Capítulo 4

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"Así que... Creo que me gusta Foxy."

Freddy miró a Bonnie desde el otro lado de la mesa, no realmente sorprendido. Era martes y estaban esperando en la cafetería para almorzar. Cami había ido al baño, porque al parecer le había llegado su período.

Habían pasado exactamente diez días desde la fiesta, y Freddy no había visto a Foxy, Fred y Gold desde entonces. Bueno, a menos que contara las veces que los había visto apoyados en la pared de su escuela, fumando y riendo mientras Freddy esperaba para ser recogido.

"Has... ¿Has estado hablando con el recientemente?" Preguntó Freddy.

"Uh, no realmente. Quiero decir, se me acercó el jueves pasado cuando estaba esperando a mi chófer y me preguntó si quería ir a algún lugar".

"¿A dónde?"

"Él simplemente dijo 'algún lugar'. Por supuesto que no fui, porque tenía que estar en casa y realmente no tengo nada de qué hablar con él".

"¿Tienes su número?"

"No. No preguntó por él y no podía ofrecérselo".

"¿Así que no han hecho otra cosa aparte de...?"

Bonnie negó con la cabeza, para alivio del castaño. Freddy no estaba aliviado porque Bonnie no había hecho cosas sucias con un chico (se enteró de que no le importaba realmente), estaba aliviado porque si Bonnie hubiera hecho cosas con Foxy, tendría oficialmente más experiencia que él. Y Freddy siempre quería ser el mejor en todas las cosas.

"Pero eh, no se lo digas a Cami ¿Sí? No quiero que mis padres, o cualquier otra persona se entere de esto".

"Por supuesto, no voy a decirle."

La conversación se vio interrumpida cuando Cami y Golden volvieron a la mesa sonriendo. Cambiaron de tema para hablar sobre el siguiente juego de Cricket que era este sábado. Freddy realmente no disfrutaba de los deportes, ya que hacer deportes significaba sudar y oler feo y él no podía estar así.

Tal vez es por eso que tengo una inmensa panza y un culo gordo.

Cuando terminó la escuela ese día, Bonnie, Golden y Freddy iban a comprar entradas para el baile de invierno, que iba a tener lugar en el hotel no más caro de Madrid, si no que de toda España. Cada estudiante recibiría una suite para ellos y su pareja para pasar la noche. Por lo general, los chicos compraban los billetes, y las chicas hacían su esfuerzo en ponerse bonitas.

"¿Con quién irás?" Freddy le preguntó a Bonnie, quien se encogió de hombros.

"No lo sé. Probablemente iré con alguna chica de nuestra clase".

"Puedes ir con Verónica. Rompió con Fernando la semana pasada."

"Probablemente lo haga."

"Iré con Gold." Dijo Golden y, normalmente, a Freddy le importaría que fuera un chico de escuela pública, pero él sólo se encogió de hombros.

Gold parecía fresco y relajado, sabía cómo pasar un buen rato.

Esperaron a sus choferes, y Freddy vio a Gold y a Foxy acercándose. Le dio un codazo a Bonnie discretamente, quien se sonrojó y bajó la mirada hacia sus zapatos, tratando de parecer ocupado.

"Hola bebé." Dijo Gold, mirando a su alrededor, pero Golden aseguró que su chófer no había llegado aún. El albino le dio un beso en los labios, antes de poner un brazo alrededor de sus hombros.

"Vamos a salir esta noche, ¿Sí?" Le preguntó y él asintió.

"¿Quieren venir?" Preguntó Foxy, mirando a Freddy y luego a Bonnie.

Bebé, el cielo está en tus ojos •Frededdy• [Adaptación]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora