Peligrosa Elección II: Are you ready for a new life?

Capítulo 11.

*****Narra Sarah*****

Después de salir del cine, decidimos ir al Burguer más cercano, para cenar como gente saludable.

-Quiero una hamburguesa de esas - dice Carlos señalando el cartel-, y patatas, y también un...- le cierro la boca.

-Eres un gordo- río.

Cuando todos sabíamos lo que queríamos, Ash y yo fuimos a pedir.

-¿Vamos a poder llevarlo todo nosotras?- le digo.

-Tienes razón- dice Ash con una sonrisa pícara-, ahora vuelvo con refuerzos.- vuelve hacia la mesa.

Estoy mirando el móvil cuando de repente me llega un mensaje, de Álvaro.

*WhatsApp*

Álvaro: Deberíamos pedir ya.

Yo: Te tengo a unos metros y me hablas por aquí, ¿enserio?

Álvaro: Más bien me tienes a centímetros.

Siento su aliento en mi nuca. Maldita Ashley, no podía mandar a otro, claro que no.

-Déjame adivinar, Ash te ha mandado para que me ayudes, pero en realidad pretende que hablemos.- espeto, cruzándome de brazos.

-Yo venía sólo a ayudarte, pero si quieres podemos hablar...- dice con un tono de tristeza.

Me parte el alma ver a Álvaro así, pero necesito explicaciones.

-¿Vamos al baño?- señala la puerta- Para hablar, me refiero.- dice avergonzado.

Le cojo la mano y entramos en el baño de mujeres.

-Álvaro...- no me dejó continuar.

-No, Sarah, déjame aclararte las cosas y luego podrás decirme lo que quieras.

-Adelante.- me apoyo en la pared.

-Lo siento, siento lo que dije aquella noche, te quiero Sarah, te quiero como nunca he querido a nadie, sentía que eras mía, que por fin tenía a alguien en quien poder confiar, a quien poder besar, estaba completo, tú eres la pieza que falta en mi vida, luego te vi tontear con Carlos y todas mis esperanzas desaparecieron y dije todas esas estupideces, no me lo perdonaré jamás pequeña, te necesito, que los celos me llevaran a hacerte tanto daño me consume por dentro y no puedo seguir así Sarah, estoy enamorado de ti.

No podía creer que todas esas palabras las estuviese diciendo Álvaro, y mucho menos que fuesen para mí.

-¿Y bien? Di algo Sarah, por favor, necesito que me perdones...- una lágrima recorre su colorada mejilla.

-Bésame.- le miro.

-¿Qué?- contesta, confuso.

-Bésame, Álvaro.

Sus ojos se vuelven oscuros, sus músculos se relajan y se acerca a mi con paso firme.

-Te quiero.- me susurró antes de que nuestros labios se unieran.

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Salimos del baño y finalmente pedimos, Carlos me va a matar por tardar tanto.

-¿POR QUÉ HABÉIS TARDADO TANTO?- dice Carlos desesperado, a punto de tirarse de los pelos.

-Hay más gente aparte de nosotros.- contesta Álvaro.

Carlos refunfuña y se tira a su hamburguesa mientras Ash y Blas me interrogan con la mirada.

-Cuéntamelo todo.- me dice mi hermano en voz baja.

-Tú eres el último a quien le contaría algo de esto.- sonrío satisfecha.

-De todas formas, Ash me lo contará después.- ríe.

-Tampoco le voy a decir nada a Ash, es cosa nuestra- le doy un trago a mi Coca Cola.

-Como quieras...- dice serio.

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Terminamos de cenar y cada uno se va a su respectiva casa. Ahora Carlos vive conmigo, ya que Blas vive con Ashley y ninguno quería dejarnos solas.

- ¿Qué es esto?- Carlos levanta un sobre que hay encima de mi cama.

-No lo sé.- me pongo la camiseta del pijama- Dámelo.

Ambos nos sentamos en la cama y yo abro el sobre, que contiene una pequeña nota de color verde.

La perfecta caligrafía con la que estaban escritas las palabras ya la había visto antes.

"Mañana pasaré a recogerte sobre las 23:00, tenemos cosas que hablar."

-¿Quién será?- pregunta Carlos, extrañado.

-No tengo ni idea...

-Eh espera, dale la vuelta a la nota.

Le dí la vuelta y ahí está su nombre.

-Damon.- susurramos a la vez.