|| Historia basada en la saga cinematográfica de Crepúsculo ||
• Alena Swan decide acompañar a su hermana en su regreso a Forks, sin saber que todo lo que creía surreal existe, es tangible y visible, que su vida cambiaría por completo. Y mucho menos...
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Narrador Omnisciente
—Can you kiss me more? We're so young, boy We ain't got nothin' to lose, oh, oh It's just principle Baby, hold me 'Cause I like the way you groove, oh, oh.
La voz de Lena se escucha a todo volumen en su habitación mientras es acompañada por aquella canción, se pasea de un lado a otro bailando y utilizando su cepillo como micrófono mientras se arregla para el baile escolar de Jacob, al cual ella lo invitó por petición del moreno. Si, suena gracioso pero al final fue algo que ninguno olvidará jamás y realmente valió la pena.
—I, I feel like fuckin' somethin' But we could be corny, fuck it Sugar, I ain't no dummy, dummy I like to say, what if, but if We could kiss and just cut the rubbish Then I might be on to somethin' I ain't givin' you one in public I'm givin' you hundreds, fuck it.
Continúa cantando mientras se sienta frente a su tocador y termina de arreglar su cabello, que debido a sus constantes distracciones gracias a la música, ha estado trabajando en el desde hace una hora. Aunque el hecho de que se enrede tan fácilmente y no logre sujetarlo en donde quiere también la atrasa y la desespera, por lo cual pierde más tiempo cantando y bailando para relajarse.
—Que joya de canción—murmura mientras sujeta el último pasador para sujetar sus pequeños cabellos y se coloca spray fijador arriba y en las ondas que resaltan la coleta en la parte posterior de su cabeza.
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Se pone de pie y retira la bata de seda que la cubría para colocarse con sumo cuidado el vestido de color esmeralda que Emily, Kim y Leah, le acompañaron a comprar a Port Ángeles. Con una mueca estira cuanto puede sus brazos hacia atrás para subir el pequeño cierre en la espalda baja y oculto entre la tela del vestido, suelta un suspiro de alivio cuando lo logra y camina hacia el espejo colgado detrás de su puerta para mirar su reflejo.
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