» La tauromaquia española.

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3 de octubre de 2016.


Bueno, hace unos día tuve un gran debate en clase sobre este tema y me dio mucho en lo que pensar. Por lo que me veo en la necesidad de mostraros argumentaros dichos por muchas personas y otros dichas por mí.

En mi país corre la tradición de torturar toros desde hace siglos. Los ciudadanos que apoyan esta práctica conocen infinitas formas de hacer sufrir a estos pobres animales, los cuales solo desean volver a su vida tranquila de herbívoros.

La más conocía es el toreo. Consiste en encerrar a un toro en una plaza en la cual un hombre llamado torero comenzará a mover su estoque entre el capote que intentará golpear mil veces el toro sin escapatoria. Lo que si golpeará su piel será el filo de tal arma que troceará su lomo como si de una piedra sin sentimientos y dolor se tratara. Sin embargo no es suficiente, la gente abuchea reclamando más sangre y sufrimiento por parte del animal y más hombres comenzarán a clavar sobre la piel abierta del animal lanzas con filos de largos centímetros que se abrirán camino entre la carne del toro. El pelaje negro del hermoso animal comenzará a mancharse por la sangre carmesí.

Nuestro amigo el toro esta asustado y comienza a ver todo borroso. Le cuesta tanto respirar y ya no puede correr más para poder defenderse, sólo se para e intenta coger sus últimas bocanadas de aire que debían haber estado llenas del aroma de los verdes prados y no de la arena manchada de su propia sangre. Cierra los ojos y el torero le corta el rabo y las orejas mientras el animal llora por el dolor acumulado en su cuerpo. Sin embargo ningún espectador podrá ver esa pequeña lágrima que expresa que siente y padece.

Ya es demasiado tarde. El torero atravesó su corazón con su ya manchado estoque.

Esta es la mejor descripción que puedo dar sobre el toreo. Sin embargo existe más como el toro lanceado, el toro embolado, los encierros ... Tantas torturas que si comenzará a describir cada una de ellas no terminaría nunca.

Vamos al grano. Mi madre siempre me dijo que hay que tolerar los gustos de los demás, sin embargo creo que esto es intolerante. Yo por lo menos no tolero ni toleraré estas prácticas debido a que un ser esta sufriendo por los gusto de seres humanos insignificantes y estúpidos que están descontentos con sus míseras vidas.

(Elo, calmate. Sé objetiva y educada. Respira.)

¿Qué pasó con ese maravilloso debate?

Perdí la poca fe que tenía en la humanidad.

Pensé que la gente de mi edad, la nueva generación, sería abierta de mente y del siglo XXI. Sin embargo me encontré con una desafortunada decepción. La profesora organizó dos filas de mesas y sillas en la clase y aquellos que estuvieran a favor del toreo debían ir a la derecha y los que estaban en contra a la izquierda. Mi sorpresa fue la siguiente: sólo cuatro personas nos habíamos sentado en este último lugar, en una clase compuesta por veinticinco alumnos.

Increíblemente esas veintiún personas restantes se nos abalanzaron encima con argumentos poco válidos y como buena contrincante que soy refute cada uno de estos.

Empecemos con los geniales razonamientos que los taurinos repetían como loritos:

Razonamiento 1:

La tauromaquia es parte de nuestra cultura, lleva prácticandose desde hace siglos en nuestro país.

El arte de no poder hablar. IWo Geschichten leben. Entdecke jetzt