Mi niñero

Capítulo 22

Dos semanas después

-¿Y cómo vas con Sasuke?- preguntó divertida Ino.

-Pues bien...- contesté riendo -Aún seguimos "saliendo"- hice comillas con mis dedos.

-¿Aún?- dijo sorprendida.

-Sí...- le contesté ahora algo cabizbaja -Pero no hablemos más de mi- dije tratando de sonreír -¿Y Sai?- le pregunté subiendo y bajando las cejas.

-¡Genial!- dijo con una enorme sonrisa en su rostro. Ino y Sai tenían dos semanas de que habían comenzado a salir, y una de novios.

M e sentía muy feliz por ella, pero me hacía pensar mi situación con Sasuke. Teníamos más de cuatro semanas de estar "saliendo", cosa que me hacía pensar que, tal vez, solo estaba jugando conmigo para pasar el rato, pero ese pensamiento cambiaba cuando estábamos juntos.

-¿Saku?- escuché que pronunciaban seguidamente mi nombre hasta que reaccioné. Me había quedado pensando.

-¿Si, si si?- dije riendo mientras sacudía ligeramente mi cabeza.

-¿Estás bien?- me preguntó Ino riendo -Últimamente estás muy distraída-

-¿Qué? ¡Claro que no!- solté una carcajada.

-¡Oh, claro que no!- dijo sarcásticamente mientras abría la puerta del copiloto de mi auto. Sasuke me lo había regresado después de unas cuantas "súplicas" muy a mi estilo.

Flashback

-Sasuke...- dije con la voz más tierna y delicada que pude hacer.

-¿Qué pasa?- me preguntó despegando su mirada de la televisión para voltear a verme.

-Sabes...- le dije mientras hacía dibujitos abstractos sobre su pecho -Extraño mi auto- le miré suplicante.

-¿Ah sí?- se acomodó en el sillón para envolverme en sus brazos.

-Si- besé su mejilla.

-No lo sé...- dijo soltando una pequeña risita -Yo creo que aún no es suficiente castigo- levantó una de sus cejas para provocarme.

-¡Sasuke!- alargué frunciendo el ceño.

-Convenceme-

Ahora yo levanté mi delgada ceja izquierda mientras que él me miraba divertido esperando mi actuar.

Quité sus brazos de mi y así subí mis piernas al sillón para después ponerlas cada una a los costados de Sasuke, quedando yo sentada en las suyas, teniéndolo de frente.

Comencé a repartir besos inocentes por su mejilla, barbilla, nariz y frente.

-¿Me das mis llaves?- le pregunté sonriente pero este negó con la cabeza.

Me acerqué nuevamente, pero ahora con solo un punto fijo. Sus labios. Con la punta de la lengua delinee el perfecto margen que los definía, después de jugar un poco con su labio inferior, acoplé nuestros labios en un apasionado beso. Se mezclaban con un perfecto compás. Hasta que sin siquiera avisarle introduje mi lengua en su boca. La suya rápido fue al encuentro de la mía. Mientras que yo despeinaba su oscuro cabello, él acariciaba mi cintura. Poco a poco me separé de sus labios, uniendo nuestras frentes pregunté de nuevo.

-¿Ya me las das?- pero este sin siquiera abrir los ojos, hizo un sonido con la garganta para decirme que no.

Reí y volví a acercarme lentamente a sus labios. Sasuke conforme fue sintiendo mi cercanía entre abría los labios para así poderse acoplar a los míos.