Con Ojos De Otro Mundo

Menudo Asco de Nave

 Tío, ni con ningún golpe así me he despertado en toda mi vida, lo único que recuerdo es que estaba con Clank en nuestra nave de camino a una entrevista de un programa galáctico llamado Detrás de los héroes, porque, colegas, soy una gran estrella en todo el universo al salvar una galaxia. Pero un tipejo nos atacó por la espalda y ni pudimos defendernos... Porras, aún no logro abrir mis ojos, la verdad es que son muy grandes, hay algo que me gusta de estar así, noto como si alguien estuviera a mi lado cuidándome, nunca había sentido algo igual adoro esta calidez... A lo mejor es una tía y estará como un tren... QUIERO DESPERTAR.

Espera, creo que eso es lo que menos importa ahora, puede que Clank, mi mejor amigo, esté en problemas y no sé como abrir mis gigantescos ojos saltones. Empiezo a sentir un aroma bastante agradable y suave, parece que por fin podré despejar la mente de mis dudas y saber dónde estoy... Parece una casa normal y corriente, pero por lo que veo en las ventanas estamos a una buena altura, por lo tanto esto es un piso, debo de estar en una sala de estar con un televisor de pantalla plana, tumbado en un sofá de cuero negro y cómodo, lo que olía era un poco de perfume que salía de un aparato escondido en una parte del televisor.

Lo primero es lo primero, dónde se encontraba Clank, pues no me tuve que preocupar, todo este tiempo ha estado conmigo a mi lado, parece que también le cuesta despertarse de su letargo, le atizo una bofetada con la fuerza adecuada, va abriendo los ojos poco a poco y me reconoce rápidamente. ¿Quién no reconocería a un lombax con las orejas largas y puntiagudas, unos ojos enormes de color verde, unas manos grandes y de cinco dedos siempre cubiertas por guantes largos que me llegaban hasta los codos, una cola como la de un león de color marrón amarilleado, alguien que además usa un pantalón marrón oscuro y una camiseta marrón clarito?

Clank está con la boca totalmente abierta por el ambiente, yo no soy tan listo como el así que ahí va la bomba.

-¿Le pasa algo a este lugar?

-Ratchet...-dice mi nombre con una cara de pocos amigos.

-Acabo de despertar-me tengo que quejar por supuesto-y no sé qué lugar es este.

-Es que...-Clank se tapaba la cara con sus manos robóticas de tres dedos, como si nos hubiéramos metido en la boca del lobo... Como de costumbre-Estamos en una casa de humanos, lo que quiere decir que estamos en la Tierra.

Me quedo en blanco, vale un planeta más visitado y ¿qué pasa? Solo es uno más ¿Qué tendríamos que temer si ya no había problemas? Solo puse una cara de sí lo he entendido... Nunca sirven de nada.

-El consejo galáctico-comenzó a explicarme-dicta que una de las reglas intergalácticas, numero 00-285, dice claramente que ningún ser de otra galaxia puede visitar o quedarse más de un día en la Tierra.

Lo he oído y no me gusta nada, hemos incumplido una ley galáctica... Y de las gordas, si no salíamos de allí cuanto antes a Clank y a mí nos va a caer la juerga padre. Cogí a Clank a toda velocidad mientras comprobaba que tenía todo, ni nos empeñamos en decir adiós pensando que habría alguien que nos salvó o yo deseando que fuera una nena para camelarla y salir por ahí, vimos un ascensor al salir del piso, pero si nos veía alguien lo llevábamos claro, por eso por una ventana salté hacia un cable de tender y con mi omnillave paramos en un callejón donde pillamos una moto con un casco, por supuesto yo al ser mecánico me está chupado hacer que funcione sin llaves. La velocidad era impresionante no paraba de sentir como el viento fluía a mi alrededor, claro que ahora lo siento por el dueño, porque hice que funcionara pero no que parara... En un callejón oscuro, se distinguía la luz parpadeante de nuestra nave, jope había hecho lo imposible por tener esta nave perfecta y ahora está destrozada por completo.