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Febrero 17, 2023.

Faltaba poco para que fuera media noche y de aquel estacionamiento subterráneo salió de un automóvil blindado color negro una mujera de cabello pelirrojo. 

El estacionamiento estaba casi desierto cosa que era extraña pues los locales recurrían con frecuencia a los supermercados sin importar la hora. De igual forma ella se aseguró de tomar su billetera, celular y llaves.

Joy Kim.

Necesito un favor

[Foto]

¿Podrías pasar a comprarlo? 

Te haré una transferencia y pasaré por ello en dos días.

Seguro.

La próxima vez procura avisarme mientras esté en el trabajo.

Así no hago dobles viajes.

—.

Escribía mientras se encaminaba hacia el elevador para poder ingresar al súper mercado.
Estaba tan concentrada en su celular que no se percató de la presencia nadie, solamente comenzó a sentirla conforme se acercaba al elevador.

Bloqueó su celular, se detuvo y se giró a ver para todos lados pues estaba segura de haber escuchado pasos detrás de ella, pero aún así, no había nada.

Continuó caminando y aún seguían aquellos ruidos, entonces el miedo comenzó a apoderarse de su ser que lo primero que se le ocurrió fue aumentar la velocidad de sus pasos casi al punto en que comenzó a correr pero, este último acto fue interrumpido al ser sujetada por una persona.

Intentó gritar por ayuda pero le cubrieron la boca, quiso correr pero la tenían sujetada del brazo así que su única opción fue pelear, tomó entre sus dedos sus llaves y comenzó a tratar de golpear al sujeto que la tenía, pero fue en vano, aquel hombre parecía traer algo que cubría parte de su cuerpo. 

Aunque quería, se estaba rindiendo, hizo lo que pudo al evitar ser arrastrada hasta quien sabe donde, pero su cerebro se desconectó por el terror y entonces sintió su vista nublarse.

Todo lo que pudo sentir fue su cuerpo estampar contra el suelo y la silueta de una tercera persona que parecía pelear con quien se convirtió en su secuestrador. Trató de ponerse de pie y de regular su respiración pero le estaba siendo complicado y no sabía el porqué. 

En un intento por ponerse de pie, una mano volvió a tomarla del antebrazo pero esta vez, con suavidad.

— ¿Te encuentras bien? ¿Te hizo algo? —Preguntó un hombre castaño.—

Sin embargo ella no sentía las fuerzas para responder.

— ¿Cómo te llamas? —Hablaron de nuevo.—

— Jisoo... Kim Jisoo. —Respondió la pelirroja entre pausas.—

— Bien Kim Jisoo, no te preocupes que no pasará nada malo, el peligro ya se fue. —Dijo el sujeto.— Mi nombre es Kim Taehyung. —Se presentó.— Confía en mí, te ayudaré.

Los sentidos de aquella chica iban y venían así que no tuvo alternativa alguna más que aceptar la ayuda. Tomó la mano de aquel pelicastaño quien la ayudó a levantarse y la abrazó por la cintura para ayudarla a caminar, el chico la llevó hasta la salida del gran establecimiento dejándola en la primer banca que encontró.

Ninguno comentó nada, él simplemente esperó a que ella se tranquilizara mientras que la pelirroja se ocupaba de eso, ella misma se controló.

— Bebe un poco de agua. —Le ofreció.—

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Jisoo: Gracias. —Respondió para dar un par de sorbos.— ¿Cómo dijiste que te llamabas? —Preguntó de nuevo. Por la conmoción no le había puesto atención.—

— Kim Taehyung. —Se presentó nuevamente.—

Jisoo: ¿Cómo llegaste ahí?

Taehyung: Venía para hacer algunas compras, te miré siendo jaloneada por un hombre que venía cubierto de la cara y no dudé en auxiliarte. —Explicó.— Eres la heredera y Ceo de una de las empresas de Seúl, ¿Cómo puedes salir sin seguridad?

