Noah Coleman
Observe a mi esposa cerrar el baúl después de decirle a chofer y a Leila que se adelantaran unos segundos, observó a nuestra hija en mis brazos que chupaba su dedo mientras observaba a su mamá con los ojos bien abiertos.
- ¿Estarás bien? -me pregunto acariciando mi mejilla. Creo que Rose se dio cuenta de eso porque estiró sus brazos para que su mamá la tomara-Ven aquí, señorita celosa.
Ella rió satisfecha cuando su mamá la tomó en brazos, claro ya tenía seis meses y era más fácil saber lo que quería o más bien que quería.
-Estaremos bien-le dije para tranquilizarla-Soy su padre, puedo hacerlo por cuatro días tranquilamente. Tu disfruta tu desfile, y yo me quedaré con ella.
-Pero es que le están saliendo un poco los dientes, y ha estado un poco molesta al respecto no quiero que...
-Brooke, estaré bien-estire mis brazos hacia Rose que miro a su mamá y luego me dejó levantarla-Tengo todo resuelto, y se te hara tarde para tu vuelo.
Ella suspiró y pasó una mano por su cabello, pero asintió, se acercó y besó la mejilla de nuestra hija y luego la mía.
-Mamá vuelve en cuatro días-le dijo a Rose tomando su manito-Te quedaras con papá ¿Bien?
Ella balbuceó algo parecido a mamá y lo sabíamos porque ponía sus brazos hacia Brooke, pero ella beso su manito y la dejo.
-Te amo-le dijo a Rose y después me miró-Y también te amo a ti-miró a Leila que estaba esperándola dentro de el auto moviendo su mano-Volver en cuatro días.
Le dije que estaba bien y antes de irse nos dio un beso a cada uno, y se fue. Rose se quedó mirando el auto y vi que hizo un puchero cuando se dio cuenta que su mamá no regresaba, besé su mejilla y antes de que se pusiera a llorar entre a casa.
No estaba nervioso, digo es mi hija después de todo. Pero Rose pasaba mucho tiempo con Brooke y quería a su mamá más que a nadie en el mundo, pero creo que podría funcionar no ver a su mamá por cuatro días si pasaba el tiempo conmigo.
-Rose-la llame y me miró con sus ojos llenos de lágrimas-Hija, mamá volverá en unos días mientras pasaras tiempo con papá ¿No te parece divertido?
Mi bebé no hizo nada más que poner su cabeza en mi hombro, sonreír, pero cuando note que estaba empezando a babear me apresure a la sala donde habíamos dejado su toalla y limpie su boca y mi camisa. A Rose le estaba empezando a salir su primer diente, por lo que lloraba y estaba indispuesta por ratos, así como que babeaba más de lo normal haciendo que nosotros fuéramos a todos lados con toallas extras.
Me decidí por pasar un rato en su habitación, Rose se entretenida con la cosa más pequeña por lo que improvise jugando con peluches de animales haciendo una obra que tal vez no era merecedora de un tiempo, pero a ella parecía divertirse.