Al llegar al fuerte, Max nos presentó a su hermano.
—Cómo decirles a tus amigos que eres el hermano feo, sin decirles que eres el feo —se burló el muchacho.
Reímos y Max, para sorpresa, también.
—Ay sí. Como si no hubiera sido yo el que cantaba esa canción…
—Ay, no, no, no…
—Caminando por el bosque, con un monstruo me encontrééé —empezó a cantar Max—. Como no tenía nombre, me acordé de Jorgeee…
El chico resopló.
—Mi hermano mayor es taaan maduro —dijo rodando los ojos.
—Oooh, Jorge, qué feo que eres túúú…
—Mira, nos parecemos, así que yo no cantaría tan alto.