Juégame Agente | KookV

XXI

Tenían prohibido acercarse al pasillo donde habían encerrado al pelirrojo que lejos de haber mejorado y ayudado en su situación no hacía más que hundirse, la actitud a la defensiva de los infelices oficiales por su participación en el tiroteo de la bodega lo restringían a calidad de culpable porque sí personas en estado grave y uno de ellos había muerto sin poder llegar a atender sus heridas, sin embargo él se trataba de una víctima más en ese lío al cual fue condenado cuando su padre le ofreció como cheque en blanco porque todas las personas son humanos hasta que tienen el poder de tirar del gatillo.

La sensación de tener algo y perderlo es terrible, el amor nunca fue cosa suya realmente detestaba muchísimo el sentido de posesión que tenían las personas cuando estaban en una relación, odiaba por completo las cursilerías cosas como sentir el calor ajeno al despertarse con alguien y prestar atención a las palabras egoístas de los demás porque siempre supo que el dinero, su cuerpo y personalidad le encantaban a los peores infelices que añoraban con tenerlo de rodillas con un dolor mandíbula terrible solía no molestarle para nada eso. Al parecer la vida no quería dejarle tan fácil caer por amor Jeon Jungkook era simplemente demasiado bueno como para estar con él eso pensaba, no lo malinterpreten está totalmente consciente de lo que vale el problema era que enserio cuando se trataba de una persona buena se le venía a la mente en primer lugar él y tenía más que asegurado que todas las veces que se quedaba mirándolo más de la cuenta se trataba de amor, podría jurar que su risa era la misma escalera al cielo, su belleza simple y honesta era lo que más adoraba del azabache. Ahora se trataban de dos piezas de rompecabezas conjuntas lanzadas a la fuerza para evitar armarlas, quería pensar en una utopía alternativa donde ambos pudieran estar solos sin nadie que los buscara, sin arriesgar la vida, sin tener que desear tener más tiempo, pero esas cosas le hacían solo sentirse más miserable por estar encerrado cuando no tenía idea del paradero de la persona que amaba.

Las reuniones continuaron en un par de días donde se vieron obligados a realizar la búsqueda por su cuenta porque no solo se trataba de un simple compañero para ese equipo de trabajo que recordaba como si fuera ayer el ingreso de un jovencito algo retraído de personalidad, pero increíblemente hábil con el trabajo eso duro hasta que la confianza reinó, se volvieron cercanos sacando a relucir aún más esa persona alegremente escondida, de sonrisa dulce y ojos como si fueran su primera vez viendo el mundo, esos mismos ojos que le habían dado una razón a Kim para no volverse condenadamente loco porque así como terminó enamorado de ese chico que se convertía en su más reciente ladrón de sueños, dueño de sus lamentos y suspiros porque amar es dulce, dulcemente doloroso.

Por un lado estaban Min y Park que se dedicaban de lleno a la investigación tránsfuga, donde no hacía más que mantener al margen los pobres nervios del menor porque le parecía increíble todo lo que había hecho hasta ahora, los rumores eran rápidos sumamente su presencia en ese mundillo escondido y la desaparición de Jeon fue la primera causa de apuesta de aquellos barrios de murallas rotas y zapatos gastados, donde el poco miedo se desvanecía con la convivencia de la maldad, esa misma que le hizo enterarse de la cantidad de dinero que se pedía por encontrar al agente con o sin vida, apuesta que se vio obligado a elevar el castaño con la esperanza de ser él quién lo recuperará y no los imbéciles secuaces de Malvin, confirmaron con ello que Jeon no estaba desaparecido por mano de la Ggangpae sino que otro integrante se abría en la carta de posibilidades.

Paso una semana hasta que dejaron en paz a Kim, solo porque tenía una citación al juzgado por el caso su padre ante el plazo de prisión preventiva y el mundo se le venía abajo porque estaba de vuelta en un avión a Corea que jamás se sintió tan solitaria como lo era ahora, apenas era capaz de sentir las lágrimas que venían a cada minuto que el dolor se volvía insoportable escoltado por miembros policiales adheridos al conflicto de Macao, hizo un esfuerzo sobre humano por mantenerse firme como podía para la tranquilidad de su afligida madre, los rumores llegaron a los medios, era de esperarse el daño tremendo que haría para la compañía siguió intentándolo con más fuerza porque mientras más rápido acabara todo podría volar de vuelta a Macao no importaba que le hayan prohibido hacer las cosas por su cuenta, no le importaba algo estúpido como la protección suya si tenía la incertidumbre de que su cielo querido estuviera siquiera vivo, tenía miles entrevistas en prensa, reuniones con abogados, retiros de acciones, todo parecía caótico que era sorprendente ver la monotonía en hacer recortes para Kim sin tocar un centavo de sus trabajadores porque al fin y al cabo solo eran ellos lo que tenía, ningún edificio, ni propiedad, ni acción le pertenecía.