-JA¡ acaso crees que te creeré eso?, Te puedo matar si quiero e irme de aquí cuando te allá matado-
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-Historia original mía, no copias ni adaptaciones por favor
-los personajes no son míos
-empezando desde 0...
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Despertó asustado, sudando a montón, aquella pesadilla lo atormentaba desde aquel día, volteo su cabeza al otro lado mirando el espacio vacío de la cama, asustado se pare de aquel objeto suave y casi corriendo salió de la habitación, busco por todas partes histérico, hasta cuando llego a la cocina, ahí estaba ella, se calmo de una.
Una hermosa chica de cabello castaño, unos ojos cafe-rojisos, una piel blanca y unas mejillas rosadas, llevaba un suéter azul.. su suéter y unos guantes rojizos. estaba tomando café mientras veía su celular, ella al notar su presencia lo miro.
—¿Paso algo amor?— Pregunto viéndolo.
—Solo tuve una pesadilla nada mas— Aclaro mientras la veía.
—Oh, bueno.. ¿quieres café?— Pregunto la chica mientras dejaba su celular y el pocillo en la mesita e iba hacia la almacena donde guardaba todos los pocillos.
—Uh, si claro— Acepto mientras caminaba donde antes ella estaba y sentarse en una silla.
—¿Con leche o sin leche?— Pregunto viéndolo por un segundo mientras caminaba hacia la estufa y dejaba el pocillo de lado para coger un tarro con tinto y llenar aquel objeto frágil.
—Sin leche por favor— Dijo mientras comenzaba a mirar al rededor, las paredes eran de un color vivo y brillante, como si apenas ayer fueran pintadas.
—Vale— Dijo ella mientras sacaba un tarro de color blanco y redondo, donde guardaba el azúcar y echaba dos cucharaditas de azúcar con una cuchara pequeña.
Ella se acerco a el y le dio la taza.
—Esta mañana llamo tu jefe, parecía un poco molesto, le dije que llamara mas tarde—
Dust al escuchar esas palabras, escupio su café del asombro y miedo.
—¡¿Que?!— Grito.
—Oye tranquilo, dijo que entendía y llamaba en la tarde— Explico ella.
Dust solo suspiro, casi le da un ataque.
Al terminar de beber el café, se levanto con intenciones de llevar el pocillo sucio al lavadero, pero Chara fue mas rápida y lo cogió primero.
—Lo lavo yo— Se ofreció ella.
Dust solo asintió y vio como ella se iba hacia adelante donde estaba el lavadero.
Miro sus manos y cuando volvió a mirar a Chara, ella ya no estaba, el se preocupó y se asustó.
Las paredes que antes estaban de un color vivo y brillante, ahora estaban en uno opaco y viejas, como si nadie hubiera estado viviendo ahí.
Dust busco con la mirada a Chara, miro hacia atrás suyo y se quedó congelado, ahí estaba ella, tirada en el suelo desangrándose con una herida en el pecho, en vez de llevar su suerte, llevaba un suéter verde.