Jisoo: Así que me reconociste. —Comentó.— No creí que fuera necesario, sin importar el apellido quiero seguir siendo una persona normal. —Respondió.— Pero aún así te lo agradezco, uhm, ¿Acaso tú no eres dueño la cadena hotelera más grande de Corea? Porque pareces familiar.

Taehyung: Lo soy pero no hablemos sobre eso. —Respondió acercándose.— Lo importante aquí es que tú estés mejor.

Jisoo: Lo estoy, hablo enserio.

Ambos se miraron atentamente creando una pausa total a todo, sus miradas no se apartaban del otro como si hubiera un imán atrayendolos mutuamente, se observaban con detenimiento.

Jisoo: Yo... Debo irme. —Murmuró desviando la mirada.—

Taehyung: Será mejor que yo te acompañe. —Opinó.— Puede que aún te estén esperando o te sorprendan de camino a casa, ¿No hay problema si vamos en mi auto?

La pelirroja negó y se colocó de pie, el chico le indicó en donde se encontraba el auto y le abrió la puerta para cederle la entrada, durante el transcurso fue sacándole plática a la chica para hacer menos tenso el ambiente.

Taehyung aún no la conocía pero algo que podía notar era la facilidad con la que la chica dejaba de lado sus emociones para volver a mostrar una apariencia neutral, a pesar de ser casi secuestrada momentos atrás.

En sus adentros agradecía por ese golpe de suerte de poder mostrarse como un héroe ante ella y obtener una gran carta a favor para su plan.

Al llegar a la mansión Kim, la familia de la chica corrió a la sala principal al escuchar lo que sucedió.

— Es que no entiendo qué era lo que hacías a altas horas de la noche y sola. —Comentó su madre.Park YeoJin— ¿Por qué te tienes que estar en problemas?

Jisoo: Joy me pidió algunas cosas y no vi necesario estar custodiada, era una simple salida al súper mercado. —Respondió luego de tomar un sorbo de su taza.—

— Pues esa simple salida casi te cuesta la vida. —Dijo su padre en un tono fuerte. El empresario Kim YeoJeong.— Es una suerte que este chico hubiera llegado o de lo contrario ahora mismo nos causarías un enorme problema, como es tu costumbre. —Escupió lo último de manera fría.— ¿Cuál es tu nombre?

Taehyung: Kim Taehyung, es un gusto conocerle a pesar de las circunstancias. —Se presentó.—

El mayor Kim lo examinó con la mirada mientras fruncía el entrecejo.

YeoJeong: ¿Kim Taehyung? —Repitió dos veces.—

Jisoo: Su familia es dueña de la zona hotelera Mariott. —Comentó.—

YeoJeong: Oh sí, estaba dirigida por Kim YeonJun. —Asintió.— Lamentamos mucho el accidente que sufrió tu...

Taehyung: Mi hermano. —Respondió.— Era mi hermano menor.

YeoJeong: Como él era quien administraba en Asia no te conocía, pero te agradezco que hayas salvado a mi hija, eso habla muy bien de ti.

Taehyung: Siempre que pueda ayudar a cualquiera que lo necesite, no dudo en hacerlo. —Contestó.—

YeoJin: Jisoo, ¿Por qué no subes a darte un baño para que puedas dormir? Esta pesadilla ya terminó. —Le susurró.—

La chica asintió con la cabeza y dejó su taza sobre la mesa de centro para ponerse de pie.

Jisoo: Voy a estar agradecida contigo de por vida. —Miró al chico.—

Taehyung: Que sea un baño caliente para relajar el cuerpo y puedas dormir. —Le recomendó.— Espero que mañana estés mejor. —Dijo en un tono suave.—

La pelirroja asintió con la cabeza y se despidió.

Taehyung: Bien, dejé a la señorita sana y salva en casa así que creo que es momento de...

— Un momento joven. —Lo detuvo el padre de Jisoo.— ¿Podemos hablar en mi despacho? Hay algo de información que quisiera intercambiar con usted.

El pelinegro accedió con un semblante dudoso, pero por dentro sonreía ampliamente.

Ya estaba dentro.



















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La Venganza || VsooWhere stories live. Discover now