Leo desde que tengo memoria. Al principio todo lo que caía en mis manos; hoy adoro el terror,  la ciencia ficción, los fanfics,  los clásicos y la novela homoerótica. Admiro a Tolkien, S. King, Lovecraft, Bioy Casares,  O. Scott Card, García Márquez. "Los Miserables" me conmovió en lo más profundo, al igual que "Las Uvas de la Ira". Leí mucho, pero es mucho más lo que me falta y desearía leer. Eterna frustración sin remedio.
Escribí cientos de cartas para la persona que más amé,  sueños en un blog ya olvidado, y hace diez años descubrí los fanfics y decidí continuar  mi manga favorito: Slam Dunk. 
Inconstante siempre como único rasgo constante a la hora de escribir. No lo terminé.  Diez años después estoy dispuesta a continuarlo y concluirlo. Más madura, menos febril, con mejores herramientas y más tiempo, principalmente. 
Llevo una treintena de capítulos, que iré editando y subiendo. 
También en mente un par de historias propias, que  aún no sé si saldrán  a la luz, pero lo deseo.
Mi mayor impedimento es cuando pienso que todo está escrito, todo está dicho, todo inventado. Por suerte, no siempre pienso  así.  
Por más trillado que sea un género,  se puede agregar el toque personal y permitirse el disfrute propio y del lector. Una de las frases favoritas con mi compañero de vida: "el público se renueva". Un total acierto.