DIARIO DE UNA CHICA MUDA

No. 03

-¡Hija, despierta! Llegarás tarde-

- Fueron las palabras de mi madre aquel día, yo no comprendía el "Llegarás Tarde" miraba la hora y estaba normal, aparentemente mi madre se dió cuenta de mi pequeña duda.

-¿Pones esa cara por la hora?-
- Asentí con la cabeza.
-Hija, debemos llegar más temprano. Recuerda que con tu padre iremos a hablar con la profesora.

- En ese momento recordé todo lo conversado el día anterior, era cierto. Aparentemente tendrían una "charla" algo así había dicho mi padre ese día.

-¿Ya decidiste qué vestido usarás?-
- Negué con la mirada baja.

-Muéstrame las opciones-
-Me dirigí hacia el armario y saqué dos vestidos. Uno amarillo y otro rosa.

-¿Quieres que te ayude a escoger?-
- Asentí.

-Bien, hija te enseñaré algo. Intenta siempre verte alegre, como primer día de clases sobretodo.
¿Qué vestido para ti es más alegre?-
- Señale el amarillo.
-Buena opción, úsalo con los zapatos blancos. Te esperaré abajo.-

- Usé todo lo que me dijo mi madre y bajé a desayunar, al hacerlo me encontré a mis padres conversando seriamente pero al verme cambiaron completamente sus composturas.

-Liz, mi querida musa. . ¿Estás lista para ir al primer día de clases?- Dijo mi padre al verme.
- Asentí con la cabeza y comencé a saltar alegremente.
-¿Ya viste que linda es nuestra hija?- Dijo mi madre dirigiéndose a mi padre.
-Toda esa belleza la sacó de tí cariño- Luego de unos minutos esa conversación se tornó en un cálido y pequeño beso.

-Liz, no alcanzas a tomar desayuno. . ¿Te gustaría ir comiendo una manzana en el auto?-
- Asentí y luego de unos instantes ya estábamos los 3 en el gran auto blanco.

-Bien, Liz cuando lleguemos puedes buscar a tu amigo Nathaniel. No estaremos mucho tiempo, solo queremos aclarar algunas cosas y no me gustaría que estés sola.- Dijo mi madre dirigiéndose hacia mí.
-Yo debo hablar con ese amigo tuyo. Nathan..-Mi padre no pudo seguir hablando, tal que mi madre lo había interrumpido.
-Ya hablamos de eso Cariño, basta. Tu hija tiene 6 años y necesita tener amigos.
-Perdón amor, es cierto. Es que.. Estoy nervioso, eso es todo.
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-¡Mierda! Me pasé la calle.- Exclamó mi padre.
-¡Cariño! !Está la niña presente!
-Oh, perdón Liz. Me descontrole, es que odio llegar tarde y ahora tendré que darme una vuelta enorme.
- Yo comencé a reír un poco, mi padre la mayoría de las veces se pasaba las calles y su reacción siempre me hacía reír.

By: Shayumii_Pio.