capitulo 15

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Bodega

Me encontraba desde ya hace varias horas sentada en el último piso de la bodega donde se desarrollaba la fiesta, no sentía ningún apego por estar ahí abajo, ningún de los chicos de la UAC habían llegado y Dylan y Cody me habían avisado que llegarían tarde, la música hacia temblar el suelo, me parecía increíble que este fuera aquel mismo lugar donde venia a pensar por ser callado y tener una hermosa vista de la ciudad, hace dos años este fue mi regalo de navidad por parte de mis hermanos... un lugar con aquel estilo industrial que tanto me gustaba, silencioso y espacioso donde venia a escribir o simplemente a relajarme viendo las luces de la ciudad, normalmente me sentaba en el marco de la enorme ventana y pensaba por horas, como lo hacia ahora con la canción ADN de Little Mix sonando de fondo cuatro pisos mas abajo, entonces mi teléfono sonó tomándome por sorpresa.

-¿si? -conteste algo ida-

-¿Cass? -era la voz de JJ- estamos afuera pero los guardias no nos dejan pasar-

Mataría a quien hizo la maldita lista.

-estaré ahí en un minuto -le indique antes de colgar, me coloque los zapatos y baje a toda prisa sintiendo un extraña sensación de emoción, me sorprendí un poco al darme cuenta que era porque iba a ver a Spencer-

Abajo todo era un mar de gente, cuartos presionándose mutuamente al ritmo de la música, personas bebiendo en la barra que habían instalado para la fiesta, había gente sobre las mesas gritando las letras de las canciones demasiados borrachos como para darse cuenta de lo ridículos que se veían, sólo unos pocos se mantenían sentados y los de la zona VIP se divertían hablando y bebiendo el licor caro y disfrutando de los mimos que las camareras (que en realidad eras prostitutas) les brindaban... Creó que no era tan malo que al final ni Rossi o Gideon fueran venir... Pero me parecía curioso ver como reaccionarían todos, porque no todas las camareras eran mujeres, al fin de cuentas, era mi cumpleaños... Y me gustaban los hombres con buen cuerpo.

Al lograr llegar a la enorme puerta corrediza uno de los guardias del interior, me miró asintiendo y la abrió completa dejándome salir y cerrándola a mis espaldas, ahí estaban los chicos discutiendo con Thomas, un gorila que fue campeón de boxeo en los suburbios... Podrán imaginarse que es como diez veces Derek Morgan.

-¿Thomas que les haces a mis amigos? -pregunte amable, el me miró e inclinó su cabeza en señal de respeto-

-Señorita, ellos no están en la lista, siento mucho esto -yo sonrei y negué divertida-

-no importa, has hecho ti trabajo de maravillas hoy -lo felicite, el sonrei un poco y nos abrió la puerta- me alegró de verlos -le dije a los agentes una vez entramos- pueden sentarse por aqui-

-bonito lugar -comentó Emily levantando un poco la voz para lograr ser oída, no había notado lo bien que se veían todos sin los trajes grises... Aunque Spencer seguí igual-

-¡lo se! -exclame, estábamos llegando a la VIP, el guardia ni siquiera dudó en quitar el cordón y dejarnos pasar- bien, este es su lugar, pidan lo quieran y se los traerán y... -estaba explicando cuando una voz conocida llegó a mis oídos desde las cornetas que se extendían por el lugar-

-¡feliz cumpleaños hermana! -exclamó la voz de Cody que fue victoriada por los fiesteros. Al parecer ya habían llegado-

Estuve un rato hablando con los chicos y después de un delicioso cóctel de fresas Garcia dejó algo que me llamó la atención.

-todos los del servicio son muy sexys -asenti y time un sorbo de mi bebida-

-eso es por la filosofía de mis hermanos -explique mirando a las chicas- nunca deben caer a sus encantos, mis hermanos tienen la idea de que si, el lobo se disfraza de oveja será más fácil cazarlas-

-y si funciona -dijo la conocida voz de Dylan a mis espalda, me gire emocionada y me encontré de frente con mis dos hermanos-

-¡chicos! -no me contuve de abrazar a ambos-

Ellos me recibieron entre sus brazos y Cody me hizo girar, al separarme la sonrisa en mi rostro desapareció... Juntar a estos dos con los agente sería como juntar a gatos y perros.

-veo que los rumores son más que ciertos... -dijo Cody con diversión- ¡amigos del FBI! ¿Quien lo diría?-

-mucho gusto, soy Dylan White -se presentó con un apellido falso-

-yo soy Cody McMiller -lo imitó y yo rode los ojos-

Los del equipo se presentaron y al llegar la presentación de Spencer note como este parecía sentirse mal.

-¿estas bien? -pregunte en voz baja para no interrumpir la charla un poco incómoda entre mis hermanos y los agentes-

-me duele un poco la cabeza, eso es todo -contestó en mi odio lo que provocó que mi piel se erizara-

-vamos arriba, ahí podrás descansar -sugerí y el asintió, yo me gire para hablar con los demas- Spencer no se siente muy bien y lo llevaré a... -pero Cody me interrumpió-

-no, no, no necesitas escusas si quieres ir a tener sexo con tu novio no debes escusas -explicó y yo lo mire mal-

-el NO es mi novio -bufe enojada- y no vamos a tener sexo, yo a diferencia de ti no me acuesto con alguien todos los días -Cody estalló en una carcajada a la que lo siguió Dylan y finalmente yo- ya perdón, pero debo ser una buena anfitriona-

-tan tierna y nada peligrosa como siempre -se burló Dylan jalandome una mejilla- anda, se libre pajarillo-

-idiotas -les dije divertida antes de ir con Spencer a las escaleras- perdonalos, el oxígeno no les llega al cerebro-

-no te preocupes... -susurro el-

Parecía algo incómodo, creó que era por el comentario de los chicos pero decidí ignorarlo, ya arriba el miró todo impresionado.

-es lindo... -comentó y yo asenti-

-vengó aqui cuando necesitó pensar -me senté en el marco de la ventana y el tomó asiento a mi lado, al ser de noche las luces de la ciudad se veían impresionantes-

-¿Cassy? -preguntó Spencer a mi lado-

-¿si?-

-¿como sabias lo de la esposa de Hoth? -lo mire divertida y extendí mi pulgar- ¿qué...?-

-es una promesa, yo... Seré yo misma contigo, sin secreto, ni máscaras pero con una condición -el asintió viéndome atentamente- tu serás igual conmigo ¿si? -le acerque más mi meñique y al ver que el no sabía que hacer me rei entre dientes y tome su mano entrelazando su meñique con el mío- los griegos se tomaban esto en serio, cuando se rompía la primera era para cortarle el dedo meñique al otro... Esperó que no terminemos igual-

El sonrió y apretó más su dedo con el mío, sus dedos eran mucho más largos que los míos sin contar que su mano podía fácilmente envolver la mía, me sorprendí un poco al darme cuenta que aún cuando terminamos de hacer muestran promesa de meñique el dejó su mano sujetando la mía... Tal vez estaba loca por confiar en un chico que apenas lo había empezado a conocer.

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Ta daaa''' -aquo el capítulo de hoy ;) voten y comenten :*

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