Capítulo 2

579 40 8
                                    

Jade's POV:

Harry. La única palabra que rondaba por mi cabeza. Estaba enfadada con él, y tenía argumentos. De repente, un sentimiento de culpa empezó a nacer en mi conciencia. Sabía por qué, pero no entendía por qué me echaba a mi misma la culpa de algo en lo que no tenía nada que ver. Bueno, ahora me tendría que centrar en otra cosa más importante. El trabajo con Niall. DIjo que iba a venir, pero no quedamos en una hora en concreto, así que podía quedarme esperando un buen ratito. El chico parecía un poco despistado, la verdad. Pero, tampoco tenía nada que hacer en toda la tarde. Me preparé un chocolate caliente y cogí un libro de la estantería. No me fijé ni en cuál era. Me paré a leer el título y ponía "The Duff". Oh, este me lo había regalado Harry. Mierda, ahora me pondría a pensar en él y le daría vueltas a todo lo ocurrido. Me puse a leer la sipnosis, intrigada por lo que podía contener aquel libro tan peculiar para mi. 

Bianca no se considera la más guapa del instituto, pero sí demasiado lista para dejarse engañar por el atractivo y mujeriego Wesley Rush. Por eso, cuando Wesley la llama Duff -apodo que utiliza para referirse a la chica menos agraciada de un grupo de amigas-, lo último que ella espera es acabar besándose con él.

Pero ha pasado y, aunque lo odia con todas sus fuerzas, el beso le gusta. Y sin apenas saber cómo, empiezan una relación secreta de amigos (o enemigos) con derecho a roce.

Poco a poco, Bianda descubrirá que tienen algo en común: ambos esconden un problema familiar. Resulta, además, que él la comprende y la escucha. De pronto se da cuenta, con horror, de que tal vez haya algo más que sexo entre ellos.

- Que situación más rara.- murmuré.

Me encogí de hombros y abro el libro por el primer capítulo. La verdad es que por la descripción parecía bastante interesante. Para mí, este tipo de libros me resulta peculiar, porque yo no suelo leer libros de este tema. Pero bueno, para todo hay una primera vez dicen, ¿no?

De pronto tocaron al timbre. Posé el libro sobre la mesa auxiliar y me levanté.

- Cómo sea Harry le mato.- pensé.

Fui a abrir la puerta. Pero no, no era Harry. Y por una parte eso me decepcionó un poco. ¿Un poco? Me decepcionó lo que se dice bastante. Era Niall. Parecía que no se había demorado.

- Holi.- saludó.

Me reí. No me solían saludar así, y esto me parecía gracioso. 

- Hey.- respondí.

- He venido por lo del trabajo.- informó y sonrió.

- Lo sé, lo sé. Venga, pasa.

- Gracias.- dijo él.

Me volví a reír. Este chico era muy gracioso aparte de agradable.

 - Mmm...chocolate caliente.- exclamó él. 

- No te lo comas. Espera, que te preparo uno.

- ¡Vale! Que maja eres, Jade. ¿Estabas leyendo? Este libro me lo leí una vez. Se lo quité a una compañera de clase que no me lo quería dejar. Me quedé alucinado. Es un poco...

- ¡No me destripes el libro Niall!- chillé interrumpiendole.

- Ah, vale vale. Que se enfada la peliazul.

- ¡Eh! No te metas con mi pelo. ¿A que no te preparo el chocolate?

- Me callo.- murmuró él.

 Solté la tercera risa de la tarde y noté cómo él sonrió. Me dirigí a la cocina para prepararle el chocolate. Es evidente que no voy a estar yo tomandome un chocolate caliente y no ofrecerle nada al chico. Además de que él es un glotón. Lo vi comer hoy en el instituto y la verdad es que no sé dónde coño mete todo lo que come, pero en fin, a mí me pasa lo mismo, como, como, como y como y no engordo. Pero en fin, somos así de raros. Eché los polvos de chocolate en la leche y lo metí en el microondas. Me sobresalté al sentir unas manos sobre mi cintura.

Little Me ••• Jade Thirlwall, Harry Styles y Niall Horan •••Where stories live. Discover now