¿Ah?, ¿tu que haces aquí?

Le preguntó SooBin al mayor.

—Aparte de ser el director de la preparatoria, aparte soy director del orfanato. Como sea, EunYeong, no deberías estar afuera por tanto tiempo, me preocupé.

Dijo el señor.

—No me regañes, papá.

Dijo EunYeong con una pequeña sonrisa en la cara mientras se dirigía al interior del orfanato.

—No me digas que ahora sientes pena por mí, no tienes que sentirte así, no quiero la lástima de nadie por ser adoptada, es algo de lo que estoy orgullosa.

No hubo siquiera un gesto en forma de respuesta por parte de SooBin.

—Sé como te sientes, todos se sienten mal por mí cuando saben que soy huérfana, como sea, gracias por traerme a casa.

EunYeong dijo por última vez para luego darse la vuelta dispuesta a entrar al recinto

—¡Oye!

Dijo SooBin un poco alto haciendo que la chica parara y se diera la vuelta antes de entrar al orfanato

—No me siento mal por tí, yo tampoco tengo padres, te entiendo.

Explicó y luego esta vez el se dió la vuelta para comenzar a caminar.

Esto era curioso, impresionante y satisfactorio para Eun, aquel chico arrogante compartió por primera vez un sentimiento que no era avaricia, lindo.